Boksoon debe morir (Kill Book-son) es un thriller de acción coreano, que recoge las peripecias una asesina profesional que además debe comportarse como una madre normal ante su hija adolescente. La película está dirigida por Byun Sung-hyun (The merciless, My P.S partner). En el reparto encontramos a Jeon Do-yeon (Secret sunshine, Nido de víboras), a Sol Kyung-gu (No mercy, Hope) y a Kim Si-a (Mar de la tranquilidad, The closet). Tuvo su premiere en el reciente Festival de Berlín, y se estrena en Netflix el 31 de marzo de 2023.
Crítica de 'Boksoon debe morir'
Resumen
Ficha Técnica
Título: Boksoon Debe Morir
Título original: Kill Bok-soon
Reparto:
Jeon Do-yeon (Gil Bok-soon)
Sol Kyung-gu (Cha Min-kyu)
Esom (Cha Min-hee)
Koo Kyo-hwan (Han Hee-seong)
Kim Si-a (Gil Jae-yeong)
Lee Yeon (Yeong-ji)
Año: 2023
País: Corea del Sur
Dirección: Byun Sung-hyun
Guion: Byun Sung-hyun
Fotografía: Cho Hyung-rae
Música: Kim Hong-jip, Lee Jin-hee
Distribuidor: Netflix
Tráiler de 'Boksoon debe morir'
Sinopsis
Gil Boksoon, que tiene un contrato con la agencia de asesinos profesionales MK Ent., es a la vez una sicaria con un índice de éxito impecable y la madre de una adolescente, Jae‑young. Aunque Boksoon es una asesina de élite, la maternidad no se le da tan bien, así que decide retirarse para reparar la relación con su hija. Antes de notificar su decisión, Boksoon descubre un secreto sobre su última misión y decide romper la regla de que los asesinos deben intentar ejecutar todos los encargos sin importar las circunstancias. A causa de ello, se convierte en el blanco no solo de la agencia que la contrató, sino de todos los demás sicarios. (Netflix España)
Dónde se puede ver la película en streaming
Los problemas de una doble vida
Boksoon debe morir sigue los pasos de Gil Bok-soon (Jeon Do-yeon) una mujer con una inusual doble vida de difícil conciliación. De una lado es una asesina profesional, una sicaria, que trabaja para una corporación llamada MK, especializada en el exterminio de personas. De otro lado, es madre de una adolescente que está pasando por unos momentos cruciales y difíciles en su vida, y que se siente sola y algo abandonada por su progenitora.
Hay dos referencia instintivas que pueden sernos familiares al enunciar el argumento. Al mencionar una sociedad dedicada al asesinato, con su propio submundo y reglas, podemos pensar en la saga de John Wick. Pero también puede recordarnos al díptico de Kill Bill en su afán por presentarnos a una sicaria letal. También sigue los pasos de algunos intentos del cine de acción moderno como Kate (2021), Jolt (2021) o Gunpowder Milkshake (2021).
No obstante, hay una diferencia de tono que personaliza Boksoon debe morir de otras propuestas. La protagonista no tiene el desarraigo de los personajes de otros títulos. Debe ejercer también las labores de madre de una adolescente, lo que ofrece una doble condición del personaje. Boksoon por muy madre que sea, gusta de sentirse una buena profesional en lo suyo aunque la diferencia entre las dos vidas sea abismal y contradictoria.
Una película heterogénea
Boksoon debe morir se pasea por diferentes tonos y géneros, un poco acorde con la esquizofrénica vida de su protagonista. De inicio,en los primeros compases, predomina el humor negro, con recursos propios de la comedia asociados al uso irónico de la violencia. La primera escena de lucha no tarda mucho en llegar y además es el embrión de las posteriores. Todas comparten vistosidad, una coreografía cuidada y una violencia indisimulada.
Esta heterogeneidad de elementos no es satisfactoria en la primera hora de metraje. Unos primeros minutos prometedores dan paso a un buen rato de metraje insulso, donde el afán de explicarnos la "mitología" de MK, y el sustrato familiar propio de Boksoon se alarga demasiado. Excesivo hincapié para unas situaciones que podrían haberse pintado con unas cuantas pinceladas de menos.
La mezcla de géneros para la película es un lastre y una oportunidad al mismo tiempo. Proporciona una alternativa al cine de sicarios/asesinos dando la posibilidad de construir incluso algún arco dramático interesante e insólito. Poco a poco Boksoon debe morir encontrando la armonía comunicante entre todos estos elementos, pero al precio de tener que esperar hasta el ansiado momento en que las piezas encajan. Y es que los 137 minutos se antojan excesivos para una historia que parece replegarse sobre sí misma.
Algunos temas de Boksoon debe morir
Boksoon debe morir tiene, a parte de sopapos, momentos que albergan reflexiones vitales o lanzan al vuelo algunas ideas. A bote pronto se nos habla de las consecuencias de cargar un secreto, tanto para uno mismo como para los demás. También de la pérdida de la inocencia, como puede verse en las denodadas acciones de Bookson para que su hija no sepa nada de sus actividades con MK. Del mismo modo, la hija de la asesina tiene su propia odisea marcada por algunos problemas identitarios. Añadamos algunos otros, como el peso del pasado, la idea de lealtad, priorizar a la familia sobre el trabajo...
Toda esta mezcolanza comienza a cobrar sentido en la segunda mitad, donde el nudo se cierra y empiezan a converger los frentes abiertos con anterioridad. Bookson llega a situaciones, auténticos callejones sin salida, que atañen al compañerismo, a la relación materno-filial y al peligro de mezclarse con el hampa. El ritmo comienza a ser más continuo y las situaciones más interesantes, después de las arritmias de la primera hora de película.
Según avanza Boksoon debe morir, también se deja de lado algo de humor. Comienza a ser más llamativo la sensación de traición y descreimiento, y hay una melancolía que si bien no es demasiado potente, sí deja un poso en el espectador. De todos modos para algunos de estos detalles es ya un poco tarde para que el mencionado poso sea completamente eficaz.
Coreografías de golpes
En un thriller coreano, a poco que se flirtee con la acción, casi seguro que tendremos unas cuantas luchas singulares, de condición espectacular y con su correspondiente coreografía. Las hay alborotadas y tumultuarias, que son las más locas y cuentan con el componente épico necesario para captar fácilmente la atención del espectador. Como ocurre en cierta reyerta tabernaria, con el resultado de personas y mobiliario despatarrados por el suelo. Hay también algunos recuros originales como desdoblamientos, o el uso como armas de elementos poco esperados. También hay humor (ojo a una especie de gag que recurre a cierto momento de las películas de Indiana Jones).
Estos lances no escatiman violencia y aunque no lleguen a la visceralidad de otras película coreanas, hay suficiente contundencia para que los fans de las artes marciales cinematográficas queden satisfechos. Si bien no constituyen una regla, sino un uso dosificado durante el desarrollo de Boksoon debe morir.
El elenco de Boksoon debe morir
Si hay alguien que destaque hondamente en el campo de las actuaciones, esa es Jeon Do-yeon, actriz de contrastada solvencia que ganó el premio a la mejor actuación en Cannes, en 2007, con la película Secret sunshine. Jeon Do-yeon se hace con las riendas de Boksoon debe morir, y es lo mejor de la misma incluso en los momentos más discretos. Consigue que las dos facetas de Boksoon, la letal y la familiar, concurran en ella sin chirriar. Además es un personaje que nos cae bien, a pesar de sus dobleces morales.
Sol Kyung-gu interpreta al director de la empresa de sicarios MK, en un papel subsidiario respecto al de Jeon Do-yeon (como todos en realidad). Al menos da el pego como persona fría y diligente que se toma en serio su siniestro trabajo. Con Boksoon tendrá una relación ambigua. La hermana del director de MK (Esom), tiene sus sentimientos más claros respecto a la asesina: la odia profundamente, y en realidad es la antagonista químicamente pura.
La hija de Boksoon (Kim Si-a) da el pego como adolescente cabreada y frustrada al no encontrar asidero en su madre en momentos difíciles relacionados con su identidad sexual. Hay una relación similar entre Boksoon y una joven aprendiz de MK, a la que tratará de proteger del sórdido mundo en el que está cerca de ingresar. En cualquier caso, Boksoon debe morir es un cumplido lucimiento para Jeon Do-yeon, que no defrauda como protagonista.
Conclusiones de 'Boksoon debe morir'
Boksoon debe morir es un thriller de acción, dentro del subgénero de asesinos a sueldo, que introduce la variable anómala del drama familiar. Tras una primera mitad indecisa, dubitativa, y dispersa todo llega a encauzarse en la última hora de película. Como mal síntoma queda un metraje excesivo y la tendencia a la reiteración. En el haber, no obstante, tiene una buena factura, meritorios momentos de acción y una actuación notable de Jeon Do-yeon. La mezcla entre lo visceral y lo familiar tiene resultados desiguales que mejoran cuando hay algo de humor de por medio.
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