John (Patrick Mcnamee), un adolescente algo indeciso, hereda, entre otras cosas, la scooter de su padre. Este medio de transporte le permitirá viajar a Brighton, hogar espiritual de los Mod, donde van a morir las cenizas de su progenitor. Un viaje de búsqueda, encuentro y conexión dirigido y escrito por Chris Green. Destino a Brighton es un road movie de gran corazón que rinde homenaje a la cultura y moda Mod. Estreno en salas de cine españolas el 4 de febrero de 2022.



Destino a Brighton

Crítica de 'Destino a Brighton'

Ficha Técnica

Título: Destino a Brighton
Título original: The Pebble and the Boy

Reparto:
Patsy Kensit (Sonia)
Ricci Harnett (Ronnie)
Jesse Birdsall (Ali)
Emma Stansfield (Dionne)
Sacha Parkinson (Nicki)
Christine Tremarco (Dawn)
Stuart Wolfenden (Geoff)
Charlotte Tyree (Mel)
Jamie Lomas (Deano)
Brian Croucher (Danny)
Max Boast (Logan)
Rick S. Carr (Zack)
Patrick McNamee (John)

Año: 2021
Duración: 101 min.
País: Reino Unido
Director: Chris Green
Guion: Chris Green
Fotografía: Max Williams
Música: Ian Livingstone
Género: Drama. Road Movie
Distribuidor: Adso Films

Filmaffinity

IMDB

Tráiler de 'Destino a Brighton'

Sinopsis

John Parker, un joven de 19 años de Manchester, se embarca en un viaje a Brighton, cuna espiritual de los Mods, en una antigua scooter Lambretta que le dejó su padre.

Dónde se puede ver la película



El protagonista de esta historia

Una corona de flores que forma la palabra “Mod” es la primera imagen con la que abre esta película junto a un ataúd dentro de un coche fúnebre en marcha y un séquito de scooters acompañándolo, una música melancólica y un hijo que despide con entereza a su difunto padre.

Un brindis por el fallecido aclara que este era un mod, pero además era un fanático de una banda de rock de los años 70 llamada The Jam algo que se demuestra cuando el hijo, John, entra en su dormitorio y contempla un pequeño santuario con merchandising de la banda.

John se queda dormido envuelto en una parka verde militar donde podemos ver una insignia que reza: “Brighton, Mod Mecca, 1964”.

Un ordenanza lleva hasta su puerta el vehículo con el que su padre tuvo el accidente: una scooter con una decena de espejos, algunos de ellos rotos.

Suena Saturday´s kids del grupo preferido de su padre, mientras el protagonista hojea un libro que habla de los mod. Se detiene en el recorte de una noticia: “Riot police fly to seaside” (la policía antidisturbios vuela a la playa). Esta noticia hace referencia a la revuelta entre mods y rockers que ocurrió en la playa de Brighton en 1964.

Esta pequeña introducción solo es para advertir de la importancia de los Mod en esta película. Tema principal que, ligado al fallecimiento de su padre, impulsa al protagonista hasta la ciudad de Brighton. Pero, ¿es John el verdadero protagonista de esta historia?

Una pregunta irrumpió en clase cuando estudiaba guion de cine: ¿Quién era el protagonista de Titanic? Aquella cuestión no debía tener una respuesta tan obvia, todos pensamos en Jack o Rose, (para los que no se acuerde Leonardo Di Carprio o Kate Winslet) los dos personajes de este largometraje, pero no, era el barco, el medio que conduce la historia hacia ese final catastrófico. Si elimináramos este elemento no podríamos contar la historia.

Con Destino a Brighton me hago la misma reflexión, si suprimiéramos la scooter que hereda John de su padre nunca llegaría a Brighton y, por ende, no habría nada qué contar.

Destino a Brighton
Copyright Adso Films

Revival Mod

Nos situamos en la playa de Brighton en 1964, mods y rockers inician una revuelta. Un disturbio que solo ocasiona heridos, nada grave, pero que la prensa de aquella época quiso magnificar convirtiéndolo en algo que generó inseguridades y miedos entre los vecinos del lugar.

Es relevante conocer esta noticia porque este viaje pretende revivir este movimiento Mod como algo conciliador.

Ya hemos dado pistas sobre quiénes eran los Mod. Tanto estos como los rocker, eran subculturas que convivieron en los 60 y se fueron reinventando a lo largo de los años.

El movimiento mod comenzó en la Italia de los años 50 y se fue consolidando en Londres en los 60 a través de una estética marcada que buscaba la diferencia: parkas de color verde militar, trajes con chaquetas de tres botones (algunos hechos a la medida) y su pasión por las motocicletas scooter. Marcas italianas como Lambretta o Vespa eran las más utilizadas para dar largos paseos por el centro de la ciudad, en contraste con el movimiento rocker, que lo hacía por carretera a gran velocidad, subidos en sus motos Café Racer, envueltos en chupas de cuero con tupés y patillas.

Pero no solo su estética caracterizaba a estas dos subculturas, sino también la música. Y para no desviarnos demasiado de la historia, mejor nos centramos en la música que aparece en esta road movie.

The Pebble and the Boy
Copyright Adso Films

Curiosidades del viaje

A esta aventura se suma Nicky (Sacha Parkinson), una joven alocada con espíritu aventurero que empuja a John cuando este flaquea en sus decisiones y quiere volver a Mánchester.

Pero, ¿por qué le acompaña Nicki? La respuesta está en las entradas para ver en concierto a Paul Weller en Brighton, miembro fundador de The Jam, entradas que encuentra en la parka del padre de John.

Ambos personajes ya tienen un motivo para llegar a la ciudad costera.

The Jam nació, como hemos dicho antes, a finales de los años 70, en una localidad que se llama Woking donde, casualmente, estos dos personajes hacen una parada, y allí se suma a este periplo un tercer personaje, Logan (Max Boast)

Pero no solo encontramos a The Jam en Destino a Brighton, la banda de rock Secret Affair abre el film acompañando a los títulos de crédito del principio con la canción My world. Estas dos bandas tienen en común el género Revival Mod (resurgimiento Mod).

Otro aspecto curioso es el cameo en Destino a Brighton del músico Gary Mani Mounfield, miembro del grupo The Stone Roses y Primal Scream, al principio de esta historia.

También encontramos una alusión a una película producida por los Who en el 79. John y Nicki tienen que pasar por un estrecho callejón para llegar al periódico local. Allí, Nicki, con ironía, le deja claro a John que no es el tipo de chica que le gusta tener sexo en un callejón. Esto, precisamente, es un guiño a la película Quadrophenia cuando en plena revuelta del 64, el protagonista de esta película, Jimmy, se lleva a la chica que desea a un estrecho callejón donde tiene sexo con ella (es curioso el contraste de esta secuencia y cómo la revuelta sube la lívido a esta pareja).

Destino a Brighton
Copyright Adso Films

Conclusión de 'Destino a Brighton'

Destino a Brighton o The Pebble and the boy promete un viaje inquietante lleno de sorpresas que no sorprenden, una trama que tropieza y se va cargando de situaciones forzadas en su trayecto, pero que en su intento mantiene el interés en los elementos que la componen. Un film para adolescentes y su búsqueda de identidad.

Y para los curiosos de la estética mod, hay una tienda en Londres que se llama Modfather, como solían llamar los seguidores a Paul Weller, que vende ropa respetando esta corriente.

Reportaje de Destino a Brighton en Días de Cine TVE

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