"Nosferatu": Respetuosa, distinta y no tan memorable

A modo de resumen, podríamos decir que Robert Eggers (El hombre del norte, El faro) ha trascendido con Nosferatu (2024) al concepto de mero remake. Deposita en su personalísima obra un sello autoral de auténtico terror psicológico que en gran parte termina encarnado en las dotes interpretativas de Lily-Rose Deep. Con lo último del director de New Hampshire tenemos una siniestra historia teatralizada, pulida en lo visual y excepcionalmente ambientada, que sin embargo peca por momentos de redundante y algo aletargada. Incluso la tan característica y potente atmósfera pierde algo de tensión con el avance del metraje. Se estrena en cines de toda España el 25 de diciembre de 2024. Puedes leer aquí otra crítica realizada por Cinemagavia de esta película.

Crítica de 'Nosferatu'

Ficha Técnica

Título: Nosferatu
Título original: Nosferatu

Reparto:
Lily-Rose Depp (Ellen Hutter)
Bill Skarsgård (Conde Orlok)
Nicholas Hoult (Thomas Hutter)
Aaron Taylor-Johnson (Friedrich Harding)
Emma Corrin (Anna Harding)
Willem Dafoe (Prof. Albin Eberhart von Franz)
Simon McBurney (Knock)
Ralph Ineson (Dr. Wilhelm Sievers)
Paul A Maynard (Dockhand)
Stacy Thunes (Enfermera jefe)

Año: 2024
Duración: 132 min.
País: Estados Unidos
Director: Robert Eggers
Guion: Robert Eggers. Libro: Bram Stoker
Fotografía: Jarin Blaschke
Música: Robin Carolan
Género: Terror. Vampiros
Distribuidor: Universal Pictures International Spain

Filmaffinity

IMDB

Tráiler de 'Nosferatu'

Sinopsis

Nosferatu es un cuento gótico en torno a la obsesión entre una atormentada joven y el aterrador vampiro enamorado de ella que deja un espantoso rastro a su paso. (Universal Pictures International Spain)

Dónde se puede ver la película en streaming

Donde nunca falla

Maestro es Robert Eggers en construir atmósferas aterradoras y visualmente extraordinarias. No hace falta conectar con su propósito o estilo para apreciar su don. Nosferatu es en gran medida una de sus grandes obras maestras en lo que a sus virtudes se refiere. La estética que le imprime es enteramente protagonista, condiciona la narrativa por completo y te acompaña en cada susurro de pesadilla. 

Su remake mama de los oscuros códigos de la obra original, queda fijado por estos patrones, llegando a grandes cotas con su poética proposición. Hay mucha belleza en cómo desarrolla esto. El cineasta americano es único en generar estas sensaciones, es indudable que cuida cada uno de los detalles para crear un todo, una unidad que transmite lo mismo en cada una de sus perspectivas. Incluyamos en estos estándares de calidad una fotografía tan tenebrosa como detallada, sumamente creíble dentro de la fantasía.

Del mismo modo no podemos obviar la dirección de un Eggers que se complace en su meticulosidad. Como he dicho, hay un soberano respeto por los precedentes, pero él es firme en condicionar todo a su forma de recuperar el clásico para los públicos modernos. La cinematografía es pura expresión artística, digna de museo, que carga y descarga constantemente, como actor principal, de todo ese pavor psicológico que el director emplea como sello para diferenciarse del resto. Ello queda nutrido también de una banda sonora lírica en su desazón.

Siempre hay un pero

Sin embargo, aunque el resultado deja una cinta casi redonda y de lo mejor de este 2024, la sensación es del clásico “pudo estar más optimizada”. Cierto que la densidad debe tomar partido por la obra que representa, pero no quiere decir que tengas que cargar tanto el ritmo con una redundancia de conceptos. Hay escenarios donde el horror viene más dado por un bucle en el relato que por la angustia de los personajes. Incluso diría que padece de cierto letargo que tristemente afecta a la misma tensión atmosférica que brillantemente se había implementado.

Me gustaría destacar también las interpretaciones, que nunca llegan a ser magistrales, pero ofrecen muchísimo peso a sus personajes. La dirección aquí es notable, si bien es cierto que la joya de la corona está en una Lily-Rose Depp salvaje en su actuación, otorgando a su melancólica mujer un vaivén de registros deliciosos, desde lo visceral hasta lo tierno. La contraparte de Nosferatu es admirable tanto en cuanto Bill Skarsgård dista de lo antes visto en todo lo relacionado con el famoso vampiro transilvano. En esta ocasión observamos a un monstruo repugnante en lo físico, brutal en sus formas y menos aterrador de lo que podría esperarse. Su Orlok se aleja totalmente de lo humano en primera instancia para luego depender de precisamente esto para su supervivencia. Algo contradictorio.

Conclusión de 'Nosferatu'

Nosferatu es una verdadera experiencia cinematográfica que insufla vigor al clásico de terror respetando la esencia gótica y añadiendo líneas autorales que, aun no funcionando siempre, se agradecen. Los estándares de calidad están asegurados por Robert Eggers, y en esta ocasión asistimos a una mayor amplitud y profundidad del género en lo psicológico. Menos reclamo convencional y más sello diferencial.

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