Una noche (Une nuit) es la nueva película de 2023 dirigida por el también actor y guionista Alex Lutz (Vortex). Una mujer empuja accidentalmente a un hombre en el metro, comenzando a discutir y convirtiéndose posteriormente en una relación de pasión entre ellos. Presentada en el 29 Festival de Cine Francés en Málaga.
Crítica de 'Una noche (Une nuit)'
Resumen
Ficha Técnica
Título: Una noche
Título original: Une nuit
Reparto:
Karin Viard (Nathalie)
Alex Lutz (Aymeric)
Jérôme Pouly (club de swingers masculinos)
Noémie De Lattre (Club de swingers femeninas)
Kenza Fortas (El jefe del club de swingers)
Nicole Calfan (La mujer del caballo)
Año: 2023
Duración: 91 min.
País: Francia
Director: Alex Lutz
Guion: Hadrien Bichet, Alex Lutz, Karin Viard
Fotografía: Éponine Momenceau
Música: Vincent Blanchard
Género: Drama romántico
Distribuidor:
Tráiler de 'Una noche (Une nuit)
Sinopsis
París, metro abarrotado, una tarde como cualquier otra. Una mujer empuja a un hombre, discuten. Rápidamente, la crispación se transforma en… deseo ardiente. Los dos desconocidos salen del tren y hacen el amor en un fotomatón. La noche ya es suya. En este París de calles desiertas y largas horas, ¿tendrán que despedirse?
Dónde se puede ver la película en streaming
Del metro al fotomatón
Una noche (Une nuit), es la última película del guionista, actor, humorista, dramaturgo y director francés Alex Lutz, realizada en 2023. Fue ganador del Premio César al Mejor Actor en 2019 por su interpretación en Guy, donde también era guionista y director. La mayor parte de la trama centra la acción y el tiempo sobre la pareja protagonista.
Nathalie (Karin Viard) y Aymeric (Alex Lutz) son dos personas desconocidas que tienen un muy desafortunado encontronazo dentro de un vagón del metro en París, que lejos de resolverse pacíficamente se encona yendo a más. Ante la mirada atónita de los demás pasajeros, el cruce de palabras de reproche entre ellos dos va a más con riesgo de acabar muy mal. Sin embargo un insólito giro a partir de una idea original de Alex Kutz en el guion desarrollada por Hadrien Bichet, Karin Viard y el propio director, hace que Nathalie y Aymeric acaben teniendo sexo dentro de la reducida cabina de un fotomatón.
Desvelada por la sinopsis así como por el tráiler éste sorprendente desenlace, la trama desarrollada por el argumento se convierte en un largo y permanente diálogo entre los ahora amantes repentinos. Durante su continua conversación mantenida a lo largo de las horas de la noche, les da tiempo para hablar casi de todo, desde lo humano a lo divino, sin dejar apenas temas fuera de su extenso repertorio verbal.
El juego del amor y el azar
A partir de una idea del guionista y director Alex Kutz, se establece el eje sobre el que gira dando vueltas una y otra vez la relación de la ahora pareja circunstancialmente surgida. Los guionistas han elaborado un diálogo permanente, introduciendo temas muy diversos con cambios de ritmo, que van desde el desacuerdo hasta la coincidencia de sus opiniones, creando una dinámica de acercamientos y distanciamientos emocionales entre los miembros de la pareja.
La idea principal siendo original, sin embargo es difícil de desarrollar durante esos noventa minutos por el a veces excesivo parloteo, que a algunos espectadores puede llegar a cansar o incluso aburrir. Aunque vayan cambiando de escenarios, siempre nocturnos, se aprecia un esfuerzo continuado del trío guionista por poner variedad, en los estados emocionales y contextos, para hacer más ligera la película. En algunas secuencias también añaden como ingredientes suaves pinceladas de humor francés, para amenizar y distender la parte dramática de ésta comedia.
Una noche (Une nuit) es muy de autor, navega sobre las opiniones, sentimientos y personalidades muy distintas de sus dos protagonistas principales. Alrededor de ellos ocasionalmente hay otros personajes secundarios, como fondo y contraste de la pareja. En el trasfondo de Una noche (Une nuit) está permanentemente la soledad de las personas, sus necesidades de afecto y ternura, por lo que la película apunta tenuemente al existencialismo.
Nathalie y Aymeric, son dos adultos maduros desvalidos que se necesitan desde su inseguridad personal y falta de autoestima, aunque sus comportamientos lo traten de disimular una y otra vez.
Ritmo irregular con trama asimétrica
Las interpretaciones de ambos protagonistas son correctas, destacando conocida actriz francesa Karin Viard. El interés de Una noche aumenta cuando más allá de la excesiva verbalización de los dos solitarios, intervienen otros personajes. La fotografía nocturna de Éponine Momenceau acentúa la carga dramática de éstos dos náufragos solitarios vinculador para huir de las soledades que sienten en sus vidas personales.
Mientras tratan de consolarse en el apego, filosofan sobre la vida y sus circunstancias, e incluso elucubran sus teorías sobre el amor y la pareja, aunque de manera fugaz y superficial. Una secuencia agradecida es la de la cena en un restaurante, donde juegan a fantasear nombres, profesiones y vidas de los otros comensales. Al igual que otra en un local de sexo liberal, con una simpática pareja de intercambios, Jérôme Pouly y Noémie De Lattre. Con éstas dos secuencias la película sale de la excesiva verborrea de la pareja protagonista, pudiendo como espectadores sentir aire fresco.
Una noche (Une nuit) tiene altibajos de interés, lastrada por la insuficiente dosificación entre diálogos a solas de Nathalie y Aymeric y otras secuencias más abiertas, que afortunadamente aligeran la trama de la acción con más protagonistas. Siendo irregular en el ritmo y equilibrio, además hay alguna secuencia que queda difusa y confusa, como la del hospital, que encaja de manera rara en el conjunto de la película.
Por ello concluimos que Una noche es una película interesante en su propósito pero descompensada pudiendo haber tenido un mejor resultado corrigiendo las limitaciones comentadas anteriormente.
Conclusión de 'Una noche (Une nuit)'
Una noche (Une nuit), la última película del actor, guionista y director francés Alex Lutz, desarrolla una idea original suya, sobre el encuentro accidental conflictivo entre un hombre y una mujer en el metro de París. Tras el encontronazo acaban teniendo sexo y da comienzo una larga relación nocturna de conversaciones sobre todo tipo de temas, filosofando y hablando de ellos mismos.
La soledad, insatisfacción afectiva y personal y debilidad emocional, les une buscando un vínculo que palie sus carencias e inseguridades.
Película con altibajos e irregular, con algunas partes más interesantes, especialmente en las secuencias abiertas a otros personajes y escenarios.
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