Divertida, entretenida y breve es la obra La señorita Doña Margarita, representada en el bonito Teatro Ciudad de Marbella el pasado sábado día 23 de octubre. Es una producción de La Estampida.
Adaptada y dirigida por Juan Margallo, esposo de la protagonista PetraMartinez, veterana actriz de teatro, sobre todo, aunque también haya realizado cine y televisión. Desde sus orígenes en aquel emblemático programa Estudio 1, hasta la reciente serie La que seavecina. Su gran capacidad interpretativa y sus variados registros, la convierten en la mejor caracterización de la maestra solterona, mojigata y autoritaria. Claro ejemplo de una educación retrógrada.
Título: La señorita Doña Margarita Título original: Apareceu a Margarida
Reparto: Petra Martínez
Duración: 70 min. apróx. Dirección: Juan Margallo Dramaturgia: Roberto Athayde Versión: Juan Margallo Diseño de escenografía y vestuario: Alessio Meloni
Diseño de iluminación: Leticia L. Karamazana
Fotografía y vídeos: Susana Martín
Diseño gráfico: Marcos Moreno Pons
Ilustraciones: Quique Santana
Ayudante de Dirección: Aída de la Rocha
Producción ejecutiva: Kike Gómez
Realización escenografía: Miguel Delgado / PREVEE Realización vestuario: Taller Paloma de Alba Impresión tejido: Textilfy Prensa: María Díaz Distribución: Amadeo Vañó - Cámara Blanca Producción: La Estampida
Tráiler de 'La señorita Doña Margarita'
Sinopsis de 'La señorita Doña Margarita'
La señorita Doña Margarita es maestra. Autoritaria, ecologista, ególatra, violenta, sensible, cariñosa y muchas otras cosas, trata de iniciarnos en el mundo de los adultos. Por tanto, el mundo de la alfabetización informática, el who is who, o reconocer que no somos nada, forma parte del bagaje que Doña Margarita quiere transmitirnos para prepararnos para “la vida moderna”. (LA ESTAMPIDA).
Autoritarismo en las aulas
El texto original, de Roberto Athayde, narra la historia de una profesora durante la dictadura militar brasileña: Doña Margarita. Tiempos de autoritarismo, de cercenar cualquier tipo de iniciativa y castigar la libertad de cualquier índole.
Ese tipo de gobierno bien se puede extrapolar a cualquier dictadura en el mundo, también a la época franquista y los primeros años de transición en España. Incluso se podría decir, por qué no, que no se está libre de que la historia se repita en estos tiempos. Quizás no en la figura de doña Margarita pero disfrazado con la engañosa y adictiva tecnología. Creencias que ayudan a controlar el rebaño.
"Vosotros no sois nadie, no sabéis nada...pero Doña Margarita os enseñará todo lo que tenéis que aprender". Frases como ésta y otras parecidas, igual de condescendientes y retrógradas, se oyen en La señorita Doña Margarita. Mas en lugar de enojar o provocar incomodidad, Petra Martinez, con sus tonos de voz, sus gestos, su grandeza al actuar, provocan risa y, en cierto modo, compasión por su personaje.
Humor para reflexionar
Muy acertado Juan Margallo quien ha adaptado el papel, haciéndolo a medida de su querida esposa, la gran Petra Martinez. No es para menos, considerando la talla del actor, director y autor de teatro, considerado uno de los ejes principales del teatro independiente y Medalla de Oro al Mérito de las Bellas Artes.
En clave de humor, entre risas y frases sobre valores caducos, trata un tema muy serio que se da en todos los niveles de la sociedad, transmitido desde la misma tierna infancia.
El abuso de la autoridad, el sometimiento, la carencia de libertad y autonomía, son algunos de los aspectos que se desprenden en La señorita Doña Margarita.
Sin embargo, en lugar de angustiar con estos temas tan relevantes, todo lo contrario, divierte y se es partícipe en numerosas ocasiones, ya que Doña Margarita se dirige al público como si de sus alumnos se tratara.
Conclusión
Entretenida y divertida obra en la que el público entona canciones y responde a las preguntas de la peculiar Doña Margarita.
La señorita Doña Margarita da qué pensar en temas que parecen trasnochados, pero que podrían suceder en la actualidad. Un toque de atención para el sistema educativo, esencial para preparar a futuras personas responsables de su libertad y beneficiar a la sociedad.
Magistral Petra Martinez, actriz veterana capaz de transmitir, con mucho humor, empatía hacia una mujer amargada e incluso acabada. Modelo de una "institución", la enseñanza, obsoleta y peligrosa para el desarrollo del ser humano.
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