Materialistas es una comedia romántica (o ensayo emocional) que cuestiona el amor en la era contemporánea. Una época en la que todos parecen querer amar y ser amados, pero en la que nadie termina de ser “la persona correcta”. La película dirigida por Celine Song (Vidas Pasadas), cuenta con un elenco de lujo con Dakota Johnson (Cincuenta sombras liberadas), Pedro Pascal (The Last of Us) y Chris Evans (El negocio del dolor) en un triángulo amoroso que se adentra en un terreno del género que pocas se atreven a explorar. ¿Cómo se ama en una sociedad que lo mide todo? ¿Puede el amor ser calculado, rentable o incluso aspiracional?. Estreno el 14 de agosto de 2025 en salas de cine españolas.



Materialistas película

Crítica de 'Materialistas'

Ficha Técnica

Título: Materialistas
Título original: Materialists

Reparto:
Dakota Johnson (Lucy)
Pedro Pascal (Harry)
Chris Evans (John)
Marin Ireland (Violet)
Louisa Jacobson (Charlotte)
Dasha Nekrasova (Daisy)
Sawyer Spielberg (Mason)
Zoe Winters (Sophie)
Will Fitz (Camarero de catering)
Rachel Zeiger-Haag (Jenn)
Fernando Belo (Peter)
Lindsey Broad (Linda)
Nedra McClyde (Audrey)
Halley Feiffer (Patricia)
Swanmy Sampaio (Casamentera)
Alison Bartlett (Jaime)

Año: 2025
Duración: 109 min.
País: Estados Unidos
Director: Celine Song
Guion: Celine Song
Fotografía: Shabier Kirchner
Música: Daniel Pemberton
Género: Comedia romántica
Distribuidor: Sony Pictures Releasing de España

Filmaffinity

IMDB

Tráiler de 'Materialistas'

Sinopsis

Una joven y ambiciosa celestina de Nueva York se debate entre la pareja perfecta y su imperfecto ex.

Dónde se puede ver la película en streaming



Una película en la que el amor se pide a la carta

Dakota Johnson interpreta a Lucy una casamentera moderna que organiza citas entre solteros de Nueva York para encontrar el “verdadero amor”. Sin embargo, en su agencia, los match se calculan como si el amor fuese una ecuación perfecta, con variables medibles y compatibilidades anotadas en un Excel.

En plena celebración de su novena boda exitosa, conoce a Harry, el rico y atractivo hermano del novio, interpretado por Pedro Pascal. Él también busca el amor, pero lo hace con esa mezcla de idealismo y privilegio que le permite invitar a cenar en helicóptero o proponer mudarse juntos después del postre. Todo se vuelve aún más complejo cuando John (Chris Evans), su exnovio y camarero en la boda, reaparece inesperadamente

Lucy comienza a quedar con Harry teniendo las citas que siempre soñó, en ambientes de lujos, restaurantes caros y con planes de una vida en la que todos sus deseos pueden hacerse realidad. O al menos los que el dinero puede comprar… Pero, ¿eso es realmente amor? ¿Puede una casamentera encontrar lo que busca en su propia fórmula?

Esto hará que Lucy se encuentre atrapada entre dos versiones de la vida: una llena de lujos y certezas, otra más caótica, emocional y real hasta que una crisis con una de sus clientas le hace dudar de todo lo que siempre anheló. 

Materialistas película

¿Cómo funciona el algoritmo del amor?

Materialistas parte de una premisa que no deja indiferente al espectador; ¿y si encontrar a “la persona perfecta” fuera solo cuestión de método?. Una libreta roja, criterios bien definidos y algo de práctica en el arte de las citas bastan para que Lucy diseñe conexiones aparentemente infalibles. 

En esta era de apps, filtros y fórmulas, el amor se ha convertido en un menú a la carta: buscamos matches con precisión quirúrgica, anotamos requisitos como si fueran ingredientes imprescindibles y nos obsesionamos con la compatibilidad como garantía de felicidad. Pero en el fondo, ¿puede un algoritmo predecir un flechazo? ¿O estamos dejando fuera lo más importante por miedo al error?

Materialistas película

Cuando encontrar pareja es conseguir un trofeo

Casarse para reafirmarse. Enamorarse para sentirse valioso. Tener pareja como quien tiene un reloj caro: porque dice algo de ti. Materialistas retrata con agudeza cómo, en nuestra sociedad, el amor puede convertirse en un producto de alta gama. No se busca tanto conexión como validación. Y en ese mercado emocional, no todas las personas pueden (o quieren) pagar el precio.

Materialistas muestra cómo, en este contexto, la pareja deja de ser un vínculo y se convierte en una extensión del ego. La pareja, entonces, ya no es un refugio, sino una forma de exhibirse. Una construcción diseñada para sumar valor a la identidad, para decirle al mundo: “mira lo que tengo, mira quién está a mi lado”.

Materialistas nos plantea algunas cuestiones, como; ¿Puede ser el amor algo tan frío y calculado? o ¿Es una forma de negocio? ¿Un contrato en el que ambas partes sacan beneficio dejando el romanticismo a un lado?

Materialists filme

Materialistas nos sobrecoge como su precuela

Celine Song nos vuelve a demostrar que sabe hablar del amor desde esas partes que duelen, que nos hacen sobrecogernos y nos plantean dilemas.  Si en Vidas Pasadas nos hablaba del vínculo que persiste pese al tiempo y la distancia, en Materialistas nos enfrenta a un amor más incómodo: el que nace entre expectativas, transacciones y deseos cruzados.

La dirección de Song apuesta nuevamente por una estética delicada, íntima, donde cada plano sostiene un significado emocional. Repite con la misma directora de fotografía, lo que se traduce en una puesta en escena coherente con su universo visual: hay luz en los espacios aspiracionales —los brunch en áticos acristalados, los paseos en yate, las cenas bajo luces cálidas—, pero también sombras que marcan la otra cara de ese ideal.

A diferencia de la nostalgia contenida de Vidas Pasadas, aquí Celine Song explora el artificio. El amor no es un recuerdo al que volver, sino un deseo que se construye y a veces se imposta. Y eso se nota en cómo mueve la cámara, en lo que elige mostrar y ocultar, en cómo contrasta el ruido de la ciudad con los silencios de los personajes.

Materialists filme

El amor tiene que ser fácil

Aunque catalogada como comedia romántica, Materialistas tiene más toques trascendentales, emocionales y filosóficos de lo que cabría esperar.

Materialistas señala cómo se ha pervertido la idea del amor: ya no se trata tanto de compartir una vida como de validarse a través del otro. Buscamos relaciones que nos hagan sentir importantes, completos, admirados. En ese juego, la autenticidad queda relegada. Nos relacionamos desde lo que proyectamos, no desde lo que somos. Y muchas veces, lo que llamamos amor es solo una forma elegante de esconder inseguridades, vacíos y miedo a no ser suficientes.

Materialistas lanza una pregunta, sin decirla en voz alta: ¿Y si el amor no fuera tan difícil? ¿Y si, en lugar de buscar perfección, buscáramos presencia, escucha, complicidad? Quizá ahí está la clave. Quizá el amor, cuando es amor, no se esfuerza tanto.

Únete a nuestro CANAL DE TELEGRAM

Publicidad 300x250
CINEMAGAVIA
7,0 / 10
70 %
Artículo anterior"Nowhere": El regreso al ruedo del mito queer
Artículo siguiente"Chime": Tensión sonora, y poco más
Alma Muñoz
Hola, mi nombre es Alma y comencé en el mundo de la comunicación hace 4 años. Desde siempre me ha apasionado la comunicación y no sólo porque soy muy habladora, sino porque creo que nuestra voz y su expresión escrita realmente pueden lograr cambiar las cosas. Hace unos cuantos años ya me descubrí amando el cine, yendo a salas los miércoles por la tarde, sin palomitas y sin compañía para ver cine de todo tipo. Aunque me apasiona el cine independiente y de autor, lo que realmente me encanta es el cine en cualquiera de sus formatos o estilos.
materialistas-critica-pelicula-estreno-cineAunque catalogada como comedia romántica, Materialistas tiene más toques trascendentales, emocionales y filosóficos de lo que cabría esperar. Materialistas señala cómo se ha pervertido la idea del amor: ya no se trata tanto de compartir una vida como de validarse a través del otro. Buscamos relaciones que nos hagan sentir importantes, completos, admirados. En ese juego, la autenticidad queda relegada. Nos relacionamos desde lo que proyectamos, no desde lo que somos. Y muchas veces, lo que llamamos amor es solo una forma elegante de esconder inseguridades, vacíos y miedo a no ser suficientes. Materialistas lanza una pregunta, sin decirla en voz alta: ¿Y si el amor no fuera tan difícil? ¿Y si, en lugar de buscar perfección, buscáramos presencia, escucha, complicidad? Quizá ahí está la clave. Quizá el amor, cuando es amor, no se esfuerza tanto.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí