Federico García Lorca fue asesinado antes de poder terminar su última obra, Comedia sin título. Este 2021 regresa esta obra inacabada de mano de Marta Pazos y José Manuel Mora, bajo la mirada en la dirección de la propia Pazos. Desde el pasado 12 de noviembre se representa esta Comedia sin título en el Teatro María Guerrero, del Centro Dramático Nacional. Además, ha destacado por contar con un reparto formado por actores de menos de 30 años, donde hay nombres conocidos para el gran público como Camila Viyuela, Georgina Amorós o Koldo Olabarri. Se puede disfrutar de martes a domingo, a excepción del 24 de diciembre, a las 20 horas.
Título: Comedia sin título Título original: Comedia sin título
Reparto: Georgina Amorós
Marc Domingo
Alejandro Jato
Cristina Martínez
María Martínez
Clara Mingueza
Koldo Olabarri
Mabel Olea
Carlos Piera
María Pizarro
Chelís Quinzá
Luna Sánchez
Paula Santos
Camila Viyuela
Duración: 120 min. apróx. Dirección: Marta Pazos Versión y dramaturgia: José Manuel Mora y Marta Pazos Autor: Federico García Lorca
Escenografía: Max Glaenzel
Iluminación: Nuno Meira
Vestuario: Rosa Tharrats
Coreografía y dirección de movimiento: Guillermo Weickert
Música original: Hugo Torres
Colaboración artística: Montse Triola
Documentalista: Paloma Lugilde
Ayudante de Dirección: Laura Ortega
Ayudante de escenografía: Pablo Chaves Maza
Ayte. de Iluminación: Leyre Escalera
Ayudante de Vestuario: Mónica Teijeiro
Tráiler: Bárbara Sánchez Palomero
Fotografía: Laura Ortega y Luz Soria
Diseño de cartel: Equipo SOPA
Realizaciones: May Servicios para Espectáculos, Mambo Decorados, Peroni y ShowTex (Escenografía) y Sastrería Cornejo, Maribel RH, Lourdes Boán, Sol Curiel (Vestuario) y Gadget Efectos Especiales (Máscaras) Producción: Centro Dramático Nacional
Tráiler de 'Comedia sin título'
Sinopsis de 'Comedia sin título'
¿Por qué hemos de ir siempre al teatro para ver lo que pasa y no lo que nos pasa? (Autor. Acto I)
España, años 30. Federico García Lorca trabaja en una nueva pieza teatral. Al poeta le mueve la obsesión por el reflejo de la vida real sobre el teatro, que considera caduco y autocomplaciente. Las tablas han abandonado la crítica social y no aceptan la vanguardia. Lejos de Nueva York, el artista granadino desea abrazar la modernidad y la innovación. Anhela romper con los convencionalismos de la escena española del momento, dominada por la estética y valores burgueses. Con La Barraca, con sus textos, Lorca quiere devolver el teatro al público. Al pueblo.
Autor: ¡No me interrumpa!
Espectador 1º: Tengo derecho. ¡He pagado mi butaca!
(Acto I)
Comedia sin título es un drama social inconcluso, inacabado, del que Federico García Lorca tan solo dejó por escrito su primer acto: al poco tiempo de iniciar su tarea, el poeta fue asesinado.. (CENTRO DRAMÁTICO NACIONAL).
La queja de García Lorca
Marta Pazos y José Manuel Mora regresan a la última obra de Federico García Lorca, Comedia sin título, la cual únicamente llegó a escribirse el primer de los tres actos. Por tanto, es un riesgo representar un montaje que no llegó a culminarse y no se puede certificar cuáles hubieran sido las palabras del autor. Sin embargo, este espectáculo respeta absolutamente el texto original, apostando más por aquello que podría ser, o no, realizando un primer acto que es todo un homenaje hacia el dramaturgo. La forma en la que se escenifican las inquietudes del granadino dejan una sensación impactante, con firmeza y personalidad. La magnificencia de sus reflexiones sigue siendo un soplo de aire fresco, mantienen intacto la comprensión de un público que la siente suya. Con lo cual, ofrece una materialización de este título inconcluso de una forma excelente.
Una vez pasado el primer acto, se procede a omitirse el diálogo y la palabra, para no profanar la obra original y dejar ese acto al propio García Lorca. Gracias a ello, los asistentes saben que van a asistir una interpretación y analogías entre aquello que se especificó que podría ser la obra y el despliegue artístico con el que se enfrenta a esta ausencia. Por este motivo, no es una pieza para todos los públicos, ya que depende del nivel de compromiso y empatía que provoque en cada uno de los espectadores. Por ello, puede fascinar y horrorizar a partes iguales, lo que indica una estrategia artística fuera de lo común. Y ahí es donde está su mayor éxito, en esa explosión de la simbología, en dar a esos silencios la oportunidad de gritar. Una muestra de cómo la palabra no siempre es un imprescindible.
Las fierecillas domadas
Un elenco formado por actores jóvenes, de menos de 30 años, muestra que la edad no es un impedimento para la madurez artística. Por lo tanto, el nivel, de forma conjunta, goza de una calidad excelsa, viendo sobre las tablas auténtico talento. En primer lugar, Alejandro Jato realiza una labor exquisita, con un porte y una elegancia impresionantes. Además, se acompaña de una energía firme, carismática y con ese enigma que había en el arte de Lorca. También destaca su trabajo a lo largo de la obra, transformando su cuerpo al máximo. Después, Camila Viyuela es una artista excelente, una de las mejores actrices de su generación y demuestra en esta obra por qué. Es un placer absoluto ver toda esa catarsis artística impoluta. Igualmente, Georgina Amorós envuelve su actuación en una naturalidad descarnada y una potencia efectiva. Por lo que, sin duda, consolida su voz dentro del espectáculo teatral.
Koldo Olabarri aborda su trabajo desde una expresividad llevada al extremo, con una medición exacta para no caer en la exageración. Ese viaje hacia el dinamismo exacerbado, le permite explorar matices muy interesantes en el campo dramático. Luego, Carlos Piera pisa fuerte y seduce al espectador con una pasión que le deja exponer distintos prismas de su trabajo. Al final del espectáculo es uno de los intérpretes más memorables. Asimismo, María Pizarro se deja la piel en Comedia sin título. No tiene reparos en ninguna escena y plantea una explosión de sensibilidad y contundencia potentes. Para terminar, al ser un grupo numerosos, hay varios intérpretes que casan con el ritmo de la obra, mientras que otros no terminan por entrar en esta verosimilitud a nivel interpretativo. En consecuencia, brillan por su expresividad corporal, pero les falta mayor verdad.
La plasticidad del símbolo
¿Qué hace diferente a Comedia sin título de otras producciones? Una de las principales razones es apostar por una sinergia de lenguajes artísticos que no son habituales. Desde la performance basada en el movimiento, pasando por la metáfora de los cuerpos hasta la descripción realista de los acontecimientos. Este maremoto de estilos es lo que conlleva a un remolino dramático que habla por sí solo, llevando en cada ejecución implícito el significado de la reflexión sobre las palabras de Lorca. Por tanto, es una propuesta visual en la mayor parte de su esencia, con una construcción sobre el escenario de gran complejidad y movimiento. Por esta razón, hay un trabajo técnico y artístico medido al milímetro, valorándose que no se pierda ningún detalle al azar y todos mantengan la contundencia y estética en coherencia.
El primer movimiento se basa en una realización más en pos de la palabra, acompañándose de una gama de situaciones que dan ese toque de fábula macabra en varios momentos. De esta manera, se convierte en la bienvenida y homenaje a la obra inacabado del poeta y dramaturgo. Así, el espectador entra en ese universo de la crítica del teatro como objeto de entretenimiento y no como cristal de la verdad. Por consiguiente, prepara al público ante unas definiciones menos convencionales del desarrollo de lo que se va a ver sobre las tablas. Después, durante el segundo y tercer movimiento se sucede una desnudez totalmente expresiva, nada vulgar o gratuito, unido a una disposición de coreografías que brillan en su esplendor torrencial. Sin embargo, hay que aceptar que hay algunas imágenes que se repiten en exceso en el escenario, dificultando una fluidez más certera en dichas escenas.
Conclusión
Comedia sin título es un homenaje a la última obra de Federico García Lorca, respetando ese factor inconcluso que forma una parte intrínseca del texto original. Después, se sumerge en una ebullición artística y expresiva, que interpreta las palabras del autor en una sábana de performance impactante. Por tanto, puede ser la pasión de unos y el espanto de otros, una dicotomía pasional. Así también se presenta en su puesta en escena, que realiza una construcción llena de movimiento, de pura construcción en activo y una vertiente artística y estética del alto nivel. Por otra parte, el elenco actoral destaca por unos estupendos Alejandro Jato, Camila Viyuela, Carlos Piera, Georgina Amorós y María Pizarro. Luego, el trabajo global goza de una notable ejecución, con algún intérprete menos acertado dramáticamente. Las lágrimas artísticas transgresoras hacia García Lorca en una composición fuera de lo común que no deja indiferente.
Una oportunidad para jóvenes actores y bailarines que ponen a prueba las múltiples facetas que su vida profesional les depara. Un repertorio de sobreactuación que se prolonga excesivamente en cada escena. Un 5
Tras adentrarnos en el inframundo, un devenir de imágenes de gran belleza icónica se muestran sobre el escenario, como la de Paula Santos sobre el piano, elegante luna negra, que envuelve la espectral imagen de un Lorca taciturno.
La descripción de esta obra no refleja lo que verdaderamente es. En mi opinión muy desagradable, soy el tipo de publico que le ha espantado esta cosa. Es muy fácil decir "no pero, esta obra te transmite emociones, es algo diferente y nuevo" no es así. Parece que con el paso del tiempo nos atrevemos a categorizar cualquier cosa como "Arte".Arte no es, es un conjunto de ideas mal llevadas y gro
Una oportunidad para jóvenes actores y bailarines que ponen a prueba las múltiples facetas que su vida profesional les depara. Un repertorio de sobreactuación que se prolonga excesivamente en cada escena. Un 5
Tras adentrarnos en el inframundo, un devenir de imágenes de gran belleza icónica se muestran sobre el escenario, como la de Paula Santos sobre el piano, elegante luna negra, que envuelve la espectral imagen de un Lorca taciturno.
La descripción de esta obra no refleja lo que verdaderamente es. En mi opinión muy desagradable, soy el tipo de publico que le ha espantado esta cosa. Es muy fácil decir "no pero, esta obra te transmite emociones, es algo diferente y nuevo" no es así. Parece que con el paso del tiempo nos atrevemos a categorizar cualquier cosa como "Arte".Arte no es, es un conjunto de ideas mal llevadas y gro