La liberación (The deliverance) es una película de terror con un fuerte componente de melodrama dirigido por Lee Daniels (Precious, El mayordomo). En el reparto destacan Andra Day (Los Estados Unidos contra Billie Holyday, Marshall), Glenn Close (Las amistades peligrosas, Atracción fatal) o Mo'Nique (Precious, Domino). Está inspirada en el caso de Latoya Ammons, que tuvo cierto renombre en 2012 en EE.UU. Se estrena mundialmente en Netflix el 30 de agosto de 2024.



La liberación (The Deliverance) película

Crítica de 'La liberación'

Ficha Técnica

Título: La Liberación
Título original: The Deliverance

Reparto
Andra Day (Ebony)
Glenn Close (Alberta)
Anthony B. Jenkins (Andre)
Caleb MacLaughlin (Nate)
Demi Singleton (Shante)
Mo'Nique (Cynthia Henry)
Omar Epps (Melvin)
Miss Lawrence (Asia)

Año: 2024
Duración: 112 minutos
País: Estados Unidos
Dirección: Lee Daniels
Guion: Elijah Bynum, David Cogeshall, Lee Daniels
Fotografía: Eli Arenson
Música: Lucas Vidal
Género: Terror, Drama
Distribuidor: Netflix

Filmaffinity

IMDB

Tráiler de 'La liberación'

Sinopsis

Tras mudarse a una misteriosa casa, una madre en apuros deberá enfrentarse a sus demonios para salvar el alma de sus hijos. Andra Day, Glenn Close, Aunjanue Ellis-Taylor y Mo’Nique protagonizan esta nueva película de Lee Daniels, inspirada en una historia real sobre una posesión. (Netflix)

Dónde se puede ver la película en streaming



Primeros síntomas

La liberación (The Deliverance) es algo así como una película dual, mixta, dividida. En su naturaleza participa de dos mundos distintos que pueden convivir, pero que en este caso colisionan. Durante gran parte de su metraje, La liberación es un drama de tintes sociales, donde la acumulación de infortunios la colocan casi al borde del misery porn. Ahí se ve el pedigrí de Lee Daniels, director de Precious (2009).

Para situarnos un poco. Ebony Jackson (Andra Day), su madre (Glenn Close), y sus tres hijos llegan a una nueva casa en Indiana. Poco tardamos en darnos cuenta de que la situación de la familia no es un lecho de rosas. Así por lo pronto, Ebony tiene un problema irresoluto con el alcohol, no pasa por un buen momento económico y su carácter se va agriando hasta pagarlo con su familia. Sus antecedentes como ex convicta no ayuda a mostrarnos una imagen mejor de ella.  Todo ello es implacablemente escrutado por la trabajadora social Cynthia (Mo'Nique), quien manifiesta una evidente falta de confianza en Ebony como madre.

Ebony, quien nos llega a caer antipática, desprende, no obstante, un aura de cierta soledad. Su marido, eso dicen a la trabajadora social, está en Irak, trasluciéndose por el contexto que la pareja está separada. Pero pronto un problema de naturaleza muy distinto comienza a infiltrarse en la casa de Ebony. Sus hijos, sobre todo el pequeño Andre (Anthony B. Jenkins), comienzan a comportarse de forma extraña, e incluso violenta. Lo sobrenatural aparece en la película para ir yendo a más por momentos.

La liberación (2024) película
Copyright Netflix

Dos géneros no armonizados

La liberación (The Deliverance) es abrupta a la hora de intentar engarzar los dos principales géneros en los que se mueve. A saber: el drama tremendista con cierta raigambre social, y el terror de posesiones y casas malditas. Estos ingredientes se superponen pero no se mezclan sin contradecirse antes, como dos facetas demasiado irreconocibles entre sí. El problema se intensifica cuando, más allá de su acople, La liberación tampoco es demasiado destacable ni conmoviendo con el drama y ni amedrentando con terror. Cabe decir que Lee Daniels se mueve con más soltura en el primero de los elementos, pero sin alcanzar grandes cotas.

Cada revelación de los primeros treinta minutos es una vuelta de tuerca en fatalidades. Glen Close, en un papel que recuerda un poco al que hizo en Hillbilly, una elegía rural (2020), podría ser un elemento de contrapunto, pero pronto vemos que padece de un cáncer del que se está tratando con quimio. Este período dramático llega a rimar demasiado con un telefilm vespertino, donde la fatalidad viene por mera acumulación, sin demasiada estructura o alcance. De todos modos se puede intuir la querencia de Daniels por el comentario social y los apuntes de familias desestructuradas, pero todo queda subsumido por una realización vulgar.

La parte terrorífica tiene todos los recursos habituales tanto de las casas encantadas (puertas y objetos que se mueven solos, presencia excesiva de insectos, un sótano que da miedo solo de mirarlo, y algún que otro jumpscare). También del de posesiones (aprendizaje de lenguas extrañas, ojos en blanco, dislocaciones articulares, exorcismos..-) En este sentido podemos ver la sombra de Terror en Amytiville (1979) o El exorcista (1973)

The Deliverance (2024) filme
Copyright Netflix

Una conjunto poco convincente

De La liberación podría decirse de forma algo tramposa que no abusa del efectismo y que se centra más en la parte terrenal y menos en la parte sobrenatural. No es del todo cierto. Todos los recursos y manierismos de un terror de estas características están presentes, solo que lucen menos debido a una factura endeble, a veces casi de telefilm (otra vez la dichosa palabra). Además temáticamente la película acaba asentada en un concepto principal que orbita alrededor de la fe y la religión. Podemos advertirlo en el personaje de Glenn Close, profundamente devota y la primera que piensa en una causa diabólica para los extraños fenómenos que ocurren en su casa.

En el último tercio irrumpe con fuerza el personaje la reverenda Bernice James (Aunjanue Ellis-Taylor), una evangelista que parece saber demasiado sobre lo que está pasando en casa de Ebony. De hecho, podemos afirmar que La liberación es una película eminentemente cristiana, y una clara apología de fe. Nada de esto es reprobable en sí mismo. La óptica de El Exorcista, p.ej, y la obra posterior de William Petter Blatty tiene una perspectiva eminentemente creyente. Por no mencionar el universo de los Warren, aunque de una forma más pulp, por así decirlo.

La cosa está en que la forma de expresar las inquietudes espirituales es un poco de brocha gorda, a pocos palmos de la retórica de un telepredicador. La cuestión mollar es que el acabado en la faceta de terror es demasiado tópico como para mostrar algo convincente. No beneficia la ramplonería estética que suele presidir, y ésta no es ninguna excepción, las producciones de Netflix. Por sacar algo positivo, la historia tiene cierta fuerza que hace que se pueda ver sin demasiados problemas la película, pero con un  resultado total poco satisfactorio.

La liberación (2024) película
Copyright Netflix

Las actuaciones en La liberación

La liberación (The Deliverance) tiene su punto fuerte en las actuaciones. No son un compendio de virtudes, pero es el elemento que más destaca. Andra Day defiende bien un personaje deliberadamente antipático, al que en el fondo comprendemos, ofreciendo un desempeño con capacidad de convicción. Glenn Close ahonda en el persistente mal carácter de algunos de sus personajes y acaba dibujando uno que se mueve entre la parodia (no sé si voluntaria) y la lucidez, pero que el talento de Close colocar en algún lugar de cierta dignidad. Su personaje tiene de atípico el ser la única blanca de la familia, pues Ebony es mestiza, pero no resulta tan trascendente este detalle en la historia. No son personajes particularmente bien escritos, pero sí esforzadamente actuados.

Entre los demás personajes, Mo'nique hace un buen trabajo y el pequeño Anthony B. Jenkins acaba siendo casi lo que más asusta de la película, con una miradilla de lo más amenazante.  Aunjaune Ellis-Taylor hace lo que puede con un papel importante pero con poco contexto. Lo demás no destaca mucho, a pesar de tener a un nombre como Caleb Maclaughlin, conocido por Stranger Things, que pasa bastante desapercibido.

The Deliverance (2024) filme
Copyright Netflix

Conclusiones de 'La liberación'

La liberación (The Deliverance) no resulta satisfactoria ni en el conjunto, ni en cualquiera de sus partes. Su acusada dualidad entre el melodrama y el terror se resuelve a golpes de volantazos estilísticos que empeoran una película, que a la hora de conmover o a la de asustar falla o se queda lejos. Las hechuras de telefilm lastran todo demasiado. Acorde con la película, hace falta un enorme acto de fe para disfrutar de ella.

Únete a nuestro CANAL DE TELEGRAM

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí