Navidad loca Navidad (2019) ni merece la pena renombrar, es una comedia romántica navideña, de nacionalidad estadounidense, dirigida por Leslie Small y destinada a acabar con el género, sin ni siquiera exigir perdón.
Con un guion de preescolar de Cinemagavia, unos actores directos del SEPE americano y un director que por no salir, no sale ni en Wikipedia, estamos ante una cinta presuntamente navideña que convertiría a Sharknado (2013) en Tiburón (1975), del amigo Spielberg.
Producida por Poke Prod por encargo de Netflix, para ser distribuida mundialmente por la plataforma de streaming, el 28 de noviembre de 2019.
Ficha Técnica
Título: Navidad loca Navidad
Título original: Holiday Rush
Reparto:
Andrea-Marie Alphonse (Evie Williams)
Selena-Marie Alphonse (Gabby Williams)
La La Anthony (Paula Williams)
Deon Cole (Marshall Stone)
Tamala Jones (Joss Hawkings)
Año: 2019
Duración: 93 min
País: Estados Unidos
Director: Leslie Small
Guion: Sean Dwyer & Greg Cope White
Fotografía: Keith L. Smith
Música: Kathryn Bostic
Género: Romance
Distribuidora: Netflix
Rush (Romany Malco), un famoso locutor y DJ radiofónico, viudo y padre de cuatro hijos de......, es despedido ipso facto de su trabajo, en plena época de Navidad loca Navidad.
Con la ayuda de su representante (Sonequa Martin-Green) y la típica tía de los niños, habitual en casi todas las películas, deberá explicar a sus hijos que se ha acabado la lujosa vida que llevan, además de replantearse la suya propia.
Dónde se puede ver la película
¿Y qué les cuento?
Cuando todo está ya contado; es que no hay más, c´est fini, Navidad loca Navidad.
En fin, lo dicho; Un DJ local que parece el primogénito de Amancio Ortega por como viven, si lo supiera Kiko Rivera se mudaba, una representante como un tren de mercancías (por supuesto enamorada del pobre viudo), una adorable tía, cuatro niños más pijos que un Spa para perros, o sea super mega guays, un ex-jefe que le falta una marea, y la nueva accionista de la cadena radiofónica, que tiene de antagonista lo que yo de Bertín Osborne.
Los cuatro angelitos, que no entienden que es mejor reír en choza que llorar en castillo, como si nada hubiera pasado, la representante enamorada (Dios mío Brutus, perdón Sonequa, ¿tú también hija mía?) que no para de reír y reír, la tía que tiene sus ahorrillos y sus pretendientes (sus razones poderosas aún conserva), el hijo mayor que parece gilipuertas con el cuento de Harvard y un futuro proyecto para poner en pie una vieja emisora, previa venta de la mansión familiar.
Bueno, pues si mezclan todo esto, les sale Navidad loca Navidad; La aparición espontánea de vez en cuando de la esposa fallecida, el romance entre el DJ y el Gran Cañón del Colorado, la actuación estelar de la tía como si de Got Talent se tratase y un par de chorradas más, sin pies ni cabeza y habrá pasado la hora y media, en la primera película que he visto en mi vida que no tiene final, salvo el The End.
¿Pero y qué ha pasado con la vieja emisora que pretendíais poner en marcha?. La madre que me parió.
El DJ (Romany Malco), actor y sobre todo productor musical estadounidense; filmografía para rellenar berenjenas, aunque yo solo le recuerde una cinta con Jackie Chan, que mejor sobreseemos.
Sinceramente, no me cae mal el tipo, pasaba por allí y le dieron el confirming, ¿Quién diría que no?, pues cualquiera querido, un poquito de dignidad artística, que tampoco creo que tengas el caché de Dwayne Johnson. Me retiro antes de que me encienda.
La representante (Sonequa Martin-Green), esto es otro cantar, querida señorita de Alabama. Llevando a sus espaldas la experiencia televisiva que atesora; The Good Wife (2009-2011), The Walking Dead (2012-2018) y Star Trek: Discovery (2017-actualidad), ¿Cómo se mete en este pestiño, con miel o sin miel, madre mía?. Voy a pasar esto por alto, considerando que lo ha hecho para el fondo de alimentos de niños necesitados de Alabama, pero preciosa, una y no más Santo Tomás. Actriz a seguir.
El director (Leslie Small), sí un hombre, de color, alto y robusto. Con una tremenda experiencia televisiva y será muy amigo de Kevin Hart, pero querido Navidad loca Navidad es para prejubilarle y sin derecho a pensión.
No pienso repetir lo que dije la pasada semana en la crítica de la excelentísima El caballero de la Navidad (2019), porque sería un copia y pega y no me deja el ratón.
Paso de hacer leña del árbol caído, haga lo que quiera, si le siguen dejando.
Conclusión
Hasta yo me canso de leerme; o Netflix cambia la política de películas navideñas para personas con una única neurona o no sé yo el desembarco Disney, al menos en España, si le va o a pasar factura o no, seguramente no.
Cintas navideñas, de las que se ven a cientos y mejores, incluso en cualquier canal en abierto, debería hacer pensar a los cerebros de Netflix que el gato por liebre se come, pero hasta que uno se harta.
Y además queridos, un poco de prestigio a la plataforma; Es que para unas deposiciones como las últimas películas navideñas Netflix, sinceramente, ahorren para El Irlandés 2 o Roma 3, sin que ninguna sean santo de mi devoción.
En fin, como siempre, no voy a desaconsejar a la familia Netflixniana y acoplados que la vean, tampoco lo contrario. Allá ustedes, es gratis y dura 90 minutos y además, si de los 90 quieren ver 89 a la bellísima Sonequa Martin-Green riendo y riendo sin parar, como si le hubiese tocado el Euro-millón, pues eso que se llevan.
"Enhorabuena y Bienvenidos al Espectáculo"
Únete a nuestro CANAL DE TELEGRAM