La octava edición del festival de cine Cutrecon, echó el telón el pasado domingo, tras cinco días repletos de películas que, por uno o muchos motivos (muchísimos, diría alguien sensato) se hacen acreedoras de la etiqueta de cine cutre, cine que salta del cero al diez, hecho con un céntimo o millones, pues no atiende a lógicas numéricas. Ni de países ni involucrados. Solo hay un denominador común en todas ellas: Las risas (carcajadas) que provoca en el espectador.
La octava edición del festival de cine Cutrecon
Tal y como nos contaba Carlos Palencia en la presentación, este año la temática central del festival giraba en torno a los simios. Películas donde gorilas, chimpancés o primates divinos hacen de las suyas con las costuras mal rematadas. Nos esperaban películas como Queen Kong, La Venganza del Mono Sagrado, Yeti: El abominable hombre de las nieves o Suburban Sasquatch, entre muchas otras (20 en total). Y a por ellas que fuimos, con valentía y arrojo.
Resumen
- 1 La octava edición del festival de cine Cutrecon
- 1.1 Primera jornada de la octava edición del festival de cine Cutrecon
- 1.2 Segunda jornada de la octava edición del festival de cine Cutrecon
- 1.3 Tercera jornada de la octava edición del festival de cine Cutrecon
- 1.4 Cuarta jornada de la octava edición del festival de cine Cutrecon
- 1.5 Última jornada de la octava edición del festival de cine Cutrecon
Primera jornada de la octava edición del festival de cine Cutrecon
Paradójicamente, en la primera película que pudimos ver no aparecían simios ni parentescos. Tenia lugar la Bronsonfest, una mini-sección dedicada a Charles Bronson, tipo duro por antonomasia y rey de las muecas. Death Wish 3 (El justiciero de la Ciudad) nos lanzó a la cara el ultra fascismo más descarado (el divertido, no el otro), con Charlie repartiendo justicia en un lugar atestado de inmundicia. Las reacciones del público fueron continuas, a chascarrillo por segundo, haciendo alusión a la apariencia de tal o cual personaje, celebrando la ejecución de indeseables con un cono de helado en la mano, o conectando la guerra entre los taxistas y las VTC con la película (espectadores pegados a la actualidad, cultivados).
Y es que uno de los valores más importantes de este festival es la unidad que proporciona vivir juntos la experiencia, un sentimiento de hermandad donde el divertimento y la algarabía tejen un manto de comunión que va más allá de ver una simple película. Si no habéis tenido oportunidad de ver El Justiciero de la Ciudad, poned Paramount Channel, seguro que está ahora mismo. O mañana a más tardar. La hora es lo de menos.
Esa misma noche tuvimos la ocasión de conocer al clon húngaro de Charles Bronson, Robert Kovacs (Robert Bronzi en lo artístico), que cuenta con un parecido asombroso al original. Intentando hacer carrera entre Barcelona y Tabernas (Almería), conoció a René Pérez, guionista, productor y director estadounidense que, ensimismado con el parecido con Bronson, no dudó en ofrecerle trabajo al otro lado del Atlántico. Death Kiss es uno de ellos. Tuvimos la ocasión de verla en el propio festival un día después.
Segunda jornada de la octava edición del festival de cine Cutrecon
Como preludio a la noche más esperada, tuvo lugar la grabación del podcast Tiempo de Culto, con Paco Fox (responsable editorial de cine en Movistar +, co-director de Cinebasura: La pelicula y parte importante en la gestión del festival), Ángel Codón Ramos y Toni Rodriguez McGinty (co-presentador del podcast Cine por los Codos), donde analizan, discuten y divagan sobre los héroes de acción que han repartido con éxito y estilo (podéis escucharlo aqui).
El jueves contaba con el plato fuerte del festival. El pase de Street Fighter: La última Batalla por su 25 aniversario, con la presencia de su director y guionista Steven E. De Souza. Toda una leyenda en el género de acción de los 80 y 90, de cuyas manos salieron los guiones de Commando, Perseguido (Running Man), La Jungla de Cristal (I y II) y Juez Dredd, Tambien produjo El Coche Fantástico. Casi nada al aparato.
El hall del Palacio de la Prensa lucía estupendo para una velada tan especial. Recreativas de Street Fighter, figuras de colección, chapas, libros, y un photocall donde se agolpaban los fans para la foto con Don Steven.
Se le entregó el premio Sah-Di-A por su aportación al cine cutre, y colateralmente por toda una carrera de putoamismo. Amable, cortés y prolijo en hablar sin freno, compartió con nosotros varias anécdotas del rodaje (¡y regaló un Bisondolar!). Varias de ellas relacionadas con las aficiones lúdico-festivas de Van Damme. Y si, se cameló a Kylie Minogue. También supimos que esté cobró 7 millones y Raúl Juliá casi 5 (de un presupuesto de 33). El resto del reparto tuvo que conformarse con el mínimo establecido por el convenido de actores. Vamos, que quedaron tres pesetas y media para la producción en si.
Creo humildemente que la película tiene una buena base como cine de acción/aventura. Una trama sencilla pero eficaz, que va al asunto, alguna set-piece digna, a Raúl Juliá, pese a estar enfermo, y cierta similitud en las maneras con éxitos de su tiempo. De lo que no cabe duda es de que los lastres son muchos y de gravedad. La matraca por parte de Capcom de meter a todos los personajes posibles, el presupuesto, la situación de Juliá, el talento del reparto, ideas de bombero, y JCVD. Aún con todo, es muy disfrutable. Pregunten a cualquiera de los que estuvimos allí.
Después pudimos disfrutar de una explotación koreana de Street Fighter (Korean Street Fighter), que duraba 50 minutos aún siendo la mitad de ellos rótulos en pantalla presentando hasta a las rocas del paisaje. Personajes con pendulante mucosa en sus narices en todas las escenas, una historia tan hilarante como imposible, gritos, gestos, saltos y bizarradas a mansalva. Pudo ser una de las mas duras del festival, ¡y duraba 50 minutos!
Tercera jornada de la octava edición del festival de cine Cutrecon
Carrion Death, capítulo de la serie Historias de la Cripta escrito y dirigido por Steven E. De Souza, inauguraba el tercer día. Una obra altamente recomendable donde Kyle MacLachlan (Twin Peaks) las pasa canutas en el desierto.
Después, sesión de preguntas y respuestas con todos los invitados de esta edición. Los anteriormente citados De Souza y Robert Bronzi, Jeri Barchilon (esposa de Souza y productora de Street Fighter), Timon Singh (escritor que presentaba el libro oficial del festival, Born to Be Bad) y Pedro Temboury (Karate a muerte en Torremolinos). Público desbocado, ávido de anécdotas y curiosidades, y respuestas extensas, con sabor a enjundia, en un ambiente familiar y confortable. Curiosidad: El motherfucker que acompaña al mítico Yippee Ki Yay se lo debemos a Bruce Willis. El asshole del guión le parecía flojito.
Después pudimos ver el estreno de Death Kiss, vehiculo al servicio y lucimiento del doble de Charles Bronson, Robert Bronzi. No va mucho más allá que lo que supone ver a Bronson con un móvil en la oreja.
Para terminar la jornada del Centro Cultural La Casa del Reloj en Matadero, homenaje a Pedro Temboury con la proyección de Karate a muerte en Torremolinos. Película seminal del neo-cutrerio cinematográfico español. Segunda guerra mundial, ninjas, cannabis, monstruos marinos y ausencia total de vergüenza y dinero.
En la sesión golfa del Palacio de la Prensa, América 3000 (Cannon). Cine post-apocalíptico deliberadamente paródico (en parte al menos), donde las mujeres si que están empoderadas. Los hombres en cambio son unos simples que se conforman con cualquier chuminada (cinema verité). Sale un mono con radio cassette, razón suficiente para que cualquier cinéfilo de bien se la tire a los ojos. Recomendable para los que se adentran en el mundo de la mugre fílmica, no vayan a empezar con piezas hard tipo Ben & Arthur.
Cuarta jornada de la octava edición del festival de cine Cutrecon
Del sábado diurno destacaría Suburban Sasquatch. Amateurismo similar al del hijo de la Paqui, que anda con el móvil grabando cosas con sus amigos. Pero a lo analógico. Inexplicablemente fue editada en DVD, y de ahí al estrellato. Y con ahí nos referimos al jardín del director, que es prácticamente la localización principal. La leyenda del Bigfoot cobra un nuevo sentido.
La sesión de medianoche (Best Friends: Volumen 1) nos brindaba el regreso a las pantallas de Tommy Wiseau, perpetrador (a todos los niveles) de The Room, obra magna del cine con minúsculas. A su lado, su compañero en aquella, Greg Sestero, el listo de la pareja. Tuvo el detalle de mandar un afectuoso saludo en forma de vídeo (¡en vertical!) para todos nosotros. Y después, la magia. Una película con una factura técnica más que aceptable, el nulo talento interpretativo de Tom y Greg y el guion con más subrayados y reiteraciones de la historia del universo. Y aún así engancha.
Quizá tenga que ver la mezcla entre su bonita ejecución y líneas de dialogo absurdas, las transiciones con cancioncilla cada 5 minutos, la pureza de unos actores legendarios en lo suyo (creí intuir una mejora en Wiseau) o todo ello junto. Y un epílogo psicodélico que nos emplaza a ver el Volumen 2 (sin fecha de estreno en España pero disponible en DVD y Bluray allende los mares). Me quedé tan picuet que quiero verla AHORA.
Última jornada de la octava edición del festival de cine Cutrecon
Amanecía el ultimo día de la Cutrecon con la sección Documentrash, donde pudimos ver, en estreno europeo, el documental sobre la figura de Uwe Boll Fuck You All. Recorre de manera ágil y nada tendenciosa la carrera de uno de los directores peor considerados de los últimos tiempos, con cantidad de adaptaciones de videojuegos en su haber y extrañezas como Darfur, Auschwitz o Postal. El propio Boll sirve como hilo conductor de su propia historia, reflexionando (o no) sobre sus inicios, su forma de tomarse la profesión y sus catastróficos resultados a ojos de crítica y público.
Además, diversos colaboradores dan su versión del carácter y profesionalidad del alemán en perpetuo enfado. El documental definitivo sobre Boll. Y no porque sea el único (que lo es) si no por su pulso narrativo y la eficacia del planteamiento. Una trufa entre tanta putrefacción (en el buen sentido, ya sabéis).
Poco después, Timon Singh, nos presentó en calidad de productor el documental sobre héroes de acción de los 80 y 90 In search of Last Action Heroes, que consiguió financiar exitosamente en Indiegogo casi triplicando la cantidad inicialmente solicitada. Mario Kassar entrevistado. Para no perdérselo. Ver tráiler posterior:
Para cerrar el festival, maratón de cuatro películas en la sala Cero del Palacio de la Prensa. Discoteca los findes, cine con alcohol los domingos de Cutrecon (por primera vez se le puede dar al alpiste entre planos locos y actuaciones de rebajas). Primer puñetazo al estómago: Queen Kong, alegato feminista (¿o no?, ni los responsables lo saben) que fusila King Kong sin reparo, añadiendo números musicales y a un inglés de extrarradio siendo el juguete de las Liberated Ladies (sic). Se hace larga.
A continuación, La Venganza del Mono Sagrado, producción india made in Tollywood, la otra cara de Bollywood. Un señor con malaje quiere cambiar el templo sagrado de ubicación para sus aviesos fines, y a un chaval eso no le gusta un pelo. Él y el mismísimo Rey Mono intentarán hacer justicia. Efectos especiales muy llamativos (¡para bien!), colorines por doquier, ritmo esquizofrénico y mayor numero de palabras por segundo de todo aquel que abre el pico. Casi demente, el hecho de que descarrile una y otra vez sin que le importe es lo que le da realmente el sabor del disfrute. No apta para epilépticos.
Y aquí me bajé. Quedaban dos pelis más (El gorila ataca y El Apocalipsis del planeta de los simios), pero el cansancio hizo mella y no tuve más remedio que irme a mi casa. Quedé muy satisfecho con la Cutrecon que había vivido (mayor numero de espectadores alcanzado y mayor difusión a nivel nacional).
El año que viene (que pivotará sobre monstruos marinos), más y peor.
¡Plástico guay!