Marco Bellocchio (Vincere, Il traditore, 2023) es un cineasta italiano al que sigo con interés de un tiempo a esta parte. Su cine crítico revisa momentos de la historia italiana con una destreza muy particular. Un claro ejemplo lo encontramos en El rapto (Rapito), su última película, cuyo fin es retratar el secuestro de un niño judío por parte de los soldados del Papa ocurrido en 1858 y la lucha de su familia por recuperarlo. El rapto ha cancelado su fecha de estreno en salas de cine españolas que estaba previsto para el 1 de diciembre de 2023 tras su paso por festivales como la Seminci de Valladolid. Estreno en salas de cine españolas el 12 de enero de 2024.
Crítica de 'El rapto'
Resumen
Ficha Técnica
Título: El rapto
Título original: Rapito
Reparto:
Filippo Timi (Cardenal Giacomo Antonelli)
Fabrizio Gifuni (Pier Gaetano Feletti)
Barbara Ronchi (Marianna Padovani Mortara)
Paolo Pierobon (Papa Pio IX)
Fausto Russo Alesi (Salomone Mortara)
Enea Sala (Edgardo Mortara cuando era un niño)
Leonardo Maltese (Edgardo Mortara cuando era adolescente)
Año: 2023
Duración: 125 min.
País: Italia
Director: Marco Bellocchio
Guion: Marco Bellocchio, Susanna Nicchiarelli, Edoardo Albinati, Daniela Ceselli
Fotografía: Francesco Di Giacomo
Música: Fabio Massimo Capogrosso
Género: Drama. Religión
Distribuidor: Vértigo Films España
Tráiler de 'El rapto'
Sinopsis
La historia se desarrolla en el barrio judío de Bolonia. Año 1858. Los soldados del Papa irrumpen en la casa de los Mortara para secuestrar a su hijo de siete años, Edgardo. La película sigue la lucha de la familia para tratar de recuperar a su hijo ante esta acción de la Iglesia Católica. (Vértigo Films España)
Dónde se puede ver la película en streaming
Los mecanismos del poder
El rapto tiene un mensaje y el director deja claro su postura desde el primer minuto porque Marco Bellocchio sabe proponer una historia llena de juegos de poder, mecanismos de control sociales y una durísima crítica a la institución católica.
El cine de Bellocchio acostumbra a reflejar hechos reales de gran crudeza. Un acierto de El rapto es saber trasladar la angustia de una familia judía de Bolonia al verse obligados a dejar que se lleven un hijo de seis años a Roma. La construcción de los personajes, sin ser nada novedoso, funciona y te hace sentir una impotencia terrible.
El rapto es un melodrama histórico que atrapa y sabe mantener la tensión a lo largo de toda la película. Si bien es cierto que su primera mitad resulta la parte más interesante, algunas secuencias de la segunda mitad demuestran el saber hacer de Bellocchio tras la cámara.
Luces y sombras
La institución católica ha sido un poder muy importante en la historia de Europa. La manipulación y el abuso de poder permitieron a la Iglesia mantener el poder en los Estados Pontificios hasta el siglo XIX.
Marco Bellocchio retrata una iglesia inquisitorial, preocupada por mantener un poder que está perdiendo y sin rumbo. El director se encarga de transmitir la virulencia del poder eclesiástico y de dejar clara la injusticia.
El hecho de que el director italiano tome partido por un bando no significa que los haga inocentes. Bellocchio deja claro que los judíos romanos pese a su obligada sumisión luchan para liberarse. Sin embargo, la crueldad del Papa Pio IX, interpretado por un magnífico Paolo Pierobon, no tiene límites.
Con todo, la primera mitad de El rapto es superior a la segunda parte. Una vez finalizado el juicio y con el salto temporal la película pierde un poco pese a que mantiene la tensión y cuenta con alguna escena de gran calado dramático.
Religión y humanidad
El rapto consigue captar la mirada del espectador con su fotografía y sus escenarios. Salas bellamente decoradas, iglesias tenebrosas y personajes malvados pueblan la Roma previa al estado italiano.
El contraste que consigue Bellocchio entre la iluminación de los interiores de Roma y la oscuridad de las escenas con judíos solo hace temer más las palabras de bondad católicas que esconden el terrible acto del secuestro.
Conclusión de 'El rapto'
El rapto construye un mordaz relato acerca del poder religioso y reflexiona sobre los límites éticos y morales de la fe. una película que lleva claramente estampada la firma de Marco Bellocchio. El retrato de una injusticia histórica y la poderosa tensión que atrapa al espectador son el sello indeleble de uno de los mejores directores italianos contemporáneos.
Reportaje de El rapto en Días de Cine TVE
Únete a nuestro CANAL DE TELEGRAM
