La película Belmonte, del director y guionista uruguayo Federico Veiroj, ("El Apóstata", "La Vida Útil" ), pudimos verla en España en el pasado Festival de San Sebastián dentro de la sección "Zabaltegi-Tabakalera". Se trata de un drama en tono de comedia que explora el miedo de los adultos al paso del tiempo de manera muy irónica. Sin fecha de estreno en salas de cine de España.
Crítica de Belmonte
Resumen
- 1 Crítica de Belmonte
- 1.1 Ficha Técnica
- 1.2 Tráiler
- 1.3 Sinopsis
- 1.4 Premios
- 1.5 Dónde se puede ver la película
- 1.6 Por qué pintas siempre hombre desnudos?
- 1.7 Abriendo tramas
- 1.8 El tiempo de una cinta de arte
- 1.9 Más de lo que te imaginas
- 1.10 Nada que hacer, verdad?
- 1.11 Sin coronar
- 1.12 No pasa nada, no te preocupes
- 1.13 Conclusión
Ficha Técnica
Título: Belmonte
Título original: Belmonte
Reparto:
Gonzalo Delgado (Javier Belmonte)
Olivia Molinaro Eijo (Celeste Belmonte)
Tomás Wahrmann (Padre de Belmonte)
María Noel Gutiérrez (Madre de Belmonte)
Giselle Motta (Mónica)
Jeannette Sauksteliskis (Jeanne)
Raquel Eliazer (Jessie)
Año: 2018
Duración: 75 min.
País: Uruguay
Director: Federico Veiroj
Guion: Federico Veiroj
Fotografía: Arauco Hernández Holz, Analia Pollio
Música: Johann Sebastian Bach, Ludwig van Beethoven, Pedro Dalton, Alfredo Le Pera, Leo Maslíah, Buenos Muchachos
Género: Drama
Distribuidor: ----
Tráiler
Sinopsis
Javier Belmonte (Gonzalo Delgado) es un artista que se acerca a la edad madura y se divide entre las demandas de su arte y las de las personas que le rodean. El Museo de Artes Visuales de Montevideo le va a dedicar una muestra de pintura, pero Belmonte está más ocupado pensando en los cambios que vive su familia: su ex mujer está embarazada, fruto de la relación que mantiene con otro hombre, y percibe que su hija, Celeste, pasará menos tiempo con él cuando nazca su hermano. Belmonte necesita la brújula que le supone estar con su hija, preparar su almuerzo, acompañarla a la escuela y, sobre todo, comenzar a compartir con ella su mundo interior sin esconder las preocupaciones.
Premios
- Festival de Mar del Plata: Mejor guión - Astor de Plata. 2018
Dónde se puede ver la película
Belmonte es un hombre de 43 años, divorciado y perdido, salvo cuando se encuentra con su hija, Celeste que tiene 10 años. Aunque ella disfruta pasar tiempo con su padre, teme que sus visitas la hagan perder el amor de su madre. Belmonte anhela la cercanía que solamente puede dar la familia, pero pretende disfrutar ser un solitario.
Belmonte tiene encuentros con una figura misteriosa, un rostro que ha visto anteriormente. ¿Quién es y qué está tratando de decir?
Por qué pintas siempre hombre desnudos?
Los artistas son aves de otro plumaje, se requiere poseer de ciertas características especiales y no siempre fáciles, para entenderles y acercarse a ellos. Belmonte es un caso típico de ello. Un artista gráfico de buenas cualidades y que se introspecta en su trabajo. Pinta bosques y espacios llenos de colores con trazos fluidos donde representa hombres desnudos contorsionándose o híbridos, hombres desnudos en lucha consigo mismos o retozando, donde no está exenta una gran carga sexual. Todo esto siempre con una profunda sensación de soledad y furia contenida.
Hasta ahí la obra misma serviría para delinear a un personaje intenso, de grandes sombras internas y dispuesto a entablar guerra en cualquier instante. Sin embargo no es así. Belmonte nos lleva por un ininterminable camino de situaciones que va abriendo el guion, una tras otra, para luego simplemente dejarlas así, abiertas sin resolución alguna.
Abriendo tramas
Belmonte como personaje es un hombre difícil de comprender, pero el guión lo hace aún más complicado dejando de lado toda posibilidad que nos expongan en la historia, que si se hubiera tomado, hubiera dado golpes dramáticos interesantes sin embargo se les deja desperdiciadas.
El tiempo de una cinta de arte
Es completamente válido en una cinta, que se cataloga como de cine de arte, dejar puntos para que el espectador los cierre, pero cuando la mayoría de la trama se queda abierta, ya es demasiado y hace que el ritmo, de por si lento de la película, parezca mucho mas y sus 73 minutos… se hagan eternos.
Más de lo que te imaginas
Y no es que los actores estén mal, no lo están, hacen lo que pueden con lo que les da el guión. Aunque sobresale Olivia Molinaro como Celeste.
Gonzalo Delgado (quien en realidad es pintor) hace también los cuadros de Belmonte y se adivina muchísimo más de él que lo que el guion deja ver.
Belmonte como personaje naufraga en un guion que lo deja en medio de la indefinición; como divorciado, como hijo y hasta como padre (su relación más valida y fuerte en la película es con su hija pero nunca logra pasar adelante)
Nada que hacer, verdad?
Belmonte actúa como un ser huraño y resentido, lleno de rabia que pensamos que explotará violentamente y al manos se liará a golpes con alguien… pero eso, simplemente es una suposición. Parece que goza su soltería tras el divorcio, pero en realidad está necio con no desparecer de la vida de su ex, quien ha reconstruido la suya. Tiene en puerta una exposición en un Museo importante en Montevideo y sin embargo sabotea su trabajo. Nada se cierra, todo queda al “llene el espacio” sin una razón.
Sin coronar
Cada vez que el personaje va a coronar, la historia lo abandona y hace que desista, cada vez que llega a un punto de quiebre y que podría revelar algún secreto para avanzar, o complicar la trama dramática, al guion se le olvida y se abre otro plot, en una contradicción tras otra, el personaje nunca crece, nunca se mueve a otros planos, nunca nos da una respuesta clara del por qué o qué es lo que quiere. O básicamente, por qué se niega a enfrentar la verdad que se le pone frente a la cara.
No pasa nada, no te preocupes
Ese es el tinte de la película, plantear que puede pasar algo, dejar que transcurran las cosas llenando la pantalla de situaciones cotidianas y que al final de cuentas no pase nada y se salte sin más a lo que siga para recomenzar el proceso.
Es abrir un sinfín de abanicos dramáticos nada mas por abrirlos, sin haber pensado en cómo terminarlos, cuando la lógica mandaría que cada vez que se abra o se use algo en la trama es para solucionar o hacer explotar otro punto; si no es para eso, francamente da lo mismo exponer el tema o no.
Conclusión
Pese a tener un buen trabajo de los protagonistas (padre e hija) presentar una obra pictórica interesante y un nutrido soundtrack, la historia no cautiva, no resuelve los problemas que abre incesantemente.
Al final del día, Belmonte es una larga colección de pausas en una historia que abandona todos los recursos dramáticos sin darles la menor importancia.