L'immensità es la última película del cineasta italiano Emanuele Crialese. Está protagonizada por Penélope Cruz y Luana Giuliani y narra parte de la vida del propio director en la Roma de los años 70. Estreno el 28 de octubre de 2022 en salas de cine españolas.
Crítica de 'L'immensità'
Resumen
Ficha Técnica
Título: L'immensità
Título original: L'immensità
Reparto:
Penélope Cruz (Clara)
Vincenzo Amato (Felice)
Filippo Pucillo (Andrea)
Aurora Quattrocchi (Madre de Clara)
Giuseppe Pattavina
Elena Arvigo (Patrizia)
Laura Nardi (Serena)
Alvia Reale (Adriana)
Carlo Gallo (Alberto)
Luana Giuliani (Adriana)
Rita De Donato (Marina)
Patrizio Francioni
Año: 2022
Duración: 98 min.
País: Italia
Director: Emanuele Crialese
Guion: Emanuele Crialese, Francesca Manieri, Vittorio Moroni
Fotografía: Gergely Pohárnok
Música: Rauelsson
Género: Drama
Distribuidor: DeaPlaneta
Tráiler de L'immensità
Sinopsis
Roma, años 70: un mundo a mitad de camino entre barrios en construcción y programas de televisión aún en blanco y negro, logros sociales y modelos de familia que han quedado obsoletos.
Clara y Felice acaban de mudarse a un piso nuevo. Su matrimonio está acabado: ya no se aman, pero son incapaces de separarse. Lo único que los mantiene unidos son sus hijos, en los que Clara vuelca su deseo de libertad.
Adriana, la mayor, acaba de cumplir 12 años y presencia muy de cerca los estados de ánimo de Clara y las tensiones cada vez mayores entre sus padres. Adriana rechaza su nombre y su identidad, quiere convencer a todo el mundo de que es un chico, y su obstinación hace que el ya frágil equilibrio familiar alcance un punto de ruptura.
Mientras los niños esperan una señal que los guíe, ya sea una voz desde arriba o una canción en la televisión, todo cambia a su alrededor y en su interior. (DeaPlaneta)
Dónde se puede ver la película en streaming
Cuerpos en tránsito
Roma, década de los 70. Raffela Carrá es la estrella de la televisión italiana y Adriana espera un milagro que le devuelva el cuerpo que sus padres hicieron mal e invoca a Dios o a quien sea que esté ahí arriba para que algo cambie. Mientras tanto, se presenta ante el mundo como Andrea, un niño de 12 años que vive el deterioro de la relación de sus padres. Defiende a su madre, que es el centro de su mundo, de los abusos de un patriarca ausente e infiel, al igual que su madre frena cualquier violencia de su padre contra ella. La relación de ambas ilumina la pantalla. Se salvan la una a la otra del encierro y la falta de libertad ejercido por el hombre de la casa.
Dice Emanuele Crialese que si algo somos es “cuerpos en tránsito”, que nuestra identidad cambia a lo largo de la vida, incluso aunque no cambiemos de cuerpo. No es lo que ocurre en L'immensità, puesto que los personajes apenas sufren cambios, sin embargo, estamos ante una narración que nos lleva a lugares recónditos de nuestra infancia y eleva la imaginación.
Además, cuenta con interpretaciones sublimes, a destacar las de Penélope Cruz y Luana Giuliani. Penélope, inmensa, interpreta a una mujer que se aburre en un matrimonio sin amor que ya no le aporta nada y cuyo derrumbe se está llevando su alma con ella. Una mamma italiana, aunque de origen español, a quien le encanta cantar, bailar y jugar con sus hijos. Y Penélope canta y baila, pero además sostiene la trama con verdadera maestría junto a Luana, que se revela como un descubrimiento. Ambas son el centro de esta inmensidad y las dos razones por las que hay que ir a ver la película.
La música, un bálsamo
L'immensità aborda temas de calado como la disforia de género, la violencia machista o la diferencia de clases, pero sin entrar en profundidades que podrían alejar al melodrama de una auto ficción nostálgica. Se centra en las relaciones que mantiene Adri con su madre, con su padre (prácticamente nula), con sus hermanos, con su nueva amiga Sara y consigo mismo y en las vivencias de la gran familia italiana. La música es otra de las protagonistas, sirviendo de bálsamo de la vida cotidiana y acompañando a las fantasías del joven Adri. Con una puesta en escena elegante, L'immensità es el largometraje más personal del cineasta italiano al que algunos han criticado por quedarse en el esteticismo y no trascender.
Y, sin duda, es una película de cuidada estética, pero creo que es injusto decir que los dramas que muestra no trascienden o que no emociona. Se trata también, solo sea tímidamente, el tema de la salud mental y cómo ésta se sostiene sobre las condiciones ambientales y el trato que nos dan aquellos con los que cohabitamos. El miedo y la vergüenza al qué dirán, la decepción del amor romántico y el amor incondicional entre una madre y sus hijos. Esa no educación del padre sobre los hijos que es también una forma de educar y de hacer ver a éstos quién tiene el peso y la responsabilidad de todo lo que les ocurra.
Quizás el objetivo de Emanuele Crialese no sea trascender ni provocar, sino contar su historia de una forma particular y armar un espectáculo casi musical en homenaje a las mujeres, también a la mujer que fue y que aún vive en él.
Conclusión de 'L'immensità'
En L'immensità no solo vemos brillar de nuevo a Penélope Cruz y descubrimos a Luana Giuliani como una actriz cautivadora, también nos devuelve a ese mundo de la niñez que ya fue y no volverá. Nos hace recordar los juegos olvidados de la infancia como si de la magdalena de Proust se tratase, pero también es una película que conmueve y pone sobre la mesa temas como la identidad, el amor o la violencia machista.
Reportaje de L'immensità en Días de Cine TVE
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