Cinco días de septiembre de 1857 forman uno de los capítulos más negros de la aún joven historia de Estados Unidos. Aquellos días, un grupo de más de 100 pioneros mormones fue emboscado por una banda de enmascarados en lo que hoy es el estado de Utah. La masacre de Mountain Meadows fue la batalla principal de la llamada Guerra de Utah, precursora de la Guerra Civil estadounidense. Los instigadores fueron una mezcla de mormones progubernamentales y un sector reducido de una tribu nativa. Desde el 9 de enero de 2025 se encuentra disponible en Netflix una serie cuya misión es mostrarnos lo cruel y despiadado que fue realmente el Salvaje Oeste en su día. La sangrienta matanza es la impactante apoteosis del primer episodio de Érase una vez el Oeste, miniserie de seis episodios dirigida por Peter Berg, que nos traslada al Territorio de Utah en 1857.
Crítica de 'Érase una vez el Oeste'
Resumen
Ficha Técnica
Título: Érase una vez el Oeste
Título original: American Primeval
Reparto:
Taylor Kitsch (Isaac)
Betty Gilpin (Sara Rowell)
Dane DeHaan (Jacob Pratt)
Saura Lightfoot Leon (Abish)
Joe Tippett (James Wolsey)
Jai Courtney (Virgil Cutter)
Derek Hinkey (Pluma roja)
Shea Whigham (Jim Bridger)
Preston Mota (Devin Rowell)
Alex Fine (Gant)
Shawnee Pourier (Dos lunas)
Clint Obenchain (Frye)
Olivia Taylor (Alivan)
Año: 2025
Duración: 60 min.
País: Estados Unidos
Director: Peter Berg
Guion: Mark L. Smith
Fotografía: Jacques Jouffret
Música: Explosions in the Sky
Género: Western
Distribuidor: Netflix
Tráiler de 'Érase una vez el Oeste'
Sinopsis
Una madre y su hijo huyen de su pasado y forman una nueva familia mientras se enfrentan a un duro panorama de libertad y crueldad en el viejo Oeste. (Netflix)
Dónde se puede ver la serie en streaming
Redención y supervivencia
La historia sigue a una madre y su hijo mientras escapan de un pasado marcado por secretos y tragedias, buscando construir una nueva vida en un territorio que no ofrece segundas oportunidades fácilmente. En el camino, enfrentan desafíos físicos y emocionales que no solo ponen a prueba su vínculo, sino también su capacidad para encontrar aliados y establecer un futuro.
El guion de Érase una vez el Oeste aborda temas universales como la redención, el sacrificio y la fortaleza frente a la adversidad, mientras explora el concepto de libertad en un lugar donde todo tiene un precio. Los personajes secundarios, que incluyen aliados inesperados y antagonistas implacables, añaden profundidad a la narrativa, enriqueciendo el viaje emocional y físico de los protagonistas.
Una mirada moderna al género clásico
Peter Berg aporta una visión contemporánea al western, manteniendo los elementos tradicionales del género, paisajes desolados, enfrentamientos tensos y la lucha por la libertad, mientras profundiza en las dinámicas emocionales de sus personajes. La dirección equilibra escenas de acción y tensión con momentos introspectivos, logrando un ritmo que mantiene al espectador inmerso en la narrativa.
La fotografía destaca por su habilidad para capturar tanto la belleza como la hostilidad del paisaje del viejo Oeste. Las vastas llanuras y los cielos infinitos se combinan con primeros planos que reflejan la vulnerabilidad y determinación de los protagonistas, creando un contraste visual poderoso.
Interpretaciones que elevan el drama
Betty Gilpin, que interpreta a la madre, entrega una actuación cargada de matices, mostrando tanto la fuerza necesaria para proteger a su hijo como la fragilidad que la acompaña en su lucha interna. Su química con su hijo es uno de los puntos más emotivos de la serie, reflejando un vínculo que se fortalece a medida que enfrentan las adversidades juntos.
El elenco secundario, que incluye personajes aliados y villanos, aporta textura y tensión a la historia. Las actuaciones destacan por su autenticidad, logrando que los personajes se sientan reales en un contexto marcado por la dureza del entorno.
Un retrato cautivador del Oeste
La cinematografía de Érase una vez el Oeste es deslumbrante, utilizando los paisajes del viejo Oeste como un personaje más en la narrativa. Las tomas amplias de las llanuras, los desiertos y los cielos infinitos contrastan con la opresión y el peligro constante que enfrentan los personajes.
El diseño sonoro, que incluye el viento arrastrando polvo, los disparos secos y los silencios tensos, refuerza la atmósfera del viejo Oeste. La banda sonora, una mezcla de música instrumental melancólica y tensa, complementa perfectamente el tono de la serie.
Conclusión de 'Érase una vez el Oeste'
Érase una vez el Oeste reinventa el género del western al combinar su estética clásica con un enfoque emocional y profundamente humano. Peter Berg entrega una obra visualmente cautivadora y narrativamente envolvente que logra destacar tanto por sus momentos de acción como por su exploración de las dinámicas familiares y la lucha por la redención.
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