Todd Phillips, director de la saga "Resacón en Las Vegas", firma Joker, película sobre el famoso villano de Batman. Protagonizada por Joaquin Phoenix, nominado hasta en tres ocasiones a los premios Oscar por "Gladiator", "En la cuerda floja" y "The Master". Es uno de los estrenos más esperados del 2019. El film se alzó con el codiciado León de Oro a la mejor película en el prestigioso Festival de Venecia, además de llevarse la Graffetta d'Oro a la mejor película en los premios Fanheart3 y a la mejor banda sonora en los premios Soundtrack Stars. En cines desde el 4 de octubre en España. Puedes leer otras críticas de esta película AQUÍ y AQUÍ.
Crítica de 'Joker'
Resumen
Ficha Técnica
Título: Joker
Título original: Joker
Reparto:
Joaquin Phoenix (Arthur Fleck/Joker)
Robert De Niro (Murray Franklin)
Zazie Beetz (Sophie Dumond)
Frances Conroy (Penny Fleck)
Brett Cullen (Thomas Wayne)
Año: 2019
Duración: 121 min
País: Estados Unidos
Director: Todd Phillips
Guion: Todd Phillips & Scott Silver
Fotografía: Lawrence Sher
Música: Hildur Guðnadóttir
Género: Drama
Distribuidora: Warner Bros. Pictures
Tráiler de 'Joker'
Sinopsis de 'Joker'
Joker se centra en la historia del icónico archienemigo y es una historia original e independiente que no se ha visto antes en la gran pantalla. La investigación que realiza el director Phillips sobre Arthur Fleck (Phoenix), un hombre ignorado por la sociedad, es algo más que el estudio de un personaje extraño e inquietante. Se trata también de una fábula con moraleja. (WARNER BROS. PICTURES).
Dónde se puede ver la película
Bienvenido Arthur Fleck
La historia de Joker se aleja de su gran enemistad con el Caballero Oscuro, para centrarse en sus orígenes. Todd Phillips y Scott Silver son los encargados de escribir esta historia que pretende marcar diferencia con otros filmes de superhéroes o villanos de DC. El carácter socarrón de las obras de Phillips como la saga “Resacón en Las Vegas” se puede percibir en el humor utilizado durante toda la película. Por suerte, su combo con Silver, guionista de “The Fighter” u “8 millas”, lo eleva a un nivel superior con un análisis del trasfondo psico-social del payaso del crimen. Un desarrollo muy interesante, que consigue enganchar al público desde el primer minuto. Dota de realismo y verosimilitud a sus personajes, otorgando mayor conexión con el espectador. Una profundización que humaniza al largometraje, aunque hay cierto tratamiento maniqueísta en la posición de sus protagonistas.
Uno de los mayores atractivos del film es haber conseguido que Arthur Fleck, previamente de ser el famoso Joker, tenga la posibilidad de contar su historia y como la locura se termina apoderando de él. Muestra una crítica al sistema, en especial al estadounidense, con la falta de sensibilización y lucha por las enfermedades mentales. Lleva a un extremo las consecuencias que pueden acarrear una mala praxis con una persona con estas limitaciones. Luego, ese puente entre el mundo real y ficticio en la mente de Fleck está construido notablemente. Es más, las referencias hacia el universo que pertenece están bien hiladas con guiños a Batman, muy sutiles pero necesarias. Sin embargo, esta historia no necesita de dicho superhéroe, se vale en sí misma y consigue esa autonomía narrativa imprescindible para convertirse en una película más que destacable.
Brillante, Sr. Phoenix
Desde su estreno y previamente a él, las críticas coincidían en alabar el gran trabajo de Joaquin Phoenix en Joker y no es para menos. Nominado en tres ocasiones a los premios Oscar, vuelve a demostrar porque es uno de los mejores actores de la industria cinematográfica. El actor desgarra su interpretación para meterse en las venas del Joker desde el principio. Ingenuo pero perturbado, transmite el abanico de sentimientos y emociones que pasan por la complicada mente del Guasón. Un trabajo muy elaborado actoralmente, que se ve resuelta hasta en los mínimos detalles como la manera de moverse, la ya famosa risa del payaso y hasta incluso, la forma de correr. No deja nada al aire, sino que se deja en cuerpo y alma en dar vida a este villano. Es uno de los mejores Joker de la historia del cine, ha sabido dar sello propio a su actuación.
El film cuenta con estrellas de renombre como Robert De Niro, Frances Conroy o Brett Cullen. Tal vez, no se luzcan tanto al girar toda la carga dramática y de acción en Phoenix. Los actores se convierten en fundamentales, pero de manera circunstancial. Por lo tanto, la emoción interpretativa hacia el público no se resuelve de forma tan directa. De Niro se muestra muy natural y da un trabajo como Murray Franklin desternillante y pícaro. Conroy, como la madre del Joker, hace una construcción muy válida y recrea en sus carnes a la perfección el bagaje emocional y vivido de Penny Fleck. Cullen, por su parte, es Thomas Wayne y se convierte en un tirano hecho hombre. Frío y mordaz, es el perfecto antagonista que necesitaba la película, una pena que este personaje peque de maniqueo. Un reparto muy bien compuesto.
El debate está servido
Uno de los puntos más controvertidos de Joker es cómo se ha abordado la violencia visual y la justificación detrás de ésta. No es una película en la que se establezca una opinión popular generalizada, sino que juega con la percepción y la propia cultura social de los espectadores. Por lo tanto, hay una intención de polemizar el contenido que se muestra. Por un lado, hay que mencionar que la construcción social y biográfica del Joker está muy bien resuelta. Ahí no cabe debate y es más, permite una mayor profundización en su personaje. En cambio, levantarlo como líder de los desfavorecidos, sin comerlo ni beberlo, provoca que pueda dar la sensación de justificar la violencia para luchar contra las desigualdades. Crea un icono pop del desgaste social que se vive en las calles. ¿El problema? Hay que tener cuidado con esto.
No es una cuestión fija, dado que hay que tener en cuenta que se trata de una ficción cinematográfica que no intenta recrear la sociedad actual. Sin embargo, la empatía entre el público y el Joker se vuelve tan fuerte, que es imposible no haberlo dotado de una humanidad muy comprensible. Esto puede provocar que se aleje de la construcción reflexiva y se acerque hacia una justificación acentuada de los actos violentos perpetrados por él. Por esta razón, utilizar la imagen de la gente de poder y dinero como los grandes villanos sociales, crea ese efecto de dos principios contrarios totales: el bien y el mal. Contrasta con la creación de alejarse de una idea tan limitante con la historia del Joker, dado que a dichos personajes se les muestra con demasiadas connotaciones negativas. Por lo cual, alcanza la intención de hacer meditar y abrir el debate en sociedad.
Conclusión
Joker es una película diferente a otros filmes relaciones con el payaso del crimen. Una historia marcada por la profundización personal y social del villano, previamente de convertirse en éste. Un guion que mezcla perfectamente el humor socarrón con el drama, sin caer en clichés. Joaquin Phoenix es el alma del film, brillante, excelente y una de las mejores interpretaciones del año. Consigue que su Joker sea recordado en la historia del Guasón, pero además, con una personalidad propia. Técnicamente muy bien realizada, con unos colores y planos preciosos. Un cuidado del detalle a destacar. Abre el complicado debate de la justificación de la violencia, permitiendo al espectador participar activamente a través de su percepción del film y la reflexión que saca de ésta. Una cinta de superhéroes, que en plena época de éstos, marca diferencia y va más allá.