El pasado 21 de noviembre llegó al Teatro Maravillas El TransforMimo, espectáculo de Martin Kent, uno de los transformistas más rápidos del mundo. Un total de 25 personajes salen a escena en solo 75 minutos, lo que le permite exponer distintos referentes culturales muy conocidos para el gran público. Así, se realiza un torbellino vertiginoso por el mundo del cine, de la música y piezas más clásicas como las viejas ferias. El pasado 26 de diciembre de 2021 fue la última función en el espacio teatral madrileño. Sin embargo, se podrá seguir disfrutando en la gira nacional que arranca en 2022.
Título: El TransforMimo Título original: El TransforMimo
Reparto: Martin Kent
Duración: 75 min. apróx. Dirección: Lucas Gil Libro e Idea General: Martin Kent
Diseño y Realización de Vestuario: Mónica Muser, Candido Garcia, Yeray Talleres by Loren & American Vintage Hollywood
Realización de Pelucas: Roberto Mohr , Jose La Pelu y Le Memail Gig China
Peluquería Teatral: Néstor Alegre & JF Diaz Serrano
Realización y Escenografía Viviente: Ruben M. Minutoli, Pablo Mainar, Paula Soledad Páez Pogreski, Fabiana Moreno y Aníbal Papalardo
Zapatería Teatral: Felipe Soler, Frederick of Hollywood
Diseño de Luces: Nicolas Perez Costa Edición Musical: Adrián Muser y Mampuele Ortiz Cabello Masterización Musical: Mampuele Ortiz Cabello Voces Over: Adriana Mascialino, Leandro Gargiulo y Juan Ignacio Ge Imagen y Multimedia: Adrián Muser, Martin Kent, Jose Martinez & Toni Lozano de ZetaStudio Prensa & Comunicacion: Angel Galan - La Cultura a Escena Producción Ejecutiva & Stage Manager: Ruben Barreira Gonzalez Producción: Martin Kent y Ditirambo Producciones Internacionales
Tráiler de 'El TransforMimo'
Sinopsis de 'El TransforMimo'
Martín Kent, el aclamado artista que hace reír a Europa en El TransforMimo. “Las mil caras de un actor expresionista en una parodia surrealista llena de imaginación y talento cruza el espectacular espejo imaginario de El TransforMimo. Una carrera frenética presentada con un Maestro de Orquesta Hombre/Mujer, nos introduce de lleno en un circo Freak Surrealista; un recorrido vertiginoso por el mundo del Cine, del Arte & Rock & Pop y del cómico imaginario del artista. (TEATRO MARAVILLAS).
Multitud de referencias
Martin Kent es uno de los artistas del transformismo más rápidos en la actualidad, ofreciendo distintas performances mediante distintos números artísticos. Como no podía ser de otra forma, en El TransforMimo se visitan distintos iconos del mundo cultural, mostrando el gran bagaje cinematográfico, televisivo, musical y teatral del artista. Por tanto, varias de sus mejores actuaciones se deben a personajes míticos como recreaciones del film “¿Qué fue de Baby Jane?”, pasando por una esperpéntica e imaginativa “Titanic” sin olvidarse de otros artistas de la misma índole como Florence Foster Jenkins. Por estos motivos, se valora muy positivamente ese gusto artístico, un bagaje cultural que acerca al gran público a estas figuras, olvidas en algunas ocasiones, pero, sin duda, que forman parte de la historia de la cultura. Por ello, esa Édith Piaf desgarrada por no tener pan, por ejemplo, muestra las excelentes referencias del artista.
Sin embargo, se observa un planteamiento menos brillante en su conjunción, en general. Dicho de otra forma, el espectáculo pierde la conexión entre unas partes y otras, lo que provoca que no fluya de una manera más natural. Por un lado, se encuentran esas grandes figuras ya mencionadas, así como artistas de la talla de Elton John y Tina Turner. Mientras, por otro, también aparecen momentos más viralizados en redes sociales, más cercanos a la cultura pop actual, o como “Sálvame”, que no terminan de encajar, al menos, de la manera en la que se realiza. En consecuencia, esa riqueza cultural que se extrae por separado al leerlo en conjunto, no luce tan bien al no encontrarse una unión más orgánica. Aun así, hay momentos realmente hilarantes, lo que demuestra que puliéndose más, podría llegar a ser un espectáculo muy potente.
El gabinete de los personajes
Hablar de El TransforMimo es hablar del trabajo de Martin Kent, quién es el alma total de este espectáculo. Para comenzar, la pasión que derrocha sobre el escenario hace que se contagie una emoción agradable. Además, se enfrenta a un reto complejo, donde los distintos cambios de escenario y de vestuario hacen que sea una misión a contrarreloj en todo momento. Por tanto, el compromiso de Kent en cuanto a su obra es absoluto, se deja la piel en ello y demuestra sacar lo mejor de él. También se presenta una comedia irreverente, que explora los distintos cambios de registro del intérprete. Gracias a ello, el espectador puede ver el inconmensurable talento que tiene el argentino, siendo su trabajo sobre la escena uno de los aspectos más destacables del show de imitaciones.
Por otro lado, la propuesta escénica realiza varios cambios para convertirse en los distintos escenarios de los diferentes personajes que pasan por la escena. En primer lugar, señalar que el diseño de la escenografía es excelente, hay un cuidado por los distintos detalles y símbolos en torno a las figuras que se imitan, que es un auténtico gusto verlo sobre las tablas. También se agradece esa composición de iluminación y musical, que va metamorfoseándose al mismo tiempo que cambia el tono de cada parte. Sin embargo, al igual que se ha hablado de la falta de conexión entre unas partes y otras, se podría mejorar aún más las transiciones, dado que la magia teatral se pierde en alguna ocasión al verse el proceso de una forma tan directa y afecta en el ritmo. A pesar de ello, el resultado es favorable y puede evolucionar sin problemas.
Conclusión
El TransforMimo es un espectáculo de imitaciones que refleja un bagaje cultural muy enriquecido por parte de Martin Kent. Figuras como Édith Piaf, Bette Davis y Joan Crawford en “¿Qué fue de Baby Jane?” o films como “El exorcista” se dan cita en un espectáculo con potencial, pero que todavía no logra una cohesión más fluida y orgánica en su conjunto. Por tanto, se valoran el contexto y las referencias, pero podría pulirse más para llegar a otro nivel. A pesar de ello, la pasión y el trabajo de Martin Kent sobre la escena es impoluta, viéndose el compromiso y la dedicación que da por cada uno de sus personajes.
Por ello, es interesante seguir la pista a este artista, que, seguramente, siga evolucionando aún más. Después, la propuesta escénica es excelente en su construcción artística, pero se pierde en las transiciones y en un ritmo que se ve afectado por una cohesión menos consolidada. La comedia, el humor y el transformismo se mezclan en un espectáculo agradable, que saca pecho, sobre todo, por las grandes referencias artísticas que hay detrás.