¿Creemos que por estar detrás de una pantalla nuestros actos no tendrán consecuencias? ¿Hasta qué punto es sostenible un sistema que se aprovecha del que menos tiene para ganar más? Esa es la premisa que nos presenta Cloud, la última película del cineasta Kiyoshi Kurosawa y que ha sido elegida por Japón como candidata a los Óscar como mejor película internacional y se podrá ver en salas españolas a partir del 22 de noviembre de 2024.
Crítica de 'Cloud'
Resumen
Ficha Técnica
Título: Cloud
Título original: Cloud
Reparto:
Masaki Suda (Ryôsuke Yoshii)
Kotone Furukawa (Akiko)
Daiken Okudaira (Sano)
Amane Okayama (Miyake)
Yosiyoshi Arakawa (Takimoto)
Masataka Kubota (Muraoka)
Masaaki Akahori (Sôichi Tonoyama)
Mutsuo Yoshioka (Yabe)
Yusei Mikawa (Inoue)
Maho Yamada (Chizuru Tonoyama)
Toshihiro Yashiba (Oficial de policía Hôjô)
Yoshiyuki Morishita (Murota)
Tetsuya Chiba (Cazador)
Yutaka Matsushige
Año: 2024
Duración: 124 min.
País: Japón
Director: Kiyoshi Kurosawa
Guion: Kiyoshi Kurosawa
Fotografía: Yasuyuki Sasaki
Música: Takuma Watanabe
Género: Thriller. Terror
Distribuidor: A Contracorriente Films
Tráiler de 'Cloud'
Sinopsis de Cloud
En Tokio, Yoshii vive en un pequeño apartamento, trabaja en una fábrica en cadena y pasa su tiempo libre con su pareja y su amigo del instituto superior. Aparentemente lleva una vida tranquila, sin demasiadas complicaciones y sin excesos. Pero, Yoshii tiene un don para encontrar chollos y dar con cualquier tipo de artículos que se reevalúan cuando pasan por sus manos y que, después vende online a un precio muy superior a su coste de adquisición.
Como el negocio de la reventa parece dar sus frutos, deja su trabajo y se muda con su novia a una casa más grande y alejada de la ciudad. Aunque no quita los ojos de la pantalla de su ordenador para ver cómo evolucionan sus ventas, la realidad es que es consciente de que alguien está atento a todos sus pasos y no está del todo contento con su nueva y dudosa empresa.
Dónde se puede ver la película en streaming
Como las nubes, que se acercan antes de una gran tormenta
Cloud, película que nos retrata la cara oculta de Internet y sobre todo, de las personas que se esconden detrás de una pantalla, dejando todo rastro de humanidad a un lado. Yoshii se dedica a revender cosas, cualquier cosa, sin importar la procedencia o la autenticidad de las mismas. Las consecuencias no parecen importarle mientras sus ventas se disparen y consiga dinero “rápido y fácil” para seguir manteniendo este sistema, sin plantearse si es viable que sea duradero. Se ha enganchado totalmente al click rápido, al oportunismo y a la compulsión.
El propio Yoshii, antes de dejar su trabajo, explica a su jefe que no es una persona ambiciosa, el dinero no le importa tanto, sino que es el propio sistema que le arrastra, el ego de aumentar las ganancias y seguir jugando a un juego que puede tener consecuencias fatales.
¿Qué le importa a él si los bolsos que vende son falsificaciones? o ¿Si ha mal comprado todo el esfuerzo y trabajo de una familia? A Yoshii sólo le importa seguir ganando. Y es que para él, la reventa es como un juego y él está en plena racha, no puede parar la maquinaría aunque las amenazas de peligro cada vez sean más evidentes.
Cree que el anonimato que le da su perfil de internet, Ratel, le es suficiente para protegerse pero, lo que no llega a comprender es que hay personas detrás que movidas por la avaricia, el odio, el interés y el deseo de venganza llegarán hasta dónde sea con tal de que Yoshii pague las consecuencias.
Cómo Internet y el sistema capitalista pueden ser un arma de doble filo
Cloud combina el thriller, la crítica social, la obsesión y el humor satírico y absurdo que caracteriza a las producciones de Kiyoshi Kurosawa como en La mujer del espía, 2020 o Tokio Sonata, 2008. En la película Cloud realiza una radiografía al uso que se le puede dar a Internet y al sistema capitalista sin raciocinio. Por un lado, nos muestra el lado menos humano y más crudo de las comunidades que se forman a través de las pantallas.
Como el concepto de “comunidad” también incluye personas que se unen ante un denominador común pero, con el fin de acabar con él. Mostrando un reflejo individual del odio, del malestar del ser y de la necesidad de vengarse para sentir regocijo, que se retroalimenta entre personas con las mismas necesidades. Y también, la despersonalización, la desconexión de la realidad y la codicia disfrazada de pragmatismo que mueve a Yoshii a evitar cuestionarse cómo sus negocios pueden afectar a sus clientes y proveedores, por la calma que le ofrece estar detrás de una pantalla.
Haciéndonos plantearnos… ¿Hasta qué punto somos morales si tenemos la certeza de que nuestros actos no se castigarán? Por otro lado, vemos un estadillo del sistema capitalista, en el que el pobre quiere lo que tiene el rico, y el éxito del otro le remueve de odio, envidia y codicia, llegando a actuar desde esas emociones para dañar al que ha conseguido más.
Un ritmo narrativo lento, y un giro de guión difícil de encajar
En Cloud podemos distinguir dos partes y ritmos narrativos muy diferenciados, que encajan con dificultad y confunden al espectador. Hasta la segunda mitad del film el ritmo narrativo lento, con planos detalles vacíos, con una acción insustancial y un guión bastante escueto. La segunda parte está llena de movimiento, ruido, oscuridad, balazos y persecuciones mezcladas con un humor absurdo que recuerdan, salvando las distancias, al estilo de Tarantino.
Aunque Kiyoshi Kurosawa sabe cómo crear una atmósfera de tensión que tras el análisis profundo del film permite entender y encajar cada una de las piezas del puzzle. Juega con transiciones y planos en los nos deja entrever que alguien le está observando. Por todo ello, Cloud es una película compleja, en la que el espectador tiene que ir analizando y recogiendo cada pequeño detalle para desarrollar el entramado que conecta cada acción, cada plano y cada texto de guión.
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