Tercera temporada de "Marcella": La policía amnésica, adopta una nueva identidad

Marcella es una serie policíaca creada por Hans Rosenfeldt (El Puente, Advokaten) y Nicola Larder (The Tunnel, Casualty) en 2016. La detective Marcella Backland es una agente de homicidios con graves problemas de control de su ira que le provocan lagunas mentales durante las que es capaz de traspasar los límites éticos de su profesión. En esta tercera temporada de Marcella, han transcurrido dieciocho meses tras los dramáticos sucesos del final de temporada anterior. Ha adoptado una nueva identidad y vive en Belfast, infiltrada en un clan mafioso, pero sus problemas psicológicos irán a más.

Está protagonizada por Anna Friel (Deep Water, Criando Malvas), Ray Panthaki (Gangs of London, Away), Amanda Burton, Michael Colgan, Aaron McCusker, Martin McCann, Kelly Gough y Hugo Speer. La tercera temporada de Marcella se ha estrenado en Netflix el día 14 de junio de 2020.

Crítica de la tercera temporada de Marcella

Ficha técnica

Título: Marcella

Reparto:
Anna Friel (Marcella Backland)
Ray Panthaki (DI Rav Sangha)
Aaron McCusker (Finn Maguire)
Amanda Burton (Katherine Maguire)
Kelly Gough (Stacey Barrett)
Hugo Speer (Frank Young)

Año: 2020
Duración: 45 min.
País: Reino Unido
Director: Ashley Pearce y Gilles Bannier
Guion: Hans Rosenfeldt (creador), Nicola Larder (creadora), David Allison, Tim Loane, Mike Walden, Emer Gillespie, Mathew Thomas y Paul Walters
Fotografía: Sam Care y Dirk Nel
Música: Lorne Balfe
Género: Suspense
Distribuidor: Netflix

Filmaffinity

IMDb

Tráiler de la tercera temporada de Marcella

Sinopsis

Dieciocho meses más tarde, Marcella ha adoptado una nueva identidad y vive en Belfast, donde se ha infiltrado en un clan mafioso como agente encubierta. (Netflix)

Donde se puede ver la serie

Infiltrada en un clan mafioso

Tras el explosivo final de la última temporada, estaba claro que habría un cambio de rumbo en la tercera temporada de Marcella. La detective borra sus huellas, abandona a su familia y hace creer a todo el mundo que está muerta. Era la única salida. Descubrimos que han pasado dieciocho meses desde la temporada anterior. Un tiempo en el que Marcella ha tocado fondo, ha vagabundeado sin rumbo y ha estado al borde del suicidio. Todo cambia cuando recibe una oferta y asume una nueva identidad para trabajar como agente infiltrada. Marcella Backland se convierte en Keira Devlin. Se ha teñido el pelo de rubio, pero aún conserva las cicatrices en su rostro de un pasado que deberá ocultar en un rincón de su memoria.

La acción de la serie se traslada de Londres a Belfast. Al inicio del primer episodio ya nos meten de lleno en plena misión de la agente Marcella-Keira. Se las ha ingeniado para ser parte de una familia de mafiosos que controla los barrios más desfavorecidos y tienen contactos dentro de la policía y del mundo político. Su misión es acabar con la familia.

Sorprende ese inicio abrupto en el que apenas se explica como ha llegado hasta ahí. No será hasta el capítulo 6, cuando a través de un largo flashback, donde se nos contará el periplo de la transformación de Marcella a Keira. Para mi gusto, es una explicación innecesaria en el momento que llega y debería haberse efectuado al inicio de la temporada.

Una nueva identidad, los mismos problemas mentales

Keira es una mujer que se ha desconectado completamente de Marcella. Para ella es una nueva personalidad que va más allá del simple cambio de nombre y de color de pelo. Si hay algo que caracterizaba a esta agente de policía, era su inestabilidad mental que le provocaba colapsos donde perdía la memoria y podía convertirse en alguien violento. El trastorno mental de la policía se lleva en la tercera temporada de Marcella aún más lejos. Con indicios de esquizofrenia, la protagonista empezará a recordar quien era antes y eso le provocará algunos episodios donde se le cruzarán los cables.

En cuanto al estilo de la serie, es semejante a las temporadas anteriores. El género policíaco se coloca al mismo nivel que el drama personal, aprovechándose de la generosidad escénica de la actriz Anna Friel. Gran parte de la acción sucede en el interior de la casa del clan mafioso, lo que a veces resulta un poco cansino. No siempre funcionan las relaciones interpersonales y cuesta entender la confianza que le depositan, más allá de la atracción física que sienten los hermanos por ella. Un recurso que me parece demasiado fácil.

La tercera temporada de Marcella sigue siendo entretenida y el personaje principal suficientemente potente para mantener nuestra atención durante los 8 capítulos. Sin embargo, la sensación global que deja es que se ha bajado un poco el listón respecto a las dos temporadas anteriores. La intriga escasea y los derroteros que toma la historia ofrecen pocas sorpresas.

Listado de episodios (Tercera temporada)

Episodio 8

Dirigido por Ashley Pearce (Broken, Downton Abbey).
Escrito por David Allison (Bedlam, Trust me).
Historia de Hans Rosenfeldt (El Puente, Advokaten).

Tras sufrir una ausencia, Marcella no consigue explicar lo del cadáver. Jack decide averiguar por su cuenta por qué sigue en Belfast el inspector Sangha.

Conclusión de la tercera temporada de Marcella

La tercera temporada de Marcella sigue combinando el género policíaco con el drama psicológico. La policía ha cambiado de identidad y de imagen, ahora se hace llamar Keira Devlin. Trabaja como agente infiltrada en un clan mafioso, intentado hallar pruebas para incriminar a toda la familia. El trabajo mantiene su estabilidad mental a raya, pero a medida que avanzan los capítulos, las cicatrices del pasado van apareciendo y le hacen dudar de quien es realmente. Las lagunas que le provocaban amnesia en las dos primeras temporadas, aquí le llevan hacia un grave trastorno de personalidad disociada.

Marcella es una serie que basa todo su poder de seducción en la fuerza del personaje protagonista y en la entregada interpretación de Anna Friel. En esta tercera temporada, la historia nunca resulta apasionante y hay menos intriga que en las temporadas anteriores. El convertir la casa del clan mafioso en el escenario principal, le resta movilidad a la investigación y tampoco resulta lo claustrofóbica o angustiosa que hubiera sido necesario para multiplicar la emoción. Resulta difícil entender la confianza que tienen los mafiosos con ella hasta el punto de dejarle tomar decisiones familiares importantes. Es algo que le resta bastante credibilidad a la acción. Pese a todo, esta tercera temporada te gustará si eres aficionado al personaje de Marcella.

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