Una Navidad sin nieve es un cuento de navidad en el que nos encontramos con todos los ingredientes propios de este tipo de historias. Está la adolescente imaginativa, sensible y alegre que está encantada con la llegada de la Navidad. Pero también está el típico “Grinch” que no la soporta y que incluso la ha prohibido en su casa. Así son Lucy y su abuelo Alex. Y tenemos una especie de bosque y de árbol de los deseos, fantasmas que se aparecen y un amor que nace con fuerza. Estreno en salas de cine españolas el 1 de enero de 2025.
Resumen
Ficha técnica
Título: Una Navidad sin nieve
Título original: Paradise Falls: A Christmas Story
Reparto:
Victoria Ulmos (Lucy)
Linwood Yarborough (Alex)
Michelle de Matheu (Esperanza)
Jaime Murphy (Joey)
Maureen Shillington (Rosa)
Byron Ortega (Marco)
John Plas (Ebenezer)
Año: 2024
Duración: 90 min
País: Costa Rica
Director: Manu Canales
Guion: Fernando Lujan Mote
Fotografía: Zeke García
Música: Lulu Caramel, Josue Salazar
Género: Drama. Navidad
Distribuidor: Moon Entertainment
Sinopsis
Una joven mujer vuelve a casa por Navidad, dividida entre honrar las tradiciones navideñas de su madre fallecida y la aversión de su abuelo a las celebraciones. (Moon Entertainment)
Dónde se puede ver la película en streaming
Paradise falls, un paraíso al fin y al cabo
Paradise Falls es el idílico lugar donde la joven Lucy lucha por revivir el espíritu navideño de su abuelo, que en algún lado debe de estar. La adolescente no se encuentra sola. En esta historia navideña por excelencia cuenta con personas como Espe que también creen en la Navidad y sueñan con un festival para la época de la “solidaridad” y “el amor”.
El joven Marco, que mantiene una actitud crítica con la Navidad, se hace amigo de Lucy y empieza a plantearse que quizá no es algo tan malo y tan comercial. Lo que falta, desde luego, es la nieve, ya que nos encontramos en una especie de gran finca verdosa, con animales, conocida como Paradise Falls y propiedad del abuelo de Lucy.
El cine costarricense es un cine, en principio modesto, pero cuya producción se ha disparado en este siglo XXI. En Una Navidad sin nieve dirigida por Manu Canales intervienen actores como Linwood Yarborough (el abuelo) y Victoria Ulmos (Lucy), además del joven que interpreta a Marco (Byron Ortega) y su madre Esperanza, a la que da vida Michelle de Matheu. Es una producción con vocación internacional, podríamos pensar.
Lo que yo destacaría por encima de todo es la actitud vital de Lucy y Marco, los jóvenes, los “puros de corazón”, quienes son capaces de meditar y hablar con el árbol de los deseos. Y especialmente Lucy, que se erige como verdadera protagonista y no deja de empeñarse en instaurar la Navidad en ese lugar, donde su abuelo parece estar desencantado de todo.
Como en un cuento, aquí vamos más allá, más allá de la Navidad. Se trata de tener una visión optimista de la vida, alegre, de disfrute de cada pequeño momento. Por eso Lucy hace tantas fotos a todo lo existente en ese rancho, quiere captarlo y vivirlo todo, experimentar, disfrutar, vivir, en suma.
La magia de la Navidad está dentro de cada ser, o no lo está. Creo que Una Navidad sin nieve, afortunadamente, se te queda más en la memoria por el empeño, por el tesón, de superar los problemas, las dificultades y los recuerdos, que por inyectarte una “moralina” de cara a esta fiesta tan popular en todo el mundo.
La importancia de la ubicación y de lo celestial
Lucy viene de una ciudad donde probablemente nieve en diciembre, Nueva York, donde estudia, y llega a un lugar tropical, pero es igual. Ella tiene muy claro que necesita la Navidad, que le recuerda más a su madre y que la hace no sentirse tan sola. Y quiere vivirla esté dónde esté.
Esta ubicación le da un aire distinto a Una Navidad sin nieve, además de un planteamiento sencillo, en teoría. O amas la Navidad o no, con todo lo que ello conlleva. Hay también una creencia en la influencia de los seres queridos que se han ido en nuestras vidas, nos los podemos encontrar casi en cualquier sitio para que nos aconsejen y nos guíen. Eso no es solo propio de Costa Rica, es algo universal.
Encuentro cierto paralelismo con películas por antonomasia de la Navidad, con ángeles que se aparecen y te dan lecciones o que te ponen en situaciones casi límite para que te des cuenta de la importancia del “corazón limpio o puro” al afrontar la Navidad.
Una Navidad sin nieve nos narra un cuento de Navidad distinto, ante todo por la ubicación en el país centroamericano de Costa Rica. No es una película que te cambiará la concepción que tengas de estas fechas finales del año, pero que recordarás por la fuerza de voluntad de Lucy. Si tienes fe y luchas por conseguir algo, es más fácil que lo consigas. Y la ayuda puede provenir de cualquier parte o de cualquier ser humano (o no tan humano).
Soñar no cuesta nada. Y, ¡qué diablos!, sumergirte un poco en el espíritu de la blanca navidad, aunque sea sin nieve, y dejarte invadir por la esperanza y optimismo de los jóvenes protagonistas, es vivir un buen momento.
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