Todos recordamos esos largos trayectos en coche antes de llegar a nuestro destino de viaje. Viajes de horas con la familia y amigos de los que nos abastecemos de cualquier cosas para hacer menos pesado el trayecto. Ojalá los trayectos en coches fueran igual de interesantes que en las películas. Pero ningún trayecto es como el que vamos a tratar en esta crítica, Fresas Salvajes de Ingmar Bergman.



Fresas Salvajes 

Crítica de Fresas salvajes

Ficha Técnica

Título: Fresas salvajes
Título original: Smultronstället

Reparto:
Victor Sjöström (Dr. Eberhard Isak Borg)
Bibi Andersson (Sara)
Ingrid Thulin (Marianne Borg)
Gunnar Björnstrand (Dr. Evald Borg)
Jullan Kindahl (Agda)
Naima Wifstrand (Mrs. Borg)

Año: 1957
Duración: 90 min.
País: Suecia
Director: Ingmar Bergman
Guion: Ingmar Bergman
Fotografía: Gunnar Fischer
Música: Erik Nordgren
Género: Drama. Romance
Productora: Svensk Filmindustri

Filmaffinity

IMDB

Tráiler de Fresas salvajes

Dónde se puede comprar la película

No se ha encontrado el producto.

Sinopsis de Fresas salvajes

Sin lugar a dudas una de las mejores películas de la historia del cine. La historia comienza cuando el eminente profesor de física Isak Borg de setenta y tantos años, se dispone a recibir en la ciudad de Lund el título de "Doctor Honoris Causa". El viaje que emprende hasta la citada ciudad le servirá para dar un repaso a toda su vida.

En este viaje le acompaña su nuera que ha decidido abandonar a su marido porque no quiere tener un hijo. Durante su viaje visitan el pueblo natal de Isak donde éste evoca a su familia y algunos episodios de su juventud en una serie de imágenes memorables y emotivas. Pero la secuencia más chocante del film y una de las más recordadas de la historia del cine, transcurre cuando, en un sueño, el profesor camina por una ciudad desolada que parece haber sido diseñada por un expresionista alemán. (Filmin)

Premios

  • Nominada al Oscar: Mejor guión original. 1959
  • Globo de Oro: Mejor película extranjera. 1959
  • National Board of Review: Mejor película extranjera, Mejor actor (Sjöström). 1959
  • Premios BAFTA: Nominada a mejor película y actor extranjero (Sjöström). 1958
  • Festival de Berlín: Oso de Oro, Premio FIPRESCI. 1958
  • Festival de Mar de Plata: Mejor película. 1959
  • National Board of Review: Top mejores películas extranjeras y actor. 1959

Donde se puede ver la película



La importancia de una buena maleta

En 1957 Bergman estrenó una road movie increíblemente bella, en parte por sus personajes y las reflexiones existenciales que no suelen faltar en las cintas del director. Antes de arrancar motores se nos realiza una importante presentación de personajes que es vital para el viaje que realizaremos a posteriori, y no hablo solo de kilómetros. Comenzaremos el filme en una estancia que podemos deducir que es el despacho de nuestro protagonista, el doctor Eberhard Isak Brog, narrador en primera persona del viaje. Asimismo, él nos presenta en su introducción lo que funcionará como macguffin en Fresas salvajes, una ceremonia en la ciudad de Lund donde recibirá el título de "Doctor Honoris Causa".

Personajes: personalidad y conflictos

Nuestro anciano doctor está interpretado por Victor Sjöström, director y guionista sueco del cine mudo que cuenta con una amplia filmografía en la que no puedo dejar sin destacar una de sus obras maestras, El viento. En los primeros minutos de metraje se realiza una definición de nuestro protagonista y de su relación con Agda, su ama de llaves. Vemos como Isak es un anciano cabezota, gruñón, pedante, piensa que con dinero y regalos se arreglan las cosas y tiene una relación con Agda algo chocante. Desde el inicio nos podemos imaginar que ambos personajes han estado toda la vida con encontronazos que han dado lugar a leves discusiones que incluso podrían tener nuestros propios abuelos. Sin embargo, ambos se tienen cariño, aunque se lo oculten el uno al otro.

Por otro lado, en Fresas salvajes tenemos la presentación del personaje de Marianne Borg, la nuera del anciano doctor. Esta vive con su suegro alejada de su marido, algo que da a entender que existen problemas matrimoniales en la pareja. Asimismo, se vislumbra también la mala relación que tiene Marianne con el anciano doctor, quien lo llega a definir como alguien muy egoísta. Asimismo, podemos destacar también rasgos de la personalidad de Marianne, se nos muestra una mujer segura, independiente, formal y con buenos valores.

De esta manera, el inicio de la cinta nos muestra el equipaje que llevaremos durante hora y media de metraje. Un viaje que promete cambiar a sus personajes, y al propio espectador. 

Fresas salvajes
Copyright D.R

El comienzo del trayecto

Lejos de ser un trayecto cualquiera, como no podía ser menos, Ingmar Bergman nos promete un viaje filosófico, con elemento oníricos, con dualismos, y lleno de reflexión. Una experiencia psicológica dramática con algún que otro toque de humor que dejará al espectador reflexionando tras su visionado. La muerte, la educación, la soledad, el amor, la religión y la ciencia, la vida, la felicidad y la vejez son los temas que llegaremos a encontrar en esta cinta.

Todo el recorrido lo haremos de la mano de Isak, profundizaremos enormemente en el anciano personaje llegando a conocer su sentimientos, las razones de su ser y sus miedos y temores. En este apartado cabe destacar las brillante y magistral interpretación de Sjöström, al final acaba dotando a su personaje de una ternura y melancolía comedida que se va dejando vislumbrar progresivamente a medida que avanzamos. Por no hablar de los silencios de su personaje, estos llegan a decir más que un puñado de palabras. Él solo lleva magistralmente el peso de la película, lo hace maravillosamente bien, pero esto no quiere decir que el resto del reparto lo haga mal, todo lo contrario, pero no pueden llegar a destacar debido a la increíble interpretación que nos ofrecer el director sueco.

Ingmar Bergman realizará esta introspección de su personaje protagonista a partir de flashbacks, sueños impactantes, recuerdos y profundos y reflexivos diálogos que no nos dejan indiferentes. Quizás el anciano doctor Isak nunca se ha encontrado en la situación en la que le veremos en Fresas salvajes, ahora él debe hacerse un examen médico y darse cuenta de los errores cometidos.

Fresas salvajes
Foto de IMDB

Fresas salvajes: El viaje interior

Por así decirlo, la cinta se llega a dividir en dos viajes, el exterior y el interior. En el interior encontraremos esos flashbacks, recuerdos y sueños que fuerzan a nuestro personaje a meditar sobre si mismo y su vida. Por el contrario, el viaje exterior sería el viaje físico que realiza en coche, desde los personajes que participan durante el trayecto hasta los diálogos que se suceden.

Los sueños

En cuanto al viaje interior, comenzamos destacando las escenas oníricas. Para desglosarlas cabe destacar el trabajo de iluminación que es llevado a cabo para realizar la distinción entre una escena real y un sueño. La estupenda fotografía de Fresas salvajes es mérito de Gunnar Fischer, quien realiza un trabajo excepcional. Por otro lado, hay que recalcar lo impactante que resultan estas escenas fantásticas, y la importancia que tienen en el film. Estos sueños son los que empujan a nuestro personaje a realizarse una introspección, e incluso se atreven a juzgar la labor laboral realizada durante años por nuestro protagonista. Sin ninguna duda, el más impactante es el primero con su llamativo escenario, además, es el que obliga a nuestro protagonista a tomar la decisión de ir en coche, es decir, a realizar ese viaje de su vida y mirar atrás. 

Otro de los sueños es cuando Sara, su verdadero amor, le obliga a mirarse en el espejo. Al final, como en muchas películas, cuando un personaje se para a mirarse en el espejo no es porque se esté viendo físicamente, sino porque está mirando en su interior. Precisamente ese es el significado de dicha escena, Sara le obliga a mirarse y él reacio al comienzo lo acabará haciendo.

Los recuerdos y los flashbacks

Además, tenemos todavía los recuerdos y los flashbacks. El primero de estos ocurre en la primera parada que realizan, en esa maravillosa casa de veraneo. Más bien, este momento no se trata de un recuerdo ya que nuestro protagonista está ausente en el momento que se sucede la escena. Por lo tanto, Isak no pudo haber vivido los acontecimientos que vemos, tan solo se lo imagina, o intenta recordar tal y como se lo contaron.

Lo importante es que no es un fiel retrato de los hechos que ocurrieron en realidad, pero sirven para que entendamos un poco más el carácter del anciano doctor. Vemos como pierde el que quizás fuera el amor de su vida, su querida Sara. En este momento Isak vuelve a recordar el amor que sentía por la mujer, y lo terrible que tuvo que ser perder a la persona que realmente quería. Algo que comenzó a forjar el carácter que llega a tener en el presente.

Por otro lado, tenemos el recuerdo de cuando su mujer le es infiel. Una escena en la que el doctor descubrirá la percepción que su mujer tenía de él. Lo hará a través de un intenso monólogo de culpa en la que su mujer le califica como un ser frío al que nada le importa. El desenlace de la escena acaba por determinar el castigo que sufrirá el doctor, la soledad. 

Smultronstället
Foto de IMDB

Fresas salvajes: El viaje exterior

En cuanto al viaje exterior, nos centraremos en el risueño grupo de jóvenes que viajan a Italia, en la ya adulta pareja casada, en la madre de Isak y en Marianne. Los primeros en llegar a la historia son el grupo de jóvenes, en especial la chica es la que más relevancia tiene en la autorreflexión que realiza nuestro protagonista. Justo después de recordar al amor de su vida, Isak y Marianne se encontrarán con este grupo de amigos.

La joven Sara

La jovencita llamada también Sara, será la viva imagen del joven amor del doctor, y le recordará mucho a ella. Ella va acompañada también de dos chicos jóvenes que presentaran el dualismo de ciencia frente a religión. Un interesante enfrentamiento que no se tocará demasiado, pero que se aúna en nuestro personaje protagonista, quien, a pesar de ser médico, y, por lo tanto, un hombre de ciencia, tuvo una educación católica. Por lo tanto, esos dos jóvenes es de cierta forma la división de nuestro protagonista.

La infeliz pareja

Durante el trayecto en carretera sufrirán un accidente que servirá para introducir a dos nuevos personajes en la historia, la pareja odiosamente casada. Estos dos adultos se odian, no paran de poner piedras en el camino del otro, se insultan, se tratan mal, en colusión, se repudian. Sin embargo, ambos siguen juntos, pero sin soportarse y teniendo una infeliz vida. Esto sirve de reflejo también para nuestro protagonista, quien no tuvo una vida matrimonial propia de los cuentos de hadas. Sin embargo, no es al único personaje al que le sirve de reflexión, también a Marianne se le removerán las tripas y los pensamientos planteándose su vida matrimonial. Si bien, desde el inicio ya se dejó entrever que esta tenía problemas con su marido.

La madre de Isak

Por otro lado, tenemos a la madre de Isak. La aparición de esta es un momento crucial en Fresas salvajes. Gracias a su presencia acabaremos de completar el puzle, y caeremos en la cuenta de por qué Isak es quién es y el porqué de su forma de ser. En esta escena, al igual que el espectador, Marianne también parece darse cuenta de lo mismo. Además, si nos fijamos bien cuando ella y el doctor entran por la puerta, la cámara no sigue a Isak (quien es el protagonista), sino que se queda mostrándonos la figura de Marianne. Se queda mostrándonos la persona que está también descubriendo a Isak durante el trayecto, y que le está acompañando en ese viaje interior mientras presencia su transformación.

Smultronstället
Foto de IMDB

La gran variedad de temas

Al comienzo hemos citado la gran variedad de temas que maneja Fresas salvajes, aunque algunos se dan en menor medida que otros. Entre los temas principales encontramos la muerte, la soledad, la vejez, el amor y la vida. Sin embargo, el conflicto religión y ciencia también está presente, pero se luce bastante poco.

Si recordamos bien, el filme se estrenó en 1957, año en el que Ingmar Bergman estrenó también otra de sus grandes obras, El séptimo sello. Si bien es cierto, ambas obras se asemejan parcialmente, pero toman enfoques distintos. Tanto en El séptimo sello, como en Fresas salvajes, la muerte es un tema que predomina. Sin embargo, ambas toman un enfoque distinto respecto al mismo tema.

Mismo tema, pero distinto enfoque

El séptimo sello se centra más en el temor a la muerte y a cómo llevar ese miedo. Esto hace que en la película nos acerquemos más a la religión como forma de suavizar el temor al fin de nuestros días. De esta forma el dualismo entre fe y ciencia está mucho más presenta en esta cinta del director.

Pero, por otro lado, en Fresas salvajes, Bergman sitúa a un hombre cercano a la muerte enfocando el tema como una mirada hacia la vida ya transcurrida. Isak tiene miedo a la muerte, o al menos eso refleja uno de sus sueños, pero no es el motivo principal de la cinta. No obstante, su larga vida hace que haya llegado el momento por el que supongo que tendremos que pasar todos, mirar hacia atrás y reflexionar sobre lo vivido.

Bergman se acerca de esta manera a la muerte de dos formas muy distintas, pero totalmente válidas e igualmente buenas. No obstante, en Fresas salvajes se trata también por el tema de la ciencia y la religión, un dualismo que da mucho para a hablar, pero que en este caso Bergman pasa rozando. La crisis existencial por la que pasa nuestro protagonista se refleja de algún modo en la gran cantidad de temas que se exponen, algunos de mejor forma que otros he de decir.

Smultronstället
Fotos de IMDB

La evolución en las road movies

Por lo general, en una road movie no solo se produce el viaje físico, este es solo una excusa para que nuestro protagonista o protagonistas evolucionen. Así es como en Little Miss Sunshine nuestros personajes parten de ser poco empáticos, algo egoístas y con bastante poca unión familiar, a pensar más en el otro y lograr la unión familiar esperada. O en Green Book donde Tony supera los prejuicios con los que comienza la película y se embarcará en un viaje en que le cambiará, pero no solo a él, también a Donald Shirley. Ambos personajes aprenderán el uno del otro modificando su comportamiento y forma de ser para ser mejores personas al finalizar el viaje.

Lo mismo ocurre en Fresas salvajes, sin embargo, mientras que en otras road movies la evolución por así decidlo viene marcada por factores físicos que se producen durante el trayecto. En la película de Bergman nuestro protagonista Isak encuentra las claves de su cambio en el pasado, mirando atrás a la vida que ha llevado. No obstante, también influyen algunos hechos externos comentados anteriormente como la pareja de jóvenes.

Por otro lado, Marianne si sufre más su propio cambio gracias a factores externos como la pareja infelizmente casada, y la propia madre de Isak que la hacen plantearse su vida matrimonial y cómo quiere criar a su hijo. La lograda evolución de los personajes se realiza gracias a lo comentado al comienzo, y es que Bergman desde el inicio deja perfilados con claridad los problemas de sus personajes. Cuando el viaje termina, el desenlace nos muestra que los personajes han cambiado notoriamente, ya no son los mismos que fueron al comienzo del trayecto, sobre todo Isak.

Smultronstället
Foto de IMDB

Conclusión de Fresas Salvajes

Fresas salvajes supone un film auténtico, brillante, reflexivamente potente, y con personajes increíbles. Tampoco podemos olvidar la magnífica fotografía de Gunnar Fischer con esos cambios de iluminación en escenas oníricas o esa preciosa toma de encuadres. Tampoco quiero dejar sin comentar los desconcertantes travellings o el increíble montaje del film.

Ingmar Bergman demuestra una vez más quién es y por qué lo es, un increíble director que obliga al espectador a reflexionar en cada uno de sus films. Una mente con increíbles historias que contar, y con grandes personajes que en este caso sufren una cuidada y magnífica transformación en sus arcos.

Una película terrenal y emocional que coloca una semilla en quién la ve. Un magnífico guion cuidado al detalle y una potente historia, algo que cada vez es menos frecuente en la actualidad.

"Las conversaciones suelen reducirse a comentar y censurar la manera de ser y el comportamiento del prójimo, y esto ha sido lo que me ha llevado a renunciar de manera rotunda a esa vida social."

Únete a nuestro CANAL DE TELEGRAM

CINEMAGAVIA
9,3/10
93 %
Artículo anterior"Murder Death in Koreatown": La fusión de los medios
Artículo siguiente"Skam Noruega", la serie sobre tópicos adolescentes
Javier Atienza
Estudiante de la Facultad Ciencias de la Información de la Universidad Complutense de Madrid. Nací el 7 de febrero de 2001 y actualmente estoy cursando el grado de Comunicación Audiovisual. Además, estoy de colaborador en el programa de radio Momentos de Cine en Inforadio. Aunque fui marcado de pequeño por la mano de Shyamalan y su sexto sentido para crear historias, no fue hasta mi adolescencia con la magia de Chazelle y su historia donde los sueños y el amor se entrecruzaban cuando algo despertó en mí. Ese algo fue la pasión por el cine, Shyamalan y Chazelle me dieron un pase a descubrir un amplio universo de historias, emociones, y cómo no, sueños. Fui pasando por Kubrick y Bergman hasta Tarkovski, descubriendo lo que la historia del cine tenía para mí, mientras germinaban mis ganas de trabajar en la industria. Por otro lado, Alejandro G. Calvo ha sido una de las razones por las que quise adentrarme en el mundillo de la crítica cinematográfica, la pasión que demuestra me hizo darme cuenta de que yo también quería tener la oportunidad de escribir sobre cine expresando la pasión que tengo por este mundo, devolviéndole al cine lo que tanto me ha dado. “No es a mí a quien le gusta el cine, sino el cine a quien le gusto yo” - Arrebato (1979)
fresas-salvajes-pelicula-criticaFresas salvajes supone un film auténtico, brillante, reflexivamente potente, y con personajes increíbles. Tampoco podemos olvidar la magnífica fotografía de Gunnar Fischer con esos cambios de iluminación en escenas oníricas o esa preciosa toma de encuadres. Tampoco quiero dejar sin comentar los desconcertantes travellings o el increíble montaje del film. Ingmar Bergman demuestra una vez más quién es y por qué lo es, un increíble director que obliga al espectador a reflexionar en cada uno de sus films. Una mente con increíbles historias que contar, y con grandes personajes que en este caso sufren una cuidada y magnífica transformación en sus arcos.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí