"Nise. La tragedia de Inés de Castro": Una reflexión sobre la justicia en el Teatro de la Abadía

Nao d’amores se presenta en La Abadía por octava vez, con Nise, la tragedia de Inés de Castro, una tragedia renacentista que pone en tela de juicio el ejercicio del poder y nos ofrece la oportuna posibilidad de indagar en las conexiones políticas con nuestra contemporaneidad.

A partir de Nise lastimosa y Nise laureada, de Jerónimo Bermúdez, la directora Ana Zamora construye una dramaturgia unitaria que nos permite profundizar en esta visión del mal gobierno, a través de una de las historias más conocidas de la tradición hispanolusa, la leyenda de Inés de Castro, amante del infante don Pedro de Portugal, asesinada en aras de la política del bien común y coronada, después de muerta, como reina del país lusitano.

El amor y la muerte de la bella Inés sirven de ejemplo puntual para cuestionar las intrigas palaciegas y las actitudes poco respetables de gobernantes arrastrados por la vida cortesana. (TEATRO DE LA ABADÍA). 

El fin justifica los medios

La extraordinaria producción teatral de nuestro siglo XVII eclipsa otros periodos y autores que quedan fuera de los libros de texto y de los repertorios habituales. La compañía Nao d`amores lleva a cabo desde hace dos décadas una valiosísima labor de recuperación y reivindicación de estas obras ocultas para el gran público. En este caso se trata de dos piezas del dramaturgo renacentista Jerónimo Bermúdez, tituladas Nise lastimosa y Nise Laureada. Ambas se ensamblan en un único texto en Nise, la tragedia de Inés de Castro.

La obra, que transita entre el mito y la historia, recoge la leyenda de los amores del futuro rey de Portugal Pedro I e Inés de Castro. La dama, de menor rango nobiliario de lo esperable para una futura reina, se ha convertido en un problema de estado. Los consejeros insisten en la necesidad de acabar con su vida por el bien del pueblo y de la corona. La primera parte nos habla así de la justicia, de la responsabilidad y de la naturaleza del poder. En la segunda parte, acompañamos al recién coronado Pedro I en su búsqueda de justicia, que culmina con la restitución póstuma del honor de su amante.

La pieza, que se asienta en la preceptiva clásica, le sirve a Jerónimo Bermúdez para reflexionar sobre la llamada razón de estado. El término fue acuñado por Maquiavelo en el siglo XVI. Cuando lo que está en juego es la salvación del estado queda suspendido todo valor de piedad o justicia. El rey, investido de unos poderes que emanan de Dios, está por encima de cualquier otro condicionante ético o moral. ¿Es justicia lo que imparte? ¿O es tiranía?

Una elegante puesta en escena

La exquisita puesta en escena convierte el escenario en el espacio para el rito. La tierra, el agua y la sangre están presentes, como elementos simbólicos cargados de polisemia. Es de destacar además el diseño de vestuario que conjuga en materiales nobles, como la lana y el metal, los blancos y los colores tierra.  Los personajes quedan convertidos así en piezas de un ajedrez viviente.

La música tiene un especial protagonismo en toda la obra. Interpretada en directo con instrumentos de la época, se vuelve sobrecogedora en la voz del contratenor José Hernández Pastor.

Natalia Huarte, como la desdichada Inés de Castro, logra sobrecogernos en todo momento. Así como José Luis Alcobendas, que nos ofrece un gobernante lleno de complejidad y matices.

Conclusión

Nao d´amores trae al Teatro de la Abadía de Madrid Nise, la tragedia de Inés de Castro, un drama renacentista sobre la justicia y la tiranía. Con una puesta en escena y unas interpretaciones exquisitas, la obra enfrenta al espectador a cuestiones de una enorme hondura ética y política. Nise, la tragedia de Inés de Castro es una oportunidad como pocas para acercarse a formas teatrales menos conocidas de nuestro patrimonio, pero sumamente sugerentes, con una historia sorprendente y conmovedora a la altura de los grandes clásicos.

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