Ifigenia (1977) dirigida por Mihalis Kakogiannis, se trata de una de las mejores adaptaciones que se hayan hecho nunca de una obra clásica del mundo grecolatino a la gran pantalla. La película adapta la obra Ifigenia en Áulide del gran dramaturgo Eurípides, y la película consiguió la nominación en el Festival de Cannes a la mejor película. Puede verse en Filmin.
Crítica de 'Ifigenia'
Resumen
Ficha Técnica
Título: Ifigenia
Título original: Iphigenia (Iphigenie)
Reparto:
Irene Papas (Klytaimnistra)
Tatiana Papamoschou (Ifigeneia)
Kostas Kazakos (Agamemnonas)
Costas Carras (Menelaos)
Christos Tsagas (Odysseas)
Panos Mihalopoulos (Ahilleas)
Dimitri Aronis (Kalhas)
Sofia Sfyroera
Dimitris Liagas
Angelos Yannoulis
Eirini Koumarianou (Enfermera)
Giorgos Oikonomou (Mensajero)
Yorgos Charalabidis
Año: 1977
Duración: 130 min.
País: Grecia
Director: Mihalis Kakogiannis
Guion: Mihalis Kakogiannis. Obra: Eurípides
Fotografía: Giorgos Arvanitis
Música: Mikis Theodorakis
Género: Drama
Distribuidor:
Tráiler de 'Ifigenia'
Dónde se puede comprar el libro
Sinopsis
Aclamada adaptación de la tragedia griega de Eurípides. Nominada al Oscar y protagonizada por la griega Irene Papas expone los conflictos morales sobre la voluntad de los Dioses
Ubicada justo antes de la guerra de Troya, los Dioses piden el sacrificio de Ifigenia a su padre, el rey Agamenón, para poder partir hacia la guerra con sus tropas, lo que desata un trágico conflicto moral en el rey. (Filmin)
Dónde se puede ver la película
Un Eurípides de nuestros tiempos
Ifigenia en Aúlide es una de las obras maestras de la dramaturgia clásica y mundial. De los tres grandes clásicos escritores de teatro griego (Esquilo, Sófocles y Eurípides), a Eurípides se le conoce especialmente por dos motivos, el primero, por ser uno de los primeros autores interesados más en el desarrollo psicológico de sus personajes que en la propia trama. Para la tragedia del maestro griego, el plano mental y la dimensión humana de sus personajes se sitúa por encima de la historia. Por eso, muchas de sus obras acaban con un Deus Ex Machina, en tanto en cuanto el propio Eurípides no tenía el mínimo interés por cerrar la trama de una manera adecuada.
En segundo lugar, Eurípides es también conocido por su pesimismo vital. Por un drama intenso, que llena a sus personajes hasta llegar a la exasperación final. El Hybris y la némesis alcanzan las máximas cotas en sus obras. Esto también queda claro en Ifigenia, con un in crescendo dramático llevado a la perfección.
Lo que hace grande la obra de Mihalis Kakogiannis es que siguiendo el modelo de Eurípides, es capaz de trasladar la tragedia al espectador contemporáneo. El dolor de un padre por su hija, la ambición de los poderosos, el destino...Temas universales, a los que sin embargo el director añade un contexto entendible para todos los públicos. Por ejemplo, entendemos el enfado de las tropas al estar sin vientos, porque somos capaces de ver la calor y el sufrimiento del soldado. Entendemos también que Odiseo, de manera política, intenta convencer a los soldados de la dimensión social del conflicto. Ifigenia tiene más lecturas que la de Eurípides, en este sentido.
La verdadera historia de Troya
Lo que demuestra Mihalis Kakogiannis es que con unos medios más que decentes se pueden llegar a simular épocas históricas de una manera mucho creíble que las películas de Hollywood, que a su lado son simples fantasías de cartón piedra. Pero esto tiene una raíz más profunda, que merece un análisis.
A Hollywood, especialmente el conflicto de Troya, en sus múltiples manifestaciones cinematográficas, siempre le ha interesado mostrar un lujo y despilfarro que era imposible en aquella época. Estamos hablando que en aquellos momentos, Grecia, que ni tan siquiera era un estado, sino un conjunto de ciudades unidas por motivo bélico, era apenas una civilización que empezaba a formarse. El lujo o las construcciones arquitectónicas de mármol estaban aún a siglos de distancia. Por eso, la película de Mihalis Kakogiannis, mostrándonos la choza de Agamenón, el rey de la alianza griega, como una cabaña improvisada con piedras, tiene en realidad una fuerza que es tanto simbólica como real. Es la demostración de que el director sí ha entendido a Eurípides.
Así, vemos a grandes tropas y despliegues de personal humano, pero no con armaduras doradas o con grandes equipamientos militares. Estamos rondando una tragedia ambientada en una época de leyenda, en la que la fantasía y la historia colindaban juntas.
Grandes interpretaciones
Y por supuesto, teniendo en cuenta que se trata de una adaptación teatral de Eurípides, los actores son fundamentales en una obra así. Creo que los dos mejores papeles se los llevan Irene Papas, como Ifigenia y Kostas Kazakos como Agamenón.
A diferencia de las otras versiones cinematográficas, el Agamenón que tenemos en esta película tiene también una dimensión humana. Es un rey que a la vez es padre, y que está destrozado porque sabe que tome la decisión que tome, todo se girará en su contra (esto es sin duda debido a Eurípides).
Por su parte, Irene Papas representa a una jovencísima Ifigenia, atrapada por su juventud y completamente rota por la traición de su familia. La ingenuidad con la que interpreta la actriz su papel crea un dramatismo in crescendo a medida que sabemos su destino.
Conclusión de 'Ifigenia'
Ifigenia es una obra maestra del cine. Es una muestra de que las grandes obras clásicas de la literatura pueden tener también una adaptación cinematográfica a la altura si el equipo que hay involucrado tiene el talento necesario.
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No es Irene Papas la que da vida a Ifigenia en esta película sino Tatiana Papamoschou. Más información en la conferencia sobre el filme en
https://youtu.be/qT07T2kiK28