El Brillo de la Televisión (2024) es la segunda película de Jane Schoenbrun, quien sigue demostrando su talento detrás de las cámaras después de su brillante ópera prima, We're All Going to the World's Fair (2021), y consigue labrarse un nombre dentro de la escena indie norteamericana. Disponible para alquiler digital desde el 30 de septiembre de 2024. Puedes leer aquí otra crítica realizada por Cinemagavia de esta película.
Crítica de 'El brillo de la televisión'
Resumen
Ficha Técnica
Título: El brillo de la televisión
Título original: I Saw the TV Glow
Reparto:
Justice Smith (Owen)
Brigette Lundy-Paine (Maddy)
Danielle Deadwyler (Brenda)
Amber Benson (La madre de Johnny Link)
Emma Portner (Mr. Melancholy)
Conner O'Malley (Dave)
Helena Howard (Isabel)
Michael C. Maronna (Vecino 1)
Danny Tamberelli (Vecino 2)
Ian Foreman (Owen de joven)
Will Fitz (Jugador de etiquetas láser)
Michael Twaine (Asistente de teatro mayor)
Tim Allan (Lance)
Marlyn Bandiero (La amiga de Brenda)
Lindsey Jordan (Tara)
Kenneth Kyle Martínez (El padre de Charlie)
Año: 2024
Duración: 100 min.
País: Estados Unidos
Director: Jane Schoenbrun
Guion: Jane Schoenbrun
Fotografía: Eric Yue
Música: Alex G
Género: Thriller. Terror
Distribuidor:
Tráiler de 'El brillo de la televisión'
Sinopsis
Dos adolescentes comparten su amor por una serie de televisión de terror, pero esta se cancela misteriosamente.
Dónde se puede ver la película en streaming
El Culto a lo Analógico
Como la propia directora ha dicho, esta segunda película, El Brillo de la Televisión, así como su ópera prima, We're All Going to the World's Fair (2021), forman parte de una trilogía que pretende cerrarse con una siguiente entrega y que se centra en el mundo analógico y el cambio de formato al digital (la ritualística de la manera en que se ve tiene un gran peso en la película, que está ambientada en los años noventa y que contrasta con la manera de consumir cine en el momento que tenemos ahora).
El Brillo de la Televisión explora este tema, con las cintas de vídeo que permiten a nuestro protagonista, interpretado por Justice Smith, poder ver el programa de televisión, pero también formalmente, con una estética que tiene presente en muchas ocasiones todo ese estilo visual del grano. Y, en gran medida, la estética de la cinta es per se un manifiesto con el que la directora pretende cimentar su obra.
Referencias
El Brillo de la Televisión está llena de referencias. En ese sentido, El Brillo de la Televisión es una película netamente posmoderna, puesto que no solo no las esconde, sino que hace gala de ellas. La obvia es Buffy Cazavampiros, con la propia serie de televisión que sirve de MacGuffin para la cinta.
Pero, más en profundidad, nos encontramos con alusiones a cineastas como David Lynch en muchas de esas escenas oníricas que parecen que van a girar hacia el terror en cualquier momento, como aquella mítica secuencia de Mulholland Drive, que quedan a su vez enlazadas con temas culturales propios de nuestra era en contraste con la ambientación noventera de la película, como son los creepypasta (la premisa es básicamente un remedo de un creepypasta... ¿Te acuerdas de aquella serie que echaban en la que pasaba tal y tal cosa?) o los espacios liminales, esas ubicaciones que provocan incomodidad en el espectador son numerosas en la película, en una síntesis hipnótica y perfecta.
Eso sí, hay que tener cierto bagaje para dejarse seducir por todo ello, porque sino el espectador puede sentirse simplemente hastiado ante la parsimonia de El Brillo de la Televisión.
¿Pero de qué va El Brillo de la Televisión?
La mayoría de las críticas negativas se han centrado en el guion disperso de la película, que parece no tocar ningún tema en concreto. Y en cierto sentido tienen razón, puesto que El Brillo de la Televisión es una de aquellas películas que intenta apelar a nuestro subconsciente, en especial a una generación que vivió la transformación del mundo analógico al digital, más que definir un tema preciso.
La propia directora ha afirmado que el guion de El Brillo de la Televisión fue escrito mientras transicionaba hacía mujer, y hay ciertos ecos de ello (la pérdida de identidad de la protagonista es el más evidente, que no acaba ni sabiendo quien es), pero reducir la película a una obra sobre lo "trans" sería totalmente absurdo, porque la obra va mucho más allá de ello, jugando a múltiples niveles, como es la madurez, el recuerdo, la amistad o la visión de no encajar que siente todo el mundo alguna vez en su vida.
Conclusión de 'El Brillo de la Televisión'
El Brillo de la Televisión es una película magnífica que nos adentra en un mundo tan particular e inclasificable y que juega a muchos niveles. Tan bella estéticamente como profunda e inteligente.
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