Cecilia Gessa continúa su andadura con el cortometraje Princesa, una producción que aborda la violencia machista. "Hace un año, cuando escribí Princesa el número de mujeres asesinadas era de 1109, hoy ya son 1134. Princesa expone la violencia psicológica, el chantaje y la manipulación emocional a la que es sometida la víctima", expone Gessa, en torno a las realidades que denuncia en su proyecto.
'Princesa', un cortometraje comprometido
La directora y productora Cecilia Gessa, se embarca en un nuevo cortometraje, Princesa, donde el horror de la violencia machista se mastica a través de la verdad de sus intérpretes, Nerea Barros y Harlys Becerra.
"Qué sueño hecho realidad sería tener una sociedad creada desde la igualdad de condiciones en todos los ámbitos. La agresión, el abuso de la fuerza es, en muchos casos, consecuencia de la imposibilidad de trasmitir tus miedos e inseguridades de otra forma. No existe la opción del diálogo o de el perdón, existe el “Ni contigo, ni sin ti”, “Eres mía”, “Si no eres mía, te mato”. Es importante visibilizarlo de todas las maneras posibles, en este caso con el cortometraje Princesa para ayudar y animar a todas las mujeres que se encuentren en situaciones de maltrato dentro del ámbito personal, para que tomen medidas antes que sea demasiado tarde y puedan seguir adelante con su vidas", expone Cecilia Gessa, directora y productora del cortometraje.
Sinopsis
El cortometraje Princesa narra las vidas de Juan y Dalila, los cuales mantienen una idílica relación de amor de puertas para fuera. Sin embargo, la realidad es mucho más cruda. Dalila es una mujer independiente, con su propio negocio, que ha sido engañada, manipulada y estafada por Nicolás.
Su maltratador no es agresivo, todo lo contrario... Nicolás es detallista, encantador y amable, siempre y cuando salga todo como tiene previsto. Por tanto, si las reglas del juego cambian, es cuando, además de la manipulación, utiliza el chantaje emocional.
Estando Dalila aislada de su entorno más cercano y siendo más vulnerable, es cuando empieza a sufrir los malos tratos por parte de Juan, y con ellos, a ser consciente de la situación real en la que está metida.
Cuando el factor miedo entra en acción, Nicolás abusador y estafador se quita la máscara. Su víctima tendrá que hacer lo que el mande y si esto no es así, si le llevan la contraria... es cuando la manipulación emocional se convierte en maltrato físico.
FUENTE TRANSVERSAL COMUNICACIÓN
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