En la temporada 2 de Andor, thriller de Lucasfilm nominado al premio Emmy, Tony Gilroy sigue a cargo como principal mente creativa del proceso. Fue rodada en el complejo arquitectónico de Valencia, la Ciutat de les Arts i les Ciències. El estilo arquitectónico futurista del recinto diseñado por Santiago Calatrava fue el reclamo para que se convierta en una de las localizaciones del universo de Andor de Lucasfilm. La temporada final cuenta con 12 episodios divididos en cuatro entregas con tres episodios cada uno. Los tres primeros episodios se estrenaron el 23 de abril de 2025 en Disney+, y los capítulos siguientes se emitieron semanalmente.
Crítica de 'Andor (Temporada 2)'
Resumen
Ficha Técnica
Título: Andor
Título original: Star Wars: Andor
Reparto:
Diego Luna (Cassian Andor)
Denise Gough (Dedra Meero)
Adria Arjona (Bix Caleen)
Stellan Skarsgård (Luthen Rael)
Kyle Soller (Syril Karn)
Genevieve O'Reilly (Mi mamá)
Elizabeth Dulau (Kleya Marki)
Anton Lesser (Major Partagaz)
Muhannad Ben Amor (Wilmon)
Faye Marsay (Vel Sartha)
Jacob James Beswick (Asistente Heert)
Michael Jenn (Supervisor Lagret)
Dave Chapman (B2EMO)
Alastair Mackenzie (Perrin Fertha)
Año: 2022 / 2025
Duración: 40 min.
País: Estados Unidos
Director: Tony Gilroy (Creador), Toby Haynes, Benjamin Caron, Susanna White, Ariel Kleiman, Alonso Ruizpalacios, Janus Metz Pedersen
Guion: Tony Gilroy, Stephen Schiff, Dan Gilroy, Beau Willimon, George Lucas, Tom Bissell. Obra: George Lucas
Fotografía: Adriano Goldman, Frank Lamm, Damián García, Mark Patten, Christophe Nuyens
Música: Nicholas Britell
Género: Ciencia ficción. Aventuras
Distribuidor: Disney+
Tráiler de 'Andor (Temporada 2)'
Sinopsis
En la temporada 2 de Andor, los personajes y sus relaciones se intensifican a medida que la guerra se acerca y Cassian se convierte en una pieza clave para la Alianza Rebelde. A medida que aumentan los riesgos, las traiciones, los sacrificios y los conflictos de intereses, todos se verán puestos a prueba.Repleta de intrigas políticas, peligros y tensión, la serie es una precuela de Rogue One: Una historia de Star Wars que narra la historia de un heroico grupo de rebeldes que roba los planos del arma de destrucción masiva del Imperio: La Estrella de la Muerte, preparando el escenario para los acontecimientos de la película original de 1977. Andor retrocede años cinco respecto a los acontecimientos de Rogue One para contar la historia de Cassian Andor, el héroe de la película, y su transformación de un desconocido cínico y desinteresado, un héroe rebelde destinado a un destino épico.
Dónde se puede ver la película en streaming
Planteamiento técnico
La temporada 2 de la serie de Andor se estructura en cuatro bloques narrativos compuestos de tres episodios cada uno. A la hora de su estreno en Disney Plus, esta elección hacía que cada bloque de tres capítulos formasen como una película, haciendo, pues, una suerte de tetralogía, ya que cada conjunto trata sobre un arco argumental concreto que hacen avanzar la trama, los sentimientos de los personajes y sus situaciones de manera bastante orgánica.
Estas unidades narrativas nos van a profundizar en la organización de la Alianza Rebelde, algo que ya vimos en la serie Rebels, además de la cacería humana del Imperio mientras desarrollan el proyecto armamentístico que culminará en la Estrella de la Muerte.
La banalidad del mal
En la trilogía original de Star Wars, encontramos que el mal tiene un aura de elegancia y una estética poderosa. Darth Vader es el Lord Oscuro de los Sith con una elegante armadura negray un casco que recuerda al kabuto de un samurai. Le siguen hordas de soldados de asalto de un blanco impoluto y con el rostro cubierto.
Por supuesto que vemos que el Imperio es malvado en la trilogía original, destruyen Alderaan, incineran a Beru y a Owen Larss, no dudan en torturar a Leia o a Han Solo, pero su maldad es distante y aséptica. Siempre se muestra la consecuencia de su maldad, pero no el acto de llevarla a cabo y este acto concretamente es un gesto frío. Quizás en La Venganza de los Sith, la traición a la orden Jedi tiene un impacto emocional más grande en el espectador, pero también los Jedi son héroes que están cayendo en desgracia, no personas comunes.
El Imperio como ente totalitario
En Andor sí vemos las herramientas del mal usarse activamente y en una maldad cotidiana. Ya que si el Imperio puede destruir un planeta, ¿qué va a impedir a un oficial intentar cometer una violación? ¿Qué va a impedir un ataque de falsa bandera? ¿Qué va a impedir el disparar contra personas inocentes sin ningún escrúpulo? Es cierto que a los rebeldes se les muestra también haciendo acciones cuestionables, pero como ellos mismos dicen, están forzados a usar las armas de sus enemigos en post de un futuro mejor.
Esta banalidad del mal es especialmente interesante en los arcos de personaje de Deedra Mero y Syril Karn. Ellos son buenos ciudadanos imperiales, que odian a los rebeldes por los disturbios que crean, pero las elecciones que toman por el bien del Imperio, resultan cada vez más repugnantes moralmente. Además, ese supuesto bien mayor queda diluido entre la maldad y la miseria cotidiana que no justifica estos actos posteriores.
La ética revolucionaria
En el otro lado del espejo tenemos el nacimiento ideológico de Cassian Andor. Diego Luna lleva la interpretación de Andor desde el lumpen más miserable hasta convertirlo en una vanguardia revolucionaria convencida. La serie de Tony Gilroy muestra con bastante buen criterio como una maquinaria horrible y genocida como es el Imperio acaba revolviendo la conciencia de las buenas personas. En el programa tenemos detalles de lo más interesantes al respecto, como los gestos solidarios y espontáneos de personas de clase trabajadora hacia la Rebelión o la desinformación de las noticias imperiales para vender un relato parcial de los hechos.
Conclusión de Andor (Temporada 2)
Andor asume una de las mejores tradiciones de Star Wars y esta es la de ser cine político, a pesar de que muchos no se hayan enterado de que va aún esta saga. Andor huye de las piruetas jedi y de las grandes gestas. La serie se baja al barro de lo cotidiano y nos muestra el sacrificio colectivo de multitud de rebeldes anónimos para que la Rebelión triunfe sobre el Imperio. Con un tono de espionaje digno del mejor Frederick Forsyth (que en gloria esté) o de John Le Carré, Andor crea una serie madura, política, consciente con la realidad actual, a la par que tremendamente necesaria y muy bien filmada. Absolutamente recomendable.
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