Hollywood se tambalea y, como tantas otras veces, lo hace recurriendo a su propia mitología. Las dos ex-reinas adolescentes de principios de los 2000, Hilary Duff y Lindsay Lohan, se encontrarán por primera vez en la gran pantalla en el remake de ¿Qué fue de Baby Jane?, uno de los títulos más perturbadores y emblemáticos del cine clásico estadounidense. La noticia no solo ha despertado la curiosidad de la industria, sino también la nostalgia de toda una generación que creció siguiendo las trayectorias paralelas —y enfrentadas— de ambas estrellas.
Hilary Duff y Lindsay Lohan en "¿Qué fue de Baby Jane?"
El anuncio no deja de ser paradójico. El film original, estrenado en 1962, fue protagonizado por Bette Davis y Joan Crawford, cuya rivalidad trascendió la pantalla para instalarse definitivamente en el imaginario colectivo de Hollywood. Más de sesenta años después, Duff y Lohan —protagonistas de uno de los enfrentamientos mediáticos más sonados del segundo milenio— toman el relevo en una historia que parece escrita a medida para ambas. Su primera colaboración conjunta es, para muchos, un regalo cargado de simbolismo y un guiño directo a los espectadores que crecieron entre Disney Channel, comedias juveniles y portadas de tabloides.
El proyecto llega, además, en un momento especialmente significativo para las actrices. Coincide con el regreso de Lindsay Lohan a la gran pantalla tras años de ausencia y con el retorno de Hilary Duff al foco mediático gracias a su vuelta a la música y a una renovada presencia pública. Lejos de los papeles familiares que marcaron sus inicios, ambas actrices afrontan ahora un reto interpretativo oscuro, adulto y profundamente psicológico.
A cargo de Ari Aster
La dirección correrá a cargo de Ari Aster, uno de los cineastas más influyentes del terror contemporáneo gracias a títulos como Hereditary y Midsommar. Su implicación ha elevado el proyecto a la categoría de acontecimiento cinematográfico y lo ha situado entre los estrenos más esperados de los próximos años. Producida por Netflix, la cinta recupera un clásico que en su día supuso también la resurrección artística de Davis y Crawford, dos leyendas que encontraron en ¿Qué fue de Baby Jane? una segunda juventud creativa.
La historia original gira en torno a las hermanas Jane y Blanche Hudson, antiguas estrellas infantiles cuyas carreras tomaron caminos opuestos. Mientras Jane fue cayendo en el olvido, Blanche alcanzó el éxito y el reconocimiento. Tras un misterioso accidente de coche que deja a Blanche en silla de ruedas, ambas quedan confinadas en una casa donde Jane, resentida y mentalmente inestable, somete a su hermana a una crueldad progresiva. Un relato sobre la fama, el resentimiento y la decadencia que sigue resultando inquietantemente actual.
¿Quién será Blanche y quién será Jane?
Ya se ha confirmado que Hilary Duff interpretará a Blanche, mientras que Lindsay Lohan dará vida a la excéntrica y perturbada Jane. El paralelismo con sus propias carreras como estrellas infantiles resulta inevitable. Duff alcanzó la fama mundial gracias a Lizzie McGuire y consolidó su imagen en títulos como Una cenicienta moderna, Doce en casa o Casper y la mágica Wendy. Lohan, por su parte, vivió un ascenso meteórico con Chicas malas, además de protagonizar películas como Ponte en mi lugar, El último show o Bobby. En 2025, su regreso con Ponte en mi lugar de nuevo la devolvió a los aplausos del público que esperaba con ansias su regreso.
Por ahora, solo se ha hecho oficial un cartel que homenajea al original. No se han revelado más detalles sobre el rodaje, que previsiblemente comenzará a principios de 2026. Tampoco se ha confirmado la localización ni el reparto secundario. Lo que sí parece claro es que Hollywood vuelve a apostar por la reinvención de sus propios fantasmas, esta vez encarnados por dos iconos de una generación que está lista para verlas, por fin, en un territorio completamente distinto.
