Léonor Serraille llega al mundo del cine con Bienvenida a Montparnasse (Jeune Femme), su ópera prima. Protagonizada por Laetitia Dosch, conocida por sus papeles en filmes como 'Un amor de verano'. Esta película obtuvo el premio a Golden Camera para Serraille en el prestigioso Festival Internacional de Cannes de 2017. Estuvo nominada a los premios César a Mejor promesa femenina y a Mejor ópera prima. Ha estado en multitud de certámenes como el London Film Festival, Lumiere Awards y Stockholm Film Festival, entre otros. En el Festival Internacional de Cine de Valladolid se premió a Dosch a mejor actriz. Estreno el 9 de noviembre.
'Bienvenida a Montparnasse' (Jeune Femme)
Resumen
Ficha Técnica
Título: Bienvenida a Montparnasse
Título original: Jeune femme (Montparnasse Bienvenüe)
Reparto:
Laetitia Dosh (Paula Simonian)
Souleymane Seye Ndiaye (Ousmane)
Grégoire Monsaingeon (Joachim Deloche)
Erika Sainte (Yuki)
Lila-Rose Gilberti (Lila)
Año: 2017
Duración: 97 min.
País: Francia
Director: Léonor Serraille
Guion: Léonor Serraille, Clémence Carré y Bastien Daret
Fotografía: Émilie Noblet
Música: Julie Roué
Género: Drama
Distribuidora: La Aventura Audiovisual
Tráiler de Bienvenida a Montparnasse
Sinopsis
Paula Simonian sufre un duro revés cuando termina fulminantemente su relación de 10 años con Joachim Deloche. Sola, confundida y con una ola de sentimientos encontrados, descubrirá París desde otra perspectiva. Sin un futuro claro, Paula abrirá un universo en el que el amor lo empezará a ver desde diferentes prismas. Se enfrentará a la ciudad de las luces y la vivirá de una forma que anteriormente nunca lo había planteado.
Dónde se puede ver la película
La enfermedad del amor
Bienvenida a Montparnasse (Jeune Femme) comienza de una forma directa, con un plano mirando a cámara y una Laetitia Dosch que solo tiene como atrezzo su propia interpretación. Dosh hace una de sus mejores actuaciones en pantalla. Expone de una forma clara la vorágine de sentimientos con los que se da el pistoletazo de salida al film. Cruda y realista. “La libertad es para los egoístas” sería un buen resumen de la exposición de la introducción al universo de Paula. En esta primera parte de la cinta se produce una explosión narrativa que engatusa al espectador. Las intenciones quedan muy claras y se ve el carisma de un guion repleto de situaciones cotidianas, que se convierten en brillantes y peculiares. Han sabido transformar lo que podría ser una historia más en algo original y sobre todo, cercano.
En este primer episodio, por llamarlo de alguna forma, se expone cómo el amor es capaz de transformar a las personas desde lo más profundo. Una especie de enfermedad que va por dentro y arrasa con todo cuando se torna en oscuro. Las obsesiones, la locura... se hacen patente en esta primera parte. Da uno de los mejores momentos del film: ese monólogo histriónico y dramático que se completa con una ironía muy bien manejada. De esta forma, se aleja de un tono demasiado serio y lo conduce al género de la dramedia con un buen acabado. El amor vuelve a ser el tema principal de este film. Toca varias vertientes bien cosidas entre ellas y con una naturalidad digna de destacar. La vida de Paula, pese a no ser lo convencional en ocasiones, hace que el público empatice con ella y su pequeño mundo.
Libertad femenina
El mundo del cine siempre ha tenido grandes figuras femeninas en sus películas, pero se observa que en los últimos tiempos se hace hincapié en dar un contexto que homenajee a las mujeres y las alejen de los clichés. En Bienvenida a Montparnasse (Jeune Femme) la feminidad se ve expuesta en varios personajes, ya que tiene mayor peso en las tramas de la cinta. Este detalle es muy importante, dado que vemos distintos mensajes y personalidades de la mujer. Se humaniza a los personajes de tal forma que se convierte en una reivindicación visual, no cae en los estereotipos que se atribuye al género femenino en el cine en ningún momento. Además, una particularidad que se da en la película es cómo el proceso de transformación de Paula hace que su círculo vital cambie las tornas y sea ella la figura fuerte, valiente. Arrasa con su carga emocional.
La utilización de partir de un desengaño amoroso hace que sea todavía más importante el mensaje que se quiere transmitir: la falsa necesidad de tener a una persona al lado para ser feliz. El marco temporal de Paula hace que a lo largo del metraje se vea cómo van formando una complejidad que ocurre en la vida misma. Comienza con una joven dependiente del amor, perdida ante la adversidad de terminar una relación tan larga para alzarse después como una mujer autosuficiente y liberada. El enfrentamiento que hace con su partenaire masculino sabe plasmar toda esta energía. Provoca que el espectador vea esa metamorfosis no solo en los personajes, sino en todas las tramas y subtramas que se han ido produciendo en el film.
A la francesa
Bienvenida a Montparnasse (Jeune Femme) tiene sello propio. Juega con los recursos estilísticos más propios del cine francés. Lo positivo es que lo realiza de una manera coherente y sin aburrir al público. Los silencios, los personajes escandalosos y pasionales, los planos cerrados, la desnudez, escenas cotidianas, entre otros, se entremezclan con una emoción que aúna todos los elementos narrativos de una manera más que notable. A nivel visual, se asemeja a un cine más alternativo, hace del espectador testigo. Le incita, al colocar la cámara tan cerca de los acontecimientos, a participar activamente. De esta forma, se tiene la sensación de comodidad y de cotidianidad con un reflejo sentimental que capta al público de forma instantánea hasta el final.
Únicamente cae en un pequeño error que no termina de hacerla redonda: el exceso de subtramas. Pese a manejarlas correctamente, puede despistar al espectador en algún momento. Tal vez hubiera estado mejor reducir la participación de algunos personajes. Sin embargo, no se encuentra que ninguna historia sobre. Todas conforman el universo de Paula. De esta forma, esta pequeña falla sigue enriqueciendo a la película. Aunque pueda abrumar y desorientar en contadas ocasiones, lo dinámico y el buen ritmo que tiene la película hacen que sea una mera anécdota. Una dramedia francesa que da un resultado brillante, sobre todo por la imagen que da el título: Bienvenida a Montparnasse (Jeune Femme), que poco tiene que ver con lo que se muestra en la cinta.
Conclusión de Bienvenida a Montparnasse (Jeune Femme)
Bienvenida a Montparnasse (Jeune Femme) es un retrato íntimo de la liberación de la equivocada visión que se le da al amor en ocasiones. Una muestra de la independencia femenina y la creación de un universo con claroscuros resueltos con ironía, emoción y realismo. Laetitia Dosch brilla con una gran actuación y consigue tener un reparto a la altura. Una dramedia que tiene todos los ingredientes para fascinar al público. Una narrativa que parte de un tema tan general como el amor, pero que llega a asuntos más acotados como el sector laboral en París. Una película que no deja indiferente y una gran carta de presentación para el debut de Léonor Serraille en el cine.
Reportaje de Bienvenida a Montparnasse en Días de Cine TVE