El documental Creadores de Criaturas: The Frankenstein Complex dirigido por Alexandre Poncet y Gilles Penso cuenta con declaraciones de nombres importantes dentro de la industria del cine como Guillermo del Toro, Joe Dante, Kevin Smith o John Landis. En The Frankenstein Complex se hace un recorrido por los monstruos más famosos de la historia del cine y la influencia que han ejercido estos sobre los espectadores. Estreno el 3 de Noviembre.
Crítica de The Frankenstein Complex
Resumen
Ficha Técnica
Título: Creadores de Criaturas: The Frankenstein Complex
Título original: Le Complexe de Frankenstein
Reparto:
Rick Baker
Joe Dante
Guillermo del Toro
Mick Garris
Alec Gillis
Steve Johnson
John Landis
Greg Nicotero
Kevin Smith
Phil Tippett
Chris Walas
Matt Winston
Tom Woodruff Jr.
Año: 2015
Duración: 102 min.
País: Francia
Director: Gilles Penso, Alexandre Poncet
Guion: Gilles Penso, Alexandre Poncet
Fotografía: Gilles Penso
Música:
Género: Documental
Distribuidor: Cine Binario
Tráiler de The Frankenstein Complex
Sinopsis
Gills Penso y Alexandre Poncet indagan en este documental las motivaciones de los artistas que han dedicado gran parte de sus vidas a los monstruos que, más allá de ser parte de la imaginación, una pintura o un libro, cobran vida a través del séptimo arte.
Creadores de Criaturas: The Frankenstein Complex
Todos hemos vivido el momento de cubrirnos los ojos como si ese pequeño acto pudiese protegernos de las bestias que vienen de la gran y pequeña pantalla, The Frankenstein Complex pretende destripar a todas estas criaturas desde su concepción hasta su ejecución con un resultado interesante aunque con algún “pero” que puede presentarse dependiendo del tipo de espectador que seamos.
El documental hace un repaso de monstruos y bestias con una estructura interesante: viajando de entrevista en entrevista revisitando clips, material de archivo y maquetas legendarias; huye de ser una simple clase de historia que pocos aguantarían hasta el final y son los propios protagonistas quienes cuentan cómo comenzaron a crear estos monstruos a partir de maquillajes relativamente sencillos y su evolución hacia el CGI.
El paso por los clásicos corre a cargo de los propios entrevistados, lo cual es una manera bastante eficaz de recorrer varias épocas sin permitir que el ritmo decaiga. Las películas inmortales como El fantasma de la ópera o Frankenstein tienen su presencia mediante este curioso método de integración sobre el periodo contemporáneo en el que se ajusta su mayor parte.
Lamentablemente, hay que realizar alguna que otra aclaración: los protagonistas, por lo general, no son los nombres que vemos en grande en el cartel, por mucho cariño que le tengamos a Kevin Smith o a Guillermo del Toro, su presencia en The Frankenstein Complex es más testimonial que la de muchos de los verdaderos artesanos del medio (especialmente en el caso de Smith), eso sí: con una ausencia tan grande como dolorosa.
¿Es un documental recomendable? Absolutamente, pero hay que andarse con cuidado. No es perfecto, ni abre las puertas hacia un mundo que nos había sido vetado (y menos hoy en día con internet y la presencia del ‘making of’ en cada DVD o Blu-ray). Por lo tanto, si no vamos a encontrar información realmente valiosa o única y no es revolucionario en sus formas, ¿por qué es un documental recomendable? Por el amor y simpatía que desprende, sin duda.
En el caso de que no se conozcan muchas de las técnicas, como el uso de ‘animatronics’, maquillajes, trajes especiales, el comienzo del CGI, etc; resultará un material altamente curioso para el espectador. En el caso contrario, nos quedaremos por la pasión que segrega. Uno de los mejores instantes del documental es la absolutamente maravillosa e impagable entrevista doble a Joe Dante y John Landis, directores de Aullidos y Un hombre lobo americano en Londres respectivamente. Y no por la interacción que tienen entre los dos, sino por el simple hecho de ver a esta pareja de genios juntos, tan grandes y tan diferentes. Joe Dante, comedido y un poco distante, creador de esa genial Gremlins compartiendo habitación con un divertidísimo y todavía ágil John Landis. Pero no sólo ellos, los verdaderos artesanos del gremio: Rick Baker, Mick Garris, Steve Johnson y Greg Nicotero entre otros, profesan auténtico amor hacia el medio. La única pega, muy reseñable, es la ausencia inexplicable (sólo mencionado por uno de los entrevistados hacia el final del documental) del mítico Tom Savini, una auténtica lástima.
En cierto instante, el documental parece que se tambaleará como estos monstruos al final de sus cintas, aunque como muchos de estos antagonistas, se levanta una última vez para sorpresa de los espectadores. En este caso, para ofrecer algo más interesante que simples datos: El eterno debate sobre si aquellas maravillas artesanas del pasado tienen un mayor valor que el CGI. El presente documental no sólo da voz a los más conservadores, llegaremos a escuchar todo tipo de opiniones, elevando el valor del documental un par de peldaños más al no quedarse en una simple crítica al sistema que es utilizado en masa en la actualidad. No sólo se queda en la nostalgia, también presenta una mirada hacia adelante.
En cuanto al ritmo, consigue generar interés durante la mayor parte de sus minutos, los cortes a la hora de insertar clips de las películas mencionadas o material de archivo son lo suficientemente rápidos como para mantenernos enganchados la mayor parte del tiempo. Aunque una vez nos hemos acostumbrado a esta cadencia, no es raro echarle alguna que otra ojeada al reloj.
Conclusión
Como conclusión, The Frankenstein Complex es un documental muy recomendable para aquellos amantes del cine de monstruos que desde el inicial desconocimiento quieran ver mucho más allá que el simple (pero fascinante) resultado final. Para el resto, si no te interesa el tema, evidentemente no llegarás ni al minuto veinte. Si ya conoces el ‘making of’ de muchas de estas obras y no te importa ver a unas cuantas “viejas estrellas del rock” hablar de sus éxitos del pasado (y en algún caso, del presente), disfrutarás de unos momentos tan pasionales como simpáticos, aunque con el hándicap de que podría haberse realizado un documental algo más completo.
