Nocturno forma parte de las películas producidas por Blumhouse que están siendo estrenadas durante este mes de Octubre en Amazon Prime Video. La película quiere aproximarse a la especialidad de la casa, el cine de género. Se trata del debut en el largometraje de la directora Zu Quirke. El reparto incluye a Sidney Sweeney (Euphoria, Érase una vez en Hollywood), Madison Iseman (Jumanji: siguiente nivel, Annabelle vuelve a casa) y Jacques Colimon (The society, Pequeñas mentirosas). Se estrena en Amazon el 13 de Octubre dentro del ciclo Welcome to the Blumhouse.
Crítica de 'Nocturno'
Resumen
Ficha Técnica
Título: Nocturno
Título original: Nocturne
Reparto:
Madison Iseman (Vivian)
Sydney Sweeney (Juliet)
Jacques Colimon (Max)
Ivan Shaw (Dr. Cask)
Brandon Keener (David)
Asia Jackson (Abigail)
Phillip Wampler (Waiter)
Stephon Fuller (Joshua)
Año: 2020
Duración: 90 min.
País: Estados Unidos
Director: Zu Quirke
Guion: Zu Quirke
Fotografía: Carmen Cabana
Música: Gazelle Twin
Género: Terror
Distribuidor: Amazon Prime Video
Tráiler de 'Nocturno'
Sinopsis
Una pianista increíblemente talentosa hace un trato fáustico para superar a su hermana mayor en una prestigiosa institución para músicos clásicos. (Amazon Prime Video)
Donde se puede ver la película
Una chica a la sombra
En primer término, Nocturno es una película sobre el resentimiento y la envidia. Juliet Lowe (Sidney Sweeney) siempre ha vivido siendo la medalla de plata, la segundona permanente, la esforzada ninguneada. Ese sentimiento se enturbia un poco más si la persona que sistemáticamente tiende a eclipsarla es su hermana gemela Vivian (Madison Iseman). Ambas comparten una pasión común: el piano. Las dos asisten a una escuela de artes donde desarrollan su talento, pero Juliet va a comenzar a intentar revertir su condición de comparsa de su hermana.
Con estos mimbres se puede urdir un drama promedio de penurias familiares, pero siendo Blumhouse quien produce debería haber algún elemento de terror. Debería. Pero en realidad solo ocurre esporádicamente. Algo más o menos común en las películas estrenadas hasta ahora dentro de Welcome to the Blumhouse, cercanas al género fantástico o al thriller, pero no tan punzantes como debieran.
Pero no adelantemos acontecimientos. La primera escena sí que es una situación de impacto. Moira, una estudiante de música, se tira desde un balcón acabando con su vida. Casualmente acudía a la misma escuela en la que van a comenzar el curso las hermanas Lowe, de tal modo que el mal fario se atisba en el horizonte. Vemos también como el papel de pringada va ligada a Juliet y el de chica popular y virtuosa del piano a su hermana Vivian. La mirada de Juliet cada vez es más resentida.
Un cambio de paradigma
El siguiente paso de Nocturno es robustecer la sensación de rivalidad entre Juliet y Vivian. La excusa para ello será una audición para un concierto en homenaje a la fallecida Moira. A última hora, y siguiendo un naciente estilo competitivo Juliet decide tocar la misma pieza al piano que Vivian, lo que significa prácticamente un desafío en toda regla. Algo insólito que parece haber sido catalizado por el hallazgo por parte de Juliet de un cuaderno con extrañas anotaciones que perteneció a Moira. En él además de partituras, hay unos extraños dibujos y símbolos.
A partir de aquí la suerte pasa a ser reversible. Vivian comienza a caer en picado en su vida personal y artística, mientras que Juliet parece tener una racha de buena suerte. Pero eso, por supuesto, no se queda ahí. El cuaderno tiene una especie de cualidad fáustica, como si seguir el compás de sus partituras conllevara el éxito, pero también la entrega de tu alma.
De momento, encontramos unas cuantas referencias si nos empeñamos en ello. El ambiente de escuela de arte de Suspiria (1977 o 2018), la rivalidad de Cisne negro (2010), los cuadernos malditos tipo Death note (2006), o incluso haciendo un triple mortal con tirabuzón el odio fraterno de ¿Qué fue de Baby Jane? (1962). El problema es que los referentes por sí mismo no realizan nada. Nocturno está muy, muy lejos de todo lo enumerado.
A la espera del estallido
El problema de Nocturno es que una vez planteado el nudo de la trama, se ve incapaz de ir más allá. Continuamente estamos esperando un aumento en nivel de intensidad, un giro, una vuelta de tuerca. Sin embargo no hay picos durante la película, solo una meseta anodina, un fluir continuo que no inquieta y que no emociona. Que no haya una cantidad intensa de terror no debe sorprender, el tono de las películas de Welcome to the Blumhouse están tendiendo quizá más al thiller, a lo fantástico, o al drama.
Más allá de géneros, Nocturno deja bastante frío. Hay unos cuantos esbozos donde se intuye el peligro, la situación de una amenaza acechante, pero jamás llega a rematarse en una ejecución definitiva. Aun así podría aprovecharse el drama asociado a la rivalidad y separación de dos hermanas que emocional e incluso físicamente es difícil que salgan indemnes.
Tampoco en esto triunfa Nocturno, dejando en simple viento lo que bien aprovechado podría ser un vendaval. Lo que dicho en corto significa que no aprovecha ni la peripecia sobrenatural, ni la dramática. Todo ello, no evita que haya algún destello de interés, o que se pueda adivinar un cierto esfuerzo por crear una atmósfera concreta o un ligero estudio de personajes. Pero todo demasiado bosquejado, demasiado sin terminar.
El acabado de Nocturno
La estética está cuidada dentro de los que cabe. Se ve que hay una preocupación por una puesta en escena sobria, de cierta elegancia. Pero nuevamente todo parece quedarse a mitad de camino. En realidad acaba siendo una especie de tv movie a cuyas ambiciones estéticas, si las hubiera, les han cortado las alas. Hay un par de momentos, cuando más se flirtea con lo sobrenatural, visualmente sugerentes pero sin abandonar el terreno propio del telefilm.
Las actuaciones no son particularmente memorables. De hecho, lo único digno de mención es el trabajo de Sidney Sweeney en el papel de Juliet. Su juego de miradas entre resignadas y resentidas dibuja más o menos bien al personaje, y la película gira constantemente en torno a ella. Sin embargo, no pasa de ser una actuación discreta llevada al menos con oficio.
Madison Iseman está desaprovechada, particularmente en los momentos de la caída de su personaje en el infortunio. No llegamos empatizar con ella, pero es que en realidad tampoco se le da la oportunidad. Lo que debería ser un toma y daca entre Juliet y Vivian deja paso a una rivalidad un tanto hipotensa, salvo por algunos retos dialécticos. Por lo demás, no hay nada destacable salvo por oír un poco música de Mozart o Saint-Säens.
Conclusiones de 'Nocturno'
Nocturno tiene tantas buenas intenciones sobre el papel, como abulia en la ejecución final. Al final, parece un boceto de una película todavía sin hacer, un esquema de un trabajo no finalizado. El espectador se pasa gran parte de la película esperando que haya un cambio de ritmo hacia una mayor intensidad, una vuelta de tuerca que lo estremezca. No obstante, la monotonía acaba siendo la nota constante, y salvo por algunas situaciones inspiradas no hay momentos de enjundia. Cuando una película de este tipo apetece verla más después de comer que por la noche, es que algo falla.
Únete a nuestro CANAL DE TELEGRAM