La última noche en Tremor es el nuevo thriller psicológico del creador y director Oriol Paulo (El inocente, Los renglones torcidos de Dios) para Netflix. Inspirada en el best-seller homónimo del autor Mikel Santiago, La última noche en Tremore Beach, se estrenó el 25 de octubre de 2024 en la plataforma Netflix.
Crítica de 'La última noche en Tremor'
Resumen
Ficha Técnica
Título: La última noche en Tremor
Título original: La última noche en Tremor
Reparto:
Javier Rey (Álex de la Fuente)
Ana Polvorosa (Judy Garmendia)
Guillermo Toledo (Leo Bazán)
Pilar Castro (María Vargas)
Carla Quílez (Bea de la Fuente)
Ana Wagener (Victoria Kauffman)
Jordi Catalán (Bruno de la Fuente)
Clara Segura (Ruth Calabria)
Nora Navas (Elvira)
Josean Bengoetxea (Isaak de la Fuente)
Carlota Olcina (Paula Valtierra)
David Bages (Peio)
Carme Pla (Viviana Pardales)
Año: 2024
Duración: 70 min.
País: España
Director: Oriol Paulo
Guion: Oriol Paulo, Jordi Vallejo, Lara Sendim. Novela: Mikel Santiago
Fotografía: Bernat Bosch, Albert Pascual
Música: Fernando Velázquez
Género: Intriga. Thriller
Distribuidor: Netflix
Tráiler de 'La última noche en Tremor'
Dónde se puede comprar la novela
- Santiago, Mikel (Autor)
Sinopsis
Un músico y compositor en crisis se recluye en un pueblo costero en el norte para terminar su última obra. Sus únicos vecinos en varios kilómetros a la redonda son un matrimonio que vive en la siguiente casa de la playa. Tras un grave accidente durante una tormenta, el protagonista comienza a sufrir unas espeluznantes visiones sobre sus vecinos. (Netflix)
Dónde se puede ver la serie en streaming
Suspense en la soledad costera
En La última noche en Tremor, Oriol Paulo teje una atmósfera de suspense psicológico con toques sobrenaturales en una miniserie de 8 episodios. La historia sigue a un compositor en crisis que se aísla en un remoto pueblo costero del norte para buscar inspiración, solo para encontrarse atrapado en un enigma con sus únicos vecinos: un matrimonio de aspecto amable que vive en la casa contigua. La premisa de Paulo utiliza un escenario ideal para una intriga pausada y de ambiente opresivo, cargada de simbolismo y preguntas sin respuesta.
La dirección de Oriol Paulo brilla en su enfoque por crear una atmósfera tensa y sugestiva. El entorno costero, filmado de manera sombría y gris, intensifica el aislamiento del protagonista y añade un tono nostálgico y melancólico a la narrativa. Las tomas de los acantilados, el océano embravecido y el sonido de las olas en la distancia dan a la serie un toque poético que acentúa el estado mental del protagonista. Paulo logra que cada rincón de la casa donde se desarrolla la acción parezca tanto un refugio como una prisión, aumentando la sensación de paranoia que envuelve la historia.
Sobriedad en la oscuridad
El protagonista, interpretado con sutileza por Javier Rey, logra transmitir la ansiedad de un artista en decadencia, consumido por su obra y obsesionado con sus inquietantes visiones. Ana Polvorosa, Guillermo Toledo y Pilar Castro, por su parte, mantienen una actitud ambigua que añade una capa de misterio, pues en cada escena parecen esconder algo sin revelarlo del todo. Las actuaciones se destacan en su capacidad de mantener al espectador en una constante duda sobre las intenciones reales de cada personaje. Aunque la interpretación es sólida, la falta de desarrollo en los personajes secundarios deja algunas interacciones poco convincentes.
De la expectativa a la dispersión
El ritmo de La última noche en Tremor es inicialmente cautivador, con un desarrollo lento que construye suspense de forma efectiva. Sin embargo, en los episodios centrales, la narrativa tiende a dispersarse, alargando algunos puntos de la trama y dejando de lado el progreso de la historia principal. Las visiones del protagonista, aunque impactantes al inicio, se vuelven repetitivas hacia el final, perdiendo parte del impacto original. La conclusión, aunque intrigante, deja algunas preguntas abiertas que no terminan de aportar claridad, lo que puede decepcionar a quienes buscan una resolución cerrada.
Conclusión de 'La última noche en Tremor'
La última noche en Tremor destaca visualmente, con una dirección atmosférica y actuaciones que logran construir un suspense constante. Sin embargo, la falta de enfoque en la narrativa central y la repetición de elementos debilitan el impacto de su conclusión. Para quienes disfrutan de un thriller visualmente cautivador y con un tono melancólico, esta miniserie es una experiencia recomendable, aunque quizá no logre mantener el interés hasta el final.
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