La recordada actriz americana de comedias románticas de los años 90, Meg Ryan, vuelve a ponerse detrás de cámaras, y delante de ella, para dirigir Lo que sucede después (2023), una película con la fórmula que la hizo ser un ícono de gran éxito comercial. Estreno en salas de cine españolas el 17 de mayo de 2024.
Es, sin duda, el gancho de marketing de su nueva película coprotagonizada por David Duchovny (La gente como vosotros, La Burbuja), que también marca su segundo esfuerzo como directora, después del estreno de Ithaca en 2016. Pero los fanáticos de clásicos como Cuando Harry conoció a Sally y Sin dormir en Seattle pueden sentirse un poco perplejos ante What Happens Later, título original, que está impregnada de fuertes dosis de realismo mágico, que algunos espectadores la encontrarán encantadora y otros insoportablemente cursi.
Crítica de 'Lo que sucede después'
Resumen
Ficha Técnica
Título: Lo que sucede después
Título original: What Happens Later
Reparto:
Meg Ryan (Willa)
David Duchovny (Bill)
Rob Gilchrist (Pasajero varado)
Will Reed (Fondo del aeropuerto)
Año: 2023
Duración: 105 min.
País: Estados Unidos
Director: Meg Ryan
Guion: Steven Dietz, Kirk Lynn, Meg Ryan. Obra: Steven Dietz
Fotografía: Bartosz Nalazek
Música: David Boman
Género: Comedia romántica
Distribuidor: A Contracorriente Films
Tráiler de 'Lo que sucede después'
Sinopsis
Los antiguos amantes Willa y Bill se reencuentran en un aeropuerto por primera vez desde que se separaron décadas antes. Atrapados por la nieve, lo único que quieren es llegar a casa lo antes posible. Sin embargo, en el transcurso de una noche, gradualmente se sienten de nuevo atraídos, obligados a revisar lo que podría haber sido su relación y lo que bien podría ser nuevamente. (A Contracorriente Films)
Dónde se puede ver la película en streaming
Recordar es volver a vivir
Las dos estrellas interpretan a Willa y Bill, amantes cuando eran estudiantes hace 25 años, antes que se reencuentren en el aeropuerto cuando sus vuelos se retrasan. Sus intercambios inicialmente incómodos insinúan que la pareja no terminó feliz. Atrapados juntos en el futuro previsible, Bill comenta que sufre de “ansiedad anticipatoria” y Willa se describe como una “practicante del bienestar en las artes curativas”. En la espera, ambos repiten los aspectos más dolorosos de su relación anterior, que incluyen que Willa se acostaba con otros hombres y el aborto espontáneo de su bebé.
Anuncios molestosos
Mientras tanto, el aeropuerto está cada vez más desierto y aparentemente uno de cada dos pasajeros logra abordar un vuelo. El lugar en sí parece estar guiando sus destinos, la megafonía haciendo anuncios cursis y a menudo respondiendo directamente a sus comentarios, y los carteles electrónicos que transmiten mensajes como “El tiempo lo hará” o “Solo conectar”. El último mensaje resulta instructivo: la pareja reaviva cálidamente su afecto mutuo y finalmente bailan juntos por el aeropuerto vacío.
Un escenario, pocos recursos
Lo que podría haber resultado eficaz teatralmente resulta totalmente artificial y esquemático en la pantalla, a pesar de los considerables esfuerzos de Meg Ryan como directora e intérprete. Ella proporciona ideas reiterativas al escenario único, una vertical que separa a los personajes y con tomas exteriores repetidas del aeropuerto, por lo que el proceso resulta más un telefilme. Si bien el abundante encanto de Ryan es tan evidente como siempre, su personaje desafortunadamente parece un arquetipo torpe.
Conclusión de 'Lo que sucede después'
Sin embargo, Lo que sucede después resulta atractivo a veces, gracias a la química entre Meg Ryan y David Duchovny, este último emplea sus dotes cómicos inexpresivos y perfeccionados con excelentes resultados. De ese modo, si se está buscando una película para pasar el fin de semana, esta comedia romántica es la alternativa para recordar a una actriz/directora que está haciendo catarsis de su propia vida, al igual que todos nosotros.
Reportaje de Lo que sucede después en Días de Cine TVE
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