Crítica de "El Silencio de la Sospecha" dirigida por Simon Moore

El Silencio de la Sospecha (1991) o como a mí me gusta llamarla "Injusta perpetua", es un magnífico thriller de nacionalidad británica, escrito y dirigido por el también británico Simon Moore.

Todo el peso actoral de la película cae sobre Liam Neeson, detective privado y ex-policía venido a menos. Laura San Giacomo, amante del asesinado pintor millonario y Kenneth Cranham en el rol del policía a cargo de la investigación, ex-compañero y amigo del personaje interpretado por Liam Neeson.

Film que inexplicablemente pasó sin pena ni gloria por las taquillas cinematográficas, a pesar de ser un thriller bastante interesante, con un excelente guion y un final muy sorprendente, digno del resto de la película.

Crítica de El Silencio de la Sospecha

Ficha Técnica

Título: El Silencio de la Sospecha
Título original: Under Suspicion

Reparto:
Liam Neeson (Tony Aaron)
Laura San Giacomo (Angeline)
Kenneth Cranham (Frank)
Maggie O'Neill (Hazel Aaron)
Alan Talbot (Powers)
Malcolm Storry (Waterston)

Año: 1991
Duración: 100 min.
País: Reino Unido
Director: Simon Moore
Guion: Simon Moore
Fotografía: Vernon Layton
Música: Christopher Gunning
Género: Intriga. Thriller
Distribuidor: Filmax

Sinopsis

Corre el año 1959 en la ciudad de Brighton, y un policía caído en deshonra y convertido ahora en detective privado, se dedica con la ayuda de su mujer a falsificar adulterios como evidencias en casos de divorcio. Pero en una de las espléndidas actuaciones, tanto su mujer (fingidora amante) como el millonario y prestigioso pintor Carlos Stasio son asesinados en una habitación de hotel. El policía y ex-compañero del ahora detective privado será designado a cargo de la investigación, en la que los principales sospechosos serán la amante del pintor asesinado que heredaría toda su fortuna y el propio detective cuyo puzzle de la historia no encaja de ninguna de las maneras.

Tráiler de El Silencio de la Sospecha

Donde comprar la película

El silencio de la sospecha [DVD]

• Liam Neeson Tony Aaron, Laura San Giacomo Angeline, Alan Talbot Powers (Actores)
• Simon Moore (Director)

6,00 EUR

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Premios

• Premio al mejor actor para Liam Neeson, concedido por el Festival de Cine Policial de Cognac. 1992

Abriendo el armario

Nos encontramos a finales de los años cincuenta, en Reino Unido aún existe la horca y los divorcios por adulterio están a la orden del día con un ligero condicionamiento.

Tony (Liam), el ex-policía de bragueta ligera, convertido ahora en detective privado de mala muerte y dedicado a amañar adulterios con su mujer, ve como su último trabajo se convierte en una pesadilla, ya que ambos tanto su mujer como el supuesto amante (un pintor millonario), han sido asesinados.

Angeline (Laura), la amante real del excéntrico pintor que firma con la huella de un dedo, se convierte en la principal sospechosa, ya que va a heredar toda la fortuna del artista.

Frank (Kenneth), será el policía asignado para la investigación del doble asesinato, viéndose en la tesitura de que su amigo ex-policía, ahora detective, se convierte en uno de los principales sospechosos.

Con un ritmo pausado pero sin prisas, la historia irá dando un giro tras otro en la búsqueda del presunto culpable, convirtiéndose en un thriller psicológico de alto voltaje que no lograremos descifrar hasta el último segundo de la cinta.

Pistas tangibles que parecen ser decisivas como el arma del asesinato o el dedo con el que el pintor firmaba sus cuadros (cortado en la habitación del hotel), van desequilibrando la balanza hacia uno u otro lado, así como el elenco de personajes secundarios, como la viuda arruinada del pintor o el abogado homosexual con tendencia a los chicos jóvenes.

Todo vale en este film policíaco para tenernos en ascuas y vayamos cambiando de opinión una y otra vez sobre el infame asesino, incluso una relación sexual extraña y ambigua entre Liam y Laura, aún sabiendo ambos que son los primeros candidatos a culpable.

Actores

Liam Neeson (Tony), el ex-policía metido a detective farsante que parece pensar solo con la bragueta. Como siempre, una excelente interpretación del actor del Norte de Irlanda, ahogado y acosado por la miseria por todas partes, intenta sacar cabeza aún a costa de falsos adulterios previamente programados por él mismo. En su línea de efectividad artística, como es habitual, el nominado al Óscar por "La Lista de Schindler" (1993) dos años después, nos introduce en una vorágine de dudas e incertidumbres que no despejaremos hasta el último suspiro de la película.

Sería idiota por mi parte añadir nada más a la filmografía de un gran actor como Liam, de hecho no creo tener espacio suficiente para nombrar sus películas y además siendo colega de nuestro amigo Jaume Collet-Serra, sobran las palabras, no por adulación sino por admiración.

Laura San Giacomo (Angeline), la amante del rico pintor, dotada de un componente entre frágil e inexpugnable, con todas las cartas marcadas para ser la presunta asesina.

Esta actriz estadounidense realiza una genial interpretación, quizás algo corta para mi gusto, pero rezuma interrogantes por todos los poros de su piel; esa indiferencia hacia la viuda del pintor, ese acto sexual con el detective cargado de simbolismo, ese desapego a un cuadro que vale millones e incluso ese final que para saberlo tendréis por fuerza que visionar la película.

Y a todo esto, decir que aún hoy en día la siguen conociendo como la compañera de piso de Julia Roberts en "Pretty Woman" (1990). Por favor, un poco de respeto. Ya venía de realizar la multipremiada "Sexo, mentiras y cintas de vídeo" (1989) y después ha hecho una carrera más que respetable en series de televisión. Actriz a reivindicar.

Kenneth Cranham (Frank), el policía asignado al caso, amigo y ex-compañero del detective. Lo siento querido Liam, pero literalmente se come la pantalla. Desde el comienzo del film donde tu bragueta desbocada te lleva hacia la perdición hasta el final de la película donde una horca se balancea ante tus ojos.

Magnífica la interpretación del británico como secundario de lujo, ya que está en la mayoría de los planos y además ayuda al espectador inconscientemente a no perder el hilo de la historia. Va encajando pieza con pieza con la pulcritud de un artesano, encuentra pistas en lugares imposibles, quizás alguna más de la cuenta y todo por demostrar la inocencia de un amigo al que quiere y aprecia y sobre todo que sabe es incapaz de cometer tal acto de barbarie, aunque todas las pruebas digan lo contrario.

No dispongo de referencias de este actor, pero me comprometo a encontrarlas.

Director

Simon Moore, sobre todo guionista británico de series para televisión, solo le conozco como director este espectacular thriller del que estamos hablando y un musical posterior llamado "Up on the roof" (1997), que me imagino, por mi desconocimiento que también pasaría sin pena ni gloria por las salas oscuras.

Sin embargo, resaltar que ha recibido numerosos premios por sus guiones para series televisivas.

No puedo decir nada negativo de él si es capaz de mantenerme pegado a la butaca desde el minuto cero hasta el último fotograma porque además de director es el guionista de la película (acierto doble).

Lo que no entiendo es como con esta carta de presentación no haya tenido más oportunidades en el mercado anglosajón, ya sabemos que sí como guionista, pero no como director, me asalta la duda y eso me preocupa.

Conclusión de El Silencio de la Sospecha

Muy buen thriller, película de intriga, cine policíaco o incluso Neo-noir, como he visto escrito en algún sitio.

Llámenla como quieran pero les aconsejo que vean esta cinta, que la disfruten, que la sufran e incluso que al final opinen como siempre; "yo ya sabía quien era el asesino", es lícito y hasta aconsejable. Para eso está el cine, mal llamado Séptimo arte, para degustarlo y que como el pollo se pueda comer con los dedos.

Enhorabuena y bienvenidos al espectáculo.

Nota: Agradeceré e intentaré contestar cualquier comentario en relación con el film mencionado.