La Abadía cruza la calle estrena la pieza escénica "Vivo en una residencia de acogida, cumplo 18 y ahora ¿qué?". Así celebra un lustro como taller de convivencia y creatividad teatral para menores que se encuentran en una situación de régimen de acogida en Chamberí y Vallehermoso, junto con vecinos del barrio y personas con diversidad funcional y cognitiva. Coordinado por Rosario Ruiz Rodgers y la labor pedagógica de Sara Velasco, se presenta este 23 de enero el proyecto. Así busca dar visibilidad a estos menores para favorecer su acogida en familias y llamar la atención de las instituciones para mejorar sus condiciones económicas y administrativas.
La Abadía cruza la calle
El taller teatral de La Abadía cruza la calle cumple cinco años en pie y este 23 de enero presenta la pieza "Vivo en una residencia de acogida, cumplo 18 años y ahora, ¿qué?".
La Abadía cruza la calle es un proyecto de mediación artística cuyo objetivo es crear un espacio de juego, convivencia y reunión social entre menores en régimen de acogida de las residencias de Chamberí y Vallehermoso con los vecinos del barrio y personas con diversidad funcional y cognitiva. Sus responsables lo definen como “un lugar donde sientes que no hay un prejuicio ni un criterio de valor social establecido”, explica Rosario Ruiz Rodgers, coordinadora artística del Centro de Estudios del Teatro de La Abadía.
Las protagonistas del taller
Este 2023, las protagonistas de la pieza escénica son Naomi Acentua, Rose Lanuza y Blessing Ogude, tres alumnas “veteranas” del proyecto que sentían la necesidad de compartir su vivencia en una residencia de menores y el salto que supone cumplir la mayoría de edad. Así, el 23 de enero, la obra "Vivo en una residencia de acogida, cumplo 18 años y ahora ¿qué?", propuesta por las jóvenes, busca canalizar sus emociones y compartir con los asistentes al taller sus reflexiones sobre ese paso de la infancia, que muchas no han tenido, a la madurez, que quizá algunas han vivido demasiado temprano.
En "Vivo en una residencia de acogida, cumplo 18 años y ahora ¿qué?", cada una de ellas se sitúa en el día en el que cumplen la mayoría de edad, un momento que debería ser un motivo de celebración, pero que, sin embargo, no lo es. Como dice una de ellas: “La mayoría de edad… me hace gracia esa palabra. Llevo siendo mayor a mi edad toda la vida”. En esta fiesta, a través de la franqueza y la ironía, el público asistirá a los conflictos por los que pasan dichos niños, niñas y jóvenes, en un momento crucial de sus vidas, y los sueños que persiguen con el fin de conseguir labrarse un futuro prometedor y seguro.
Rosario Ruiz Rodgers con la ayuda de Sara Velasco construyen La Abadía cruza la calle
Bajo la batuta de Sara Velasco, docente del proyecto La Abadía cruza la calle han llevado a cabo los ensayos necesarios para dar a conocer la obra en su totalidad en una jornada que pretende acercar al público el proyecto. “Nosotras mediamos entre la comunicación de su realidad y algo imaginativo que les hace explorar esa inocencia y seguir disfrutando de ser niños”, afirma Sara.
Para Rosario, La Abadía cruza la calle bebe del teatro como arte porque “permite a los chicos y chicas entrar en otras realidades. Además, el arte hace que uno entre en una ficción o en una realidad, para darse cuenta, muchas veces, de que la realidad es peor o mejor que la ficción. Entonces, cuando se adentra en esos terrenos, hace que se equilibre mucho su realidad con esos mundos imaginados” concluye.
Sobre La Abadía cruza la calle
En su búsqueda por sensibilizar sobre las problemáticas y la demanda de la sociedad, y en particular acerca de las necesidades de los más jóvenes, el Teatro de La Abadía presenta por quinto año el taller La Abadía cruza la calle. Un proyecto para aprender, disfrutar y acercarse al teatro, que abre la posibilidad de desarrollar nuevos imaginarios, de acrecentar la autonomía, la tolerancia y las responsabilidades personales. Con él se busca llegar a aquellas personas e instituciones que económicamente puedan realizar cambios para su visibilidad y mejora de condiciones, así como ampliar la divulgación entre la sociedad para que las familias acojan a estos menores.
La Abadía cruza la calle es posible gracias a la colaboración de los espectadores mediante la compra de entradas o de donaciones y busca tener una experiencia compartida valiosa, que ponga en valor el cuidado de su entorno y el de los demás.
FUENTE DPTO. DE COMUNICACIÓN DE TEATRO DE LA ABADÍA
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