Kin es la nueva propuesta de ciencia ficción que llega a las pantallas españolas de la mano de Entertainment One Films Spain. La película es el debut en dirección de Jonathan Baker y Josh Baker. En las actuaciones destacamos el papel protagonista en manos del joven Myles Truitt (Dragged Across Concrete) que se rodea de un elenco espectacular del cual destacamos a Jack Reynor (Macbeth), Dennis Quaid (El día de mañana), Zoë Kravitz (Animales fantásticos y dónde encontrarlos) y James Franco (127 horas). La modesta producción de ciencia ficción supone un homenaje a la aventura juvenil ochentera en la que un muchacho de Detroit encuentra un arma futurista en medio de un almacén abandonado. Estreno el 14 de Junio.
Crítica de Kin
Resumen
Ficha técnica
Título: Kin
Reparto:
Myles Truitt (Eli Solinski)
Jack Reynor (Jimmy Solinski)
Dennis Quaid (Hal Solinski)
Zoë Kravitz (Milly)
James Franco (Taylor Balik)
Carrie Coon (Morgan Hunter)
Ian Matthews (Snick)
Gavin Fox (Dutch Balik)
Stephane Garneau-Monten (Remy)
Año: 2018
Duración: 102 min.
País: Estados Unidos
Director: Jonathan Baker y Josh Baker
Guion: Daniel Casey, Jonathan Baker (cortometraje), Josh Baker (cortometraje)
Fotografía: Larkin Seiple
Música: Mogwai
Género: Ciencia Ficción
Distribuidor: Entertainment One Films Spain
Tráiler de Kin
Sinopsis
Eli (Myles Truitt) es un niño afroamericano de 14 años que vive en Detroit con su padre adoptivo, Hal (Dennis Quaid), un compasivo a la par que estricto viudo que percibe que Eli está cayendo en la delincuencia. Mientras explora un edificio abandonado buscando materiales para sacarse un dinero extra, Eli se topa con los restos de un impacto de otro mundo. Entre los escombros, encuentra una extraña caja Metálica que se lleva a casa. Desconoce lo que es, pero al cogerla parece activarla, y Eli decide guardarla cuidadosamente… (Entertainment One Films Spain)
Dónde se puede ver la película
La nueva prospectiva del cortometraje
La cinta debutante de los hermanos Baker es el resultado de su interesante cortometraje Bag Man. Tras su paso por varios festivales en el 2014, llamó la atención de varias productoras que finalmente les dio la oportunidad de realizar su primer largometraje. Nadie pone en tela de juicio de que el cortometraje es una buena prueba de fuego, ejercicios para demostrar el potencial. Lo que sí se puede poner en duda es en realizar tu primera película a partir de un corto. Una tendencia que se lleva poniendo de moda en los últimos años. Es decir, el cortometraje está perdiendo su valor estético per se para convertirse en una escena de un proyecto de película. Historias que por otra parte no dan más de sí, se convierten en simples high concept que se pierden en la nada.
Antes de que nos puedan llover palos, es cierto que hay bastantes películas buenas basados en cortos. Por citar algunos ejemplos: Napoleon Dynamite, Distrito 9 o Whiplash. Es más una tendencia que se produce últimamente en películas de género. Grandes cortos con conceptos espeluznantes como Mamá o Lights Out dieron cintas muy pobres. Tal vez sea por guiones poco trabajados que no suelen estar a la altura de ese gran concepto. El caso de Kin pertenece a este último grupo. ¿De verdad que un concepto de un chaval que se encuentra un arma futurista da para un largometraje? Por el resultado visto, nos atrevemos a decir que no.
Desde la referencia a lo vacío
Daniel Casey es el guionista encargado de dar más entidad a la película de los Baker. Pese a que tenga poca experiencia, Casey tiene varios proyectos interesantes en un futuro cercano como Fast & Furious 9 y Kill Or Be Killed. En el caso de Kin tenemos un guión que se esfuerza por llenar la película de elementos dramáticos: niño adoptado, madre fallecida, hermano recién salido de la cárcel, problemas escolares... Al final la película está tan recargada que es imposible creértela y entrar en su juego. Por lo tanto en vez de ser una película emocionante, queda una película hueca, sin personalidad, en definitiva, sin alma. Las relaciones entre los personajes son frías y distantes, funcionan como collage, como elementos puestos al azar.
Respecto a la trama en sí, la película pasa de ser una película "amblin" a una road movie. Como road movie la película se cae también. Y eso que contamos con una buena actuación de James Franco que interpreta a una suerte de capo criminal sin escrúpulos y la presencia de dos misteriosos motoristas que persiguen a los hermanos. De hecho esta relación de los hermanos es otro gran tema de la película. En boca del propio personaje de Jimmy (Daniel Casey) "Por fin podemos tener una relación de hermanos". Y esta relación fraternal es uno de los aciertos de la película ya que pasan de ser casi desconocidos a buenos hermanos.
POST-apocalismos
En último lugar vamos a comentar varios elementos audiovisuales de la película. En Kin tenemos dos partes completamente diferenciadas: la primera parte está compuesta por un aura postapocalíptica ya que transcurre en Detroit, una ciudad casi fantasmal que ya ha sido aprovechada en películas como It Follows o Lost River. La segunda parte, la road movie, esta llena de paisajes desolados, gasolineras en medio de la nada, etc. Todo esto reforzado por la banda sonora compuesta por la banda de post rock, Mogwai. Nos encanta la banda escocesa y apenas está aprovechada en la película. Así pues no es de locos pensar que durante toda la película flota un sentimiento de la soledad, la tristeza... Una buena intención que no termina de funcionar porque en ningún momento se atisba la cohesión entre los elementos.
Conclusión de Kin
Pese a una prometedora premisa y un póster alucinante, Kin no consigue desarrollar el potencial que se le presuponía. Queda demostrado que no hace falta acumular de elementos una película para dotarla de personalidad. En el caso de la película de los Baker tenemos una película impersonal, que no transmite emociones, que queda deslavazada en un sinfín de elementos sin personalidad. Lo mejor que se puede decir de ella es que es un corto alargado.
He visto hoy mismo la película porque parecía algo bueno pero para nada. Guión muy malo, que intentaba contar demasiadas cosas y lo único que logró fue mezclar muchas otras que no llegaban a ningún sitio. Los protas que pasaron de ser auténticos desconocidos a mejores hermanos, los tipos de otro planeta que al final resultan ser familia de Eli y que yo mismo esperaba algo más de ellos para que solo al final hicieran su pequeña escena de acción que quedó en poco más que nada.