Kirill Serebrennikov dirige Leto. Una cinta de ciento veintiséis minutos llenos de pretensión. El descubrimiento del rock de unos pocos jóvenes crea una atmósfera underground que los encierra. Looks ochenteros emulando estrellas del rock, un triángulo amoroso y sentimientos en efervescencia. Una coproducción entre Rusia y Francia con todo tipo de opiniones. ¡Ah! y rodada en blanco y negro. Presentada en el XV Festival de Cine de Sevilla. Estreno el 26 de Abril.
Crítica de Leto
Resumen
Ficha Técnica
Título: Leto
Reparto:
Teo Yoo (Viktor Tsoy)
Irina Starshenbaum (Natasha)
Roman Bilyk (Mayk Naumenko)
Anton Adasinsky (Khozyain kvartiry)
Liya Akhedzhakova (Khozyayka kvartiry)
Yuliya Aug (Anna Aleksandrovna)
Filipp Avdeev (Leonid)
Aleksandr Bashirov (Hombre enojado en tren)
Nikita Efremov (Bob)
Año: 2018
Duración: 126 min.
País: Rusia
Director: Kirill Serebrennikov
Guion: Michael Idov, Lily Idov, Kirill Serebrenniko
Fotografía: Vladislav Opeliants
Música: Ilya Demutskiy
Género: Biopic. Drama musical
Distribuidor: Avalon Distribución Audiovisual
Trailer de Leto
Sinopsis
Leningrado, un verano a principios de los 80: la escena del rock de la ciudad está en pleno apogeo. Viktor Tsoï, un joven músico que creció escuchando a Led Zeppelin, T-Rex y David Bowie, está tratando de hacerse un nombre. El encuentro con su ídolo Mike y su esposa, la bella Natacha, cambiará su destino. Juntos construirán una leyenda que les llevará a la eternidad. (Avalon Distribución Audiovisual)
Premios
- Festival de Cannes: Sección Oficial. 2018
- Festival Internacional de Cine de San Sebastián: Sección Perlas. 2018
- Festival de Sevilla: Selección EFA. 2018
Dónde se puede ver la película
Una buena banda sonora y una conseguida postproducción
En realidad, tiene algo de trampa. La película es un frenesí de clásicos del rock, como las canciones de Lou Reed y Marc Bolan (T. Rex), mezclados con rock ruso (que a mí, particularmente, me chocó). Es evidente que el rock iba a funcionar, como siempre lo ha hecho, y más tratado de la forma en la que se trata.
A esto hay que añadir que, si no era ya suficientemente difícil encontrar la línea entre el drama y el musical, la postproducción es prácticamente de videoclip. Se puede decir tanto que son atrevidos y funcionan, como que son extravagantes y descolocan. Y sería igualmente cierto.
Aún así, dejan una buena sensación, tienen sentido y casi que se agradecen.
Hablar a cámara, ¿sí o no?
Para mí, es acertado. Sorprende y capta la atención del espectador cuando podía empezar a diluirse. Además, da inicio, o es precedido, de alguna escena o secuencia surrealista y excéntrica. De modo que, puede llegar a entenderse como la frontera entre la ficción y la no ficción. Que en ocasiones no queda del todo clara.
Conclusión de Leto
Serebrennikov propone algo refrescante. En el elenco nadie destaca por encima del resto. Son los elementos técnicos los que le dan ese toque que la hace diferente, que unido a la banda sonora, dejan un buen sabor de boca al salir de la sala. Y si no fuese todo suficientemente alternativo, el director sigue en arresto domiciliario a la espera de un juicio.
Reportaje de Leto en Días de Cine TVE