La tortuga roja, A Ghost Story y Boyhood (Momentos de una vida) son tres filmes diferentes en muchos sentidos y, en algunos aspectos, resultan hasta incomparables. Sin embargo, comparten una intenciĂłn bastante clara: la de transmitir el paso del tiempo y no en tĂ©rminos formales en escenas de cortas transiciones del tiempo narrativo (como pasa en los trabajos de Andrei Tarkovsky, construcciones a las que Ă©l mismo definĂa como “escultura del tiempo”), sino más bien, como un vuelo amplio dentro del propio universo temporal que estas pelĂculas narran.
Tres filmes que retratan convincentemente el paso del tiempo
Resumen
La tortuga roja – 2016 – Michael Dudok de Wit
Trabajo de animaciĂłn que funciona como una metáfora del paso del tiempo y del propio ciclo de la vida de un ser humano. Un náufrago llega a una isla de la cual no puede escapar. Con la ayuda de una enigmática tortuga roja experimenta “toda una nueva vida”, con cada una sus fases más significativas. Es una pelĂcula con un argumento simple, pero a la vez poĂ©tico, sensible y profundo, que contempla y saluda a la vida desde una perspectiva optimista: es como si señalara que hay que celebrarla con lo que se tiene en manos, en el aquĂ y el ahora.
CrĂtica en Cinemagavia
A Ghost Story – 2017 – David Lowery
Narra una historia desde el punto de vista de un espectro, lo cual aporta un carácter etĂ©reo, melancĂłlico y meditativo a la pelĂcula. Una historia de fantasmas hace Ă©nfasis en la condiciĂłn pasajera de los seres humanos, los objetos y las transformaciones de los espacios a travĂ©s del tiempo. El filme es una reflexiĂłn sobre la existencia, sus posibles dimensiones fĂsicas, las relaciones humanas, las pasiones, el apego y las posesiones, asĂ como el estado pasajero de todo lo que existe. El tiempo es presentado como una especie de eje que conecta todo lo que podemos sentir, apreciar, experimentar…Una historia de fantasmas es una experiencia cinematográfica enigmática, agridulce y fascinante.
Boyhood – 2014 – Richard Linklater
De los tres filmes de esta lista, Boyhood (Momentos de una vida) es el que se enfoca en el pasar del tiempo de la manera más orgánica, puesto que vemos cĂłmo los propios actores van envejeciendo a travĂ©s del metraje, el cual abarca un perĂodo de doce años. A travĂ©s de los años vemos el proceso de formaciĂłn y maduraciĂłn del personaje central de la obra, Mason Evans Jr. (interpretado por Ellar Coltrane) y todo lo que va pasando en su entorno, especialmente, el familiar.
Boyhood es un filme que va mucho más allá de una hazaña de disciplina y consistencia (eso de que tardó doce años en rodaje), pues logra observar y tocar con un naturalismo impresionante las dinámicas de la vida, los “mecanismos” en los seres que la experimentan y las relaciones de causa y efecto en todo lo que les va ocurriendo. Sin dudas que Richard Linklater es un observador de la vida, un psicólogo que hace cine.
Boyhood (Momentos de una vida) no sĂłlo es la más extensa de las tres pelĂculas tratadas en este escrito, sino que tambiĂ©n serĂa la ideal para cerrar el ciclo propuesto, ya que es la que esclarece, exalta y detalla, el andar del señor Tiempo.