"Conferencia de los ausentes": En nombre de

Conferencia de los ausentes grita: ¡Estamos en crisis! Y en tiempos de crisis global, todo gira en torno a la cooperación global. Sin embargo, en esta ocasión la crisis nos atañe especialmente, localmente, en nuestro alrededor inmediato –eso sí– dentro de un contexto global: una conferencia para la que nadie tiene que reservar un vuelo o montarse en un tren. Una performance en la que los expertos invitados y oradores no aparecen de forma física, estarán representados por los asistentes en cada lugar. Recibirán el guion al comienzo de la representación. En Conferencia de los ausentes, la audiencia observará cómo gente de su propia ciudad toma la identidad de un conferenciante ausente.

Sin emisiones de CO2, sin esas malas conexiones de Skype o Zoom, pero con todas las características propias del teatro. Las contribuciones y tesis contradictorias sobre las consecuencias de la globalización se sitúan en el espacio teatral para ser reordenadas dentro de este espacio.

La ventaja de no estar en un lugar concreto –de no tener que estar en todas partes- se torna en un espectáculo colectivo que se renueva con cada sesión. En el centro de este “juego” están personas que se transforman en portadores de ideas y en escena defienden las ideas del experto junto a las suyas propias. De esta forma, la ausencia no resta, revaloriza, porque crea un espacio de encuentro y perspectivas inesperadas. Siendo al mismo tiempo escritor fantasma y redactor de discurso, co-autor y director, Rimini Protokoll transforma una co-autoría documental en una regiduría teledirigida. (TEATRO ESPAÑOL). 

El mensaje social

La compañía Rimini Protokoll experimenta un formato totalmente interactivo en Conferencia de los ausentes. La pieza teatral recoge nueve testimonios, de nueve ponentes que se encuentran de una forma espiritual en el espectáculo. Cada uno de los participantes desgrana historias de vida, que abordan de alguna forma el concepto de la ausencia. Con lo cual, el leitmotiv principal de la obra es observar la perspectiva de la falta de presencia en sus vivencias. Sin duda, varios de los relatos que se narran, se convierten en un aprendizaje para el espectador, que se encuentra pendiente de lo que ocurre en escena. Además, se da un espacio imprescindible a cada una de dichas historias, llamando la atención por el contenido que hay en ellas. Por tanto, sin contar con la ejecución por los intérpretes de las historias, el propio texto lleva una reflexión social profunda.

De esta manera, no es un mero ejercicio de exposición de datos, sino que se busca realizar un planteamiento desde la empatía y la presencialidad. Únicamente, puede haber algunas partes donde se echa en falta una mayor cohesión entre los distintos relatos, ya que, en ocasiones, da la sensación de estar divididos de una forma excesivamente abrupta. Un ejemplo de un cambio narrativo bien efectuado es entre la ponencia previa al espacio y ésta misma. Por otro lado, hay que entender que la pieza no busca una experiencia inmersiva en su totalidad, sino, más bien, un vehículo de expresividad y exposición de cómo es la ejecución de cada persona que toma la posición de narrar en representación de los ponentes no presentes físicamente. No obstante, si se participa activamente en el espectáculo, puede haber partes que no se asimilan igual que si se estuviera en la butaca.

El avatar

El mayor atractivo de Conferencia de los ausentes es el formato en el que se envuelve. Para comenzar, no cuenta con actores, por lo que depende absolutamente de la voluntad de los espectadores. Este punto se convierte en un movimiento de tensión, de nervios y que encandila fácilmente al público. Esa oportunidad de formar parte activamente de la obra es un auténtico revulsivo para los espectadores. Asimismo, se valora que el trato técnico sea accesible y haya una preparación organizada. De esta forma, se puede concluir que la experiencia a nivel de público es positiva tanto desde la butaca como desde el escenario. Como detalle, puede sentirse que la vivencia no resulta tan impactante desde el asiento, al convertirse, al fin y al cabo, en un espectador-observador en el último tramo de la obra. Se podría potenciar más este aspecto.

A nivel técnico, ofrece una construcción que necesita una estructura bien planteada. A lo largo del ensayo general del 7 de octubre, se observó una ejecución notable, donde algunos matices debían pulirse de cara al estreno final. Hubo algún audio que provocó cierta confusión y también un ponente que se quedó a media conferencia. A excepción de esos fallos técnicos, que pueden solventarse sin problema, se podría potenciar una parte visual más atractiva. El uso de fotos y de vídeo en vivo es una perfecta selección, por lo que mezclándose con un diseño más visual e impactante, podría ser todo un festín para los ojos del público. También se podrían aprovechar más la iluminación y la composición del espacio, como se realiza en los dos últimos testimonios. Con lo cual, es un experimento teatral muy interesante, que podría ir mucho más allá en su identidad artística.

Conclusión

Conferencia de los ausentes es un experimento teatral muy interesante, con una base social desarrollada inteligentemente y exponiendo temáticas muy atractivas. Además, el formato permite una inmersión del espectador absoluta, aunque podría potenciarse está interacción entre los asistentes que no participan. Aun así, se valora el riesgo y la frescura de explorar nuevos lenguajes creativos. Por otro lado, a nivel técnico, se convierte en un ejercicio atractivo y curioso, que llama la atención al público desde el principio. Únicamente, se podría ir más allá en su identidad visual y artística. El público se convierte de observador a narrador de testimonios, abordando la ausencia en sus diversas acepciones con una interacción fresca y rompedora.

Únete a nuestro CANAL DE TELEGRAM