De la mano de Dan Erickson y los directores Ben Stiller (Escape at Dannemora) y Aoife McArdie ha surgido Separación (Severance), una de las mejores series de los últimos tiempos. Un auténtico regalo para los que disfrutan con la ciencia ficción original y visualmente deslumbrante. La serie, disponible en Apple TV+, cuenta en su reparto, entre otros, con Adam Scott, Patricia Arquette, Britt Lower, John Turturro y Cristopher Walken. Ya se ha confirmado una segunda temporada, la cual se encuentra en producción. La primera temporada, de nueve episodios, está completa en la plataforma de la manzana.
Crítica de 'Separación'
Resumen
Ficha Técnica
Título: Separación
Título original: Severance
Reparto:
Adam Scott (Mark)
Patricia Arquette (Harmony Cobel)
Dichen Lachman (Ms. Casey)
John Turturro (Irving)
Christopher Walken (Burt)
Britt Lower (Helly)
Zach Cherry (Dylan)
Jen Tullock (Devon)
Marc Geller (Kier Eagan)
Tramell Tillman (Milchick)
Mark Kenneth Smaltz (Judd)
Yul Vazquez (Petey)
Nikki M. James (Alexa)
Año: 2022
Duración: 55 min.
País: Estados Unidos
Director: Dan Erickson (Creador), Ben Stiller, Aoife McArdle
Guion: Mohamad el Masri, Dan Erickson, Andrew Colville
Fotografía: Jessica Lee Gagné
Música: Theodore Shapiro
Género: Thriller. Intriga
Distribuidor: Apple TV
Tráiler de la serie Separación
Sinopsis
Ben Stiller y el creador Dan Erickson nos traen Separación (Severance). La serie gira en torno a Mark Scout (Adam Scott), el director de un grupo de oficinistas sometidos a un proceso quirúrgico para separar sus recuerdos laborales de los de sus vidas personales.
Este experimento, que pretende conciliar la vida laboral con la personal, comienza a cuestionarse cuando Mark se ve envuelto en un misterio que le obliga a enfrentarse a la verdadera naturaleza de su trabajo... y a sí mismo. (Apple TV España)
Dónde se puede ver la película en streaming
Entre el trabajo y la vida personal
La premisa de Separación (Severance) seguramente sea de lo más refrescante que hemos visto últimamente en televisión. Lumon Industries, empresa que no sabemos realmente a lo que se dedica, implanta en los cerebros de sus trabajadores chips que separan las memorias de su vida personal con las del trabajo. Es decir, una misma persona con dos “yo”. Lo llaman el proceso de separación.
Partiendo desde aquí, la serie de Apple nos presenta una atmósfera misteriosa y desconcertante, sintiéndonos como si fuéramos las mentes de los trabajadores que despiertan en Lumon. No sabemos qué ocurre ni dónde estamos. Poco a poco, especialmente en el magnífico primer episodio, nos acompañan a descubrir a la empresa y los protagonistas, siempre con la mosca detrás de la oreja por la incomodidad y extrañeza de la situación.
El gran artífice de esto es Ben Stiller, quien dirige seis de los nueve capítulos de la primera temporada. La puesta en escena, el ritmo de la historia y la tensión que incorpora con la cámara el actor y director neoyorquino en la recta final es encomiable.
El horror de las mega corporaciones
Que una de las empresas más grandes del mundo como Apple ponga dinero para una serie como Separación no deja de tener su gracia. Se trata, al fin y al cabo, de una serie que muestra hasta dónde estarían dispuestas a llegar estas corporaciones en su afán por conseguir sus objetivos. Aquí, con el proceso de separación, Lumon es libre de usar a sus trabajadores como les plazca. Ya sea para hacer experimentos o actividades ilegales. Hasta el final de la jornada Mark, Helly, Irving y compañía son todo suyos.
Esto es bastante terrorífico, porque una vez su chip se desactive volverán a su “yo” de fuera y no sabrán lo que ha ocurrido unos minutos antes. Este horror aumenta mientras avanza la trama, cuando vamos descubriendo más sobre la empresa y la serie nos da nuevos misterios y giros de guion. Y es que una de las cosas que mejor hace Separación es dejar al espectador con la boca abierta con las respuestas a algunos de los interrogantes planteados. Al ser una primera temporada aún quedan muchas cosas en el aire, pero es lógico y bueno para la trama tener varias cuestiones sin resolver. No hace falta responder a todo. Y menos tan pronto.
La serie de Apple puede recordar en sus cliffhangers a otras ficciones como Perdidos o las más recientes Westworld y Yellowjackets, pero se desmarca de estas propuestas con su particular estilo y atmósfera en la que nunca te encuentras cómodo.
Una producción hipnótica
Desde la primera escena hasta la última Separación es una serie que te mantiene enganchado a la pantalla. No porque ocurran muchas cosas o haya tensión siempre, sino por su imponente apartado visual, el atractivo de su historia y su producción. El diseño interior de Lumon, con unos pasillos interminables donde solo existe el color blanco, te hipnotiza por completo. Recuerda, al menos a un servidor, al estilo de Kubrick en 2001 tanto por sus decorados como por el componente puramente visual y estético.
A esta magnífica producción hay que sumarle la banda sonora a cargo de Theodore Shapiro, que capta toda la esencia y atmósfera de la serie. Prueba de ello es el tema principal, utilizado en varias ocasiones durante la primera temporada. Además, sirve de melodía en la también atrayente intro, una belleza visual de poco más de un minuto.
Por último, y no menos importante, hay que destacar el excelente trabajo de todo el reparto. Empezando por Adam Scott, que maneja a la perfección los dos registros de Mark y está genial como protagonista. No se quedan atrás Patricia Arquette como la misteriosa Harmony Cobel, el gran John Turturro, Britt Lower siendo nuestros ojos en Lumon y el sorprendente Tramell Tillman como Milchick. Los Emmys deberían reconocer su trabajo.
Conclusión de 'Separación'
Separación (Severance) es la mejor serie de lo que llevamos de año y una propuesta a la que no hay que perder de vista. La serie de Apple TV+ es totalmente hipnótica y un auténtico regalo para los amantes de la ciencia ficción. Desde los misterios que plantea hasta su excelente reparto, Separación muestra los horrores que pueden infundir las empresas a sus trabajadores. Y creedme, merece la pena verlo.
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