Matadero, película dirigida por Santiago Fillol, se estrenó en salas de cine españolas el 9 de diciembre de 2022. Un relato de la lucha de clases donde retumba la dictadura de Videla. Tras su premiere internacional en el Festival de Locarno este agosto, la película pasó por la Sección Oficial del Festival de Cine Europeo de Sevilla, con Premio a Mejor Fotografía para Mauro Herce, el Festival de Cine de Mar del Plata, el Festival Internacional de Cine de Gijón y el Festival de Cine Independiente de Barcelona L'Alternativa.
Crítica de 'Matadero'
Resumen
Ficha Técnica
Título: Matadero
Título original: Matadero
Reparto:
Julio Perillán (Jared Reed)
Malena Villa
Ailin Salas
Rafael Federman
Lina Gorbaneva
Ernestina Gatti
David Szechtman
Año: 2022
Duración: 106 min.
País: Argentina
Director: Santiago Fillol
Guion: Santiago Fillol, Edgadro Dobry, Lucas Vermal
Fotografía: Mauro Herce
Música: Cristóbal Fernández, Gerard Gil
Género: Thriller
Distribuidor: Begin Again Films
Tráiler de 'Matadero'
Sinopsis
Un cineasta estadounidense llega a la pampa argentina para filmar Matadero: un relato fundacional de la lucha de clases en el que un grupo de obreros masacra a sus patrones como si fueran ganado. Es 1974, la violenta persecución de la izquierda acaba de comenzar en Argentina y los jóvenes actores de la película están a punto de involucrarse completamente en la militancia clandestina. (Begin Again Films)
Dónde se puede ver la película en streaming
Desafiante y reflexiva
Matadero desafía las convenciones del cine convencional, utilizando la metanarrativa para crear paralelismos entre el horror de la dictadura argentina y la violencia representada en la película dentro de la película. Santiago Fillol maneja la narrativa de manera que refleja el caos y la opresión de la época, invitando al espectador a reflexionar sobre el poder del cine como herramienta de revuelta y cambio. Aunque la narración puede carecer de ritmo en algunos momentos, la visión personal y desestabilizadora de Fillol proporciona una experiencia cinematográfica única y provocativa.
Intensidad y compromiso
Las actuaciones en Matadero son intensas y comprometidas, reflejando el estado de tensión y el fervor revolucionario de los jóvenes actores involucrados en el rodaje de la película ficticia.
El cineasta americano, interpretado por Julio Perillán, es el epicentro de la narrativa. Su interpretación muestra la fascinación y la desconexión que a menudo caracteriza a los forasteros que se involucran en conflictos locales sin comprender completamente las implicaciones.
Los actores jóvenes del rodaje aportan una energía cruda y una autenticidad que resuena profundamente, capturando el dilema entre su participación artística y su impulso hacia la militancia clandestina.
Metanarrativa y paralelismos
La trama de Matadero se centra en un cineasta americano que llega a la pampa argentina en 1974 para rodar una película titulada Matadero, que representa una fábula fundacional sobre la lucha de clases y la violencia laboral. A medida que el rodaje avanza, los actores jóvenes, al borde de la militancia clandestina, se ven envueltos en la violenta persecución que está comenzando en Argentina.
La película dentro de la película crea un paralelismo inquietante con la realidad histórica de la dictadura argentina, explorando cómo el arte puede tanto reflejar como influir en la realidad sociopolítica. Aunque la narración puede ser lenta y dispersa en ocasiones, el enfoque metanarrativo ofrece una profundidad y complejidad que invita a la reflexión.
Estética desafiante
La cinematografía de Matadero es atmosférica y desafiante, utilizando la vasta y desolada pampa argentina para reflejar la soledad y el aislamiento de los personajes. Las imágenes son a menudo crudas y realistas, capturando la brutalidad tanto del entorno físico como del contexto histórico.
La edición puede sentirse irregular, con transiciones abruptas que reflejan la fragmentación de la narrativa y la inestabilidad de la época. El diseño de sonido es efectivo, utilizando el silencio y los sonidos ambientales para aumentar la tensión y la sensación de peligro inminente.
Conclusión de 'Matadero'
Matadero es una película que se destaca por su capacidad para desafiar las convenciones y provocar una reflexión profunda sobre el poder del cine y la historia. La dirección de Santiago Fillol, junto con las intensas actuaciones y la estética desestabilizadora, crea una experiencia cinematográfica que es a la vez perturbadora y esclarecedora.
Aunque puede no ser accesible para todos debido a su ritmo y estructura inusuales, ofrece una mirada valiosa y única a la intersección del arte y la política. Es una obra que invita al espectador a considerar el papel del cine en tiempos de conflicto y a reflexionar sobre las implicaciones de la representación artística en la realidad sociopolítica.
Reportaje de Matadero en Días de Cine TVE
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