Madres llegó al catálogo de Amazon Prime Video el viernes 8 de octubre junto a 'The Manor' para poner punto y final al ciclo “Welcome to the Blumhouse”. Dirigida por el debutante Ryan Zaragoza, nos encontramos ante un thriller con tintes de terror escrito por Mario Miscione y Marcella Ochoa, y protagonizado por Ariana Guerra, Tenoch Huerta y Elpidia Carrillo.
Crítica de 'Madres'
Resumen
Ficha Técnica
Título: Madres
Título original: Madres
Reparto:
Elpidia Carrillo (Anita)
Tenoch Huerta (Beto)
Kerry Cahill (Enfermera Carol)
Ariana Guerra (Diana)
René Mena (Rafael Ernesto)
Jennifer Patino (Verónica)
Ashleigh Lewis (Enfermera Molly)
Robert Larriviere (Dr. Bell)
Betsy Borrego (Mujeres embarazadas)
Evelyn Gonzalez (Marisol)
Britton Webb (Hombre)
Joseph A. Garcia (Tomás)
Harlon Miller (Hombre)
Rachel Whitman Groves (Mujer)
Año: 2021
Duración: 83 min.
País: Estados Unidos
Director: Ryan Zaragoza
Guion: Mario Miscione, Marcella Ochoa
Fotografía: Felipe Vara de Rey
Música: Isabelle Engman-Bredvik, Gerardo Garcia Jr.
Género: Terror. Sobrenatural
Distribuidor: Prime Video
Tráiler de 'Madres'
Sinopsis
Una pareja mexicano-estadounidense que espera su primer hijo se muda a una comunidad agrícola migrante en la California de 1970. Cuando la esposa comienza a experimentar síntomas extraños y visiones aterradoras, intenta determinar si está relacionado con una maldición legendaria o algo más nefasto.
Dónde se puede ver la película
Ésta no es tu casa
“La creencia en algún tipo de maldad sobrenatural no es necesaria; los hombres por sí solos ya son capaces de cualquier maldad”. Que Madres arranque con esta cita del escritor Joseph Conrad resulta ser toda una declaración de intenciones. Como se ha demostrado en múltiples ocasiones, el cine de terror puede ser una herramienta muy efectiva para visibilizar y reflexionar sobre ciertos horrores del día a día. Atrocidades que dan mucho más miedo que un espíritu milenario acechando a la vuelta de la esquina.
Siguiendo la estela de cintas recientes como Déjame salir de Jordan Peele (también para la productora Blumhouse), el trabajo de Ryan Zaragoza vuelve a sacar a la palestra las tensiones raciales en Estados Unidos. Esta vez, basándose en los hechos reales acontecidos en una pequeña comunidad mexicana ubicada en la California de los años 70. Diana y Beto, una pareja de recién llegados, comienza a construir los cimientos de su nueva vida mientras esperan la llegada de su primogénito. Pero las cosas no son como esperaban...
Mientras que Beto comienza con ilusión su nuevo trabajo como capataz de una plantación, Diana trata de acostumbrarse a la vida lejos de su hogar. A pesar de su ascendencia mexicana, creció en Los Ángeles y nunca aprendió a comunicarse en español. Esto dará pie a una de las claves de la película: los intentos por conectar con sus raíces a pesar de la desconexión con su gente (imprescindible ver la versión original, pues esto se pierde totalmente con el doblaje al castellano). Además, la amenaza de una extraña maldición supondrá el punto de partida del misterio que amenaza el futuro de su bebé.
Los típicos tópicos
Madres es un thriller de terror en el que todos los clichés del género hacen acto de presencia: una mansión con pasillos tenebrosos, ruidos de ultratumba, puertas que se cierran solas, siniestras melodías infantiles provenientes de una vieja caja de música y un espíritu cuyas apariciones esconden tras de sí un oscuro secreto. Y no sólo se trata de lidiar con elementos vistos miles de veces, si no que además no consiguen estremecer al espectador en ningún momento.
Se agradece que la película se aleje del "jumpscare", pero ni el terror psicológico ni la paranoia que se apodera de Diana terminan de funcionar. De hecho, se da mucha más importancia a su investigación y los descubrimientos sobre la comunidad, donde los antiguos inquilinos de la mansión cobran protagonismo. Lo cual no sería ningún problema si no fuera porque ésta búsqueda de la verdad acaba dando demasiadas vueltas sobre sí misma. La sensación es la de que estamos ante un guion alargado artificialmente, haciendo que el tedio haga acto de presencia en varias ocasiones.
Aún con todo, el estilo de Ryan Zaragoza y la fotografía del film resultan muy elegantes, con una cámara que se mueve con sobriedad y un uso de ciertos recursos visuales que en ocasiones resultan bastante interesantes (obviando, eso sí, el horrible montaje de la escena en el registro). Pero sin duda, Zaragoza acaba perdiendo las riendas de una historia que daba para mucho más una vez se descubre toda la verdad.
Una realidad escalofriante
Sin entrar en spoilers, es imposible no estremecerse al llegar a la resolución del film. Cuando se muestran las monstruosidades que tuvieron que sufrir miles de personas, una mezcla de terror e indignación se apodera del espectador. Sin embargo, nos encontramos ante un clímax que se resuelve demasiado rápido y que, además de previsible, nos entrega toda la información bien mascada. Aunque el final funciona como homenaje a las víctimas, no pude evitar sentir que el material de partida se había desaprovechado en gran medida. Es cierto que, en líneas generales, Ryan Zaragoza no hace un mal trabajo y Ariana Guerra resulta muy convincente en su papel. Pero si no fuera por los hechos reales en los que se basa, el visionado de la película dejaría al espectador bastante indiferente.
Conclusión de 'Madres'
El verdadero valor de Madres reside en su valentía a la hora de visibilizar unos hechos escalofriantes ocurridos en la California de los años 70. El problema es que la realidad es mucho más aterradora que la ficción y la película no termina de funcionar ni como cinta de terror ni como thriller.
Por un lado, utiliza recursos que ya hemos visto miles de veces y, por el otro, el tedio hace mella en el desarrollo de un misterio que daba para mucho más. Es una pena, porque el director y el elenco muestran sus virtudes en varias ocasiones a lo largo del film. Con otro enfoque y un guion a la altura podríamos estar ante una gran película, pero no se puede vivir sólo de buenas intenciones.
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