En la temporada 4 de The Bear de FX, Carmen "Carmy" Berzatto (Jeremy Allen White), Sydney Adamu (Ayo Edebiri) y Richard "Richie" Jerimovich (Ebon Moss-Bachrach) siguen adelante, decididos no solo a sobrevivir, sino también a llevar a The Bear al siguiente nivel. Con nuevos desafíos esperándoles, el equipo debe adaptarse, amoldarse y superar las dificultades. Esta temporada, la búsqueda de la excelencia no se limita únicamente a mejorar, sino también a decidir a qué vale la pena aferrarse. La temporada 4 de The Bear llegó en exclusiva a Disney+ el 26 de junio de 2025 con sus 10 episodios disponibles.
Crítica de The Bear (temporada 4)
Resumen
Ficha Técnica
Título: The Bear
Título original: The Bear
Reparto:
Jeremy Allen White (Carmen 'Carmy' Berzatto)
Ebon Moss-Bachrach (Richard 'Richie' Jerimovich)
Ayo Edebiri (Sydney Adamu)
Lionel Boyce (Marcus)
Liza Colón-Zayas (Tina Marrero)
Abby Elliott (Natalie 'Sugar' Berzatto)
Matty Matheson (Neil Fak)
Edwin Lee Gibson (Ebraheim)
Corey Hendrix (Gary 'Sweeps' Woods)
Richard Esteras (Manny)
Año: 2022
Duración: 30 min.
País: Estados Unidos
Director: Christopher Storer (Creador), Christopher Storer, Joanna Calo, Ramy Youssef, Ayo Edebiri, Duccio Fabbri
Guion: Christopher Storer, Alex O'Keefe, Karen Joseph Adcock, Sofya Levitsky-Weitz, Joanna Calo, Rene Gube, Catherine Schetina, Alex Russell, Kelly Galuska, Stacy Osei-Kuffour
Fotografía: Andrew Wehde, Adam Newport-Berra, Chloe Weaver
Música: Jeffery Qaiyum 'JAQ', Johnny Iguana
Género: Comedia dramática
Distribuidor: Disney+
Tráiler de 'The Bear (Temporada 4)'
Sinopsis
Carmy le dice a Richie que se retira, en parte, para aprender quién es fuera de la cocina. Sydney finalmente acepta tomar el control si Richie también recibe una participación, lo cual acepta. Natalie llega y abraza a Carmy entre lágrimas al enterarse de la noticia, mientras que el reloj de Cicero finalmente llega a cero.
Dónde se puede ver la serie en streaming
Esperas y elecciones
The Bear (Temporada 4) está atravesada por una gran incertidumbre, ¿Qué dirá la crítica del Chicago Tribune?. Ese silencio prolongado se convierte en una presencia fantasma que condiciona cada decisión, cada reacción y cada servicio en el restaurante. The Bear sigue teniendo esa capacidad para transformar lo cotidiano, una reunión de equipo, un plato mal montado, una llamada telefónica, en momentos de altísima tensión emocional.
Al mismo tiempo, la trama de Sydney gana protagonismo, su posible marcha plantea no solo una tensión dramática con Carmy, sino también un dilema ético y profesional muy humano, ¿Lealtad o ambición? ¿Estabilidad o riesgo?. Su arco aporta profundidad emocional a la The Bear (Temporada 4), en su mejor versión, habla del miedo al cambio y del coste de perseguir la excelencia.
Ritmo y pausa en equilibrio
Christopher Storer, que vuelve a encargarse de varios episodios, ha depurado el estilo frenético de las primeras temporadas sin perder su esencia. La dirección sigue recurriendo a planos cerrados, montaje acelerado y una edición de sonido caótica que simula el estrés de una cocina profesional, pero sabe cuándo frenar, dejar respirar a los personajes y apostar por el silencio.
Los mejores episodios de The Bear (Temporada 4) combinan lo visualmente asfixiante con momentos de belleza casi contemplativa, una conversación nocturna en la cocina vacía, una decisión tomada en soledad, un gesto apenas visible.
Carmy y Sydney, almas en colisión
Jeremy Allen White sigue construyendo un Carmy tan brillante como inestable, obsesionado con el control pero emocionalmente fracturado. La tensión interna del personaje se intensifica aquí, sobre todo porque los errores del pasado siguen persiguiéndolo. Ayo Edebiri, como Sydney, brilla con una interpretación sobria pero cargada de matices. Su conflicto está en los gestos, en las miradas, en los silencios incómodos.
El resto del elenco aporta humanidad, humor y pequeñas historias que enriquecen el mundo del restaurante sin saturar la narrativa.
Una sinfonía visual y sonora
La fotografía, cada vez más estilizada, combina la estética sucia de las cocinas con toques de refinamiento en los platos, en los uniformes o en los colores del restaurante. El diseño sonoro vuelve a ser clave, gritos, platos, pitidos, respiraciones aceleradas, todo forma parte del pulso emocional. La banda sonora, como siempre, tiene elecciones arriesgadas pero acertadas, que no solo ambientan sino que interpretan los estados de ánimo del equipo.
Conclusión de 'The Bear (Temporada 4)'
The Bear (Temporada 4) no reinventa la serie, pero sí la afina, con menos caos gratuito y más introspección dramática, avanza en las líneas narrativas sin olvidar su estilo inconfundible. Algunas subtramas se sienten menos inspiradas o quedan un poco colgando, pero el conflicto central ofrece suficiente tensión emocional y ética para mantener el interés.
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