El éxito de Marvel en el cine ha cambiado algunas cosas de cara a extraer inspiración para crear producciones de éxito. En el fondo, es como si la respuesta siempre hubiese estado ahí. Personajes que ya existen y que un inmenso público ya los conoce, tramas que ya están en marcha… ¿por qué no llevarlas al celuloide? Se trata de inyectar una buena cantidad de dinero, buscar estrellas y buenos profesionales y conectar unos títulos con otros. Vale, tal vez no sea tan simple, si lo pensamos bien… pero el filón ha estado siempre ahí. A continuación, hablaremos de los videojuegos como la filmografía que se consolida.
La generación de la Playstation
Los cómics han formado (y forman) parte del ocio de una o varias generaciones. Pero también ocurre con los videojuegos. Esa fuente de inspiración para explicar historias que ya existen en las consolas y los ordenadores y que tienen un enorme público potencial no es nueva; pero como ocurrió con Marvel en décadas pasadas, los primeros experimentos fueron decepcionantes. Algunas de las primeras adaptaciones, como Street Fighter o Mortal Kombat, los juegos que estaba en boga en ese momento, fueron estrepitosamente malas, sólo orientadas a aprovechar el tirón de la fama de estos títulos.
Faltaban algunos años para que la saga de Tomb Raider y la de Resident Evil aparecieran para aportar algo de calidad a las producciones basadas en videojuegos. El pasado más reciente ya se ha encargado de cuidar los productos que han ido surgiendo paulatinamente; algunos ejemplos de ello han sido Assassin´s Creed (2016), el remake de Tomb Raider de 2018 (con Alicia Vikander) o la prometedora Uncharted, programada para el año que viene. Y, hasta aquí, sólo hemos hablado de los videojuegos más comunes.
Los eSports entran en acción
Los eSports un sufrido una importante eclosión en los últimos años a propósito de el éxito de audiencia de sus torneos. Hasta 4 millones de personas llegaron a seguir la final del “LOL Worlds 2021”, el campeonato mundial del título League of Legends (LOL), probablemente el videojuego insignia de los eSports. Esta modalidad profesional y competitiva ha atraído la atención de muchos espectadores y se ha convertido en una potencial fuente de inspiración para el mercado audiovisual.
Precisamente en el mundo de LOL está ambientada Arcane, la nueva serie de Netflix que ha tenido una gran aceptación por parte del público. Recientemente os hablamos de ella y debemos decir que ya son muchas las valoraciones de distintas webs, como IMDb, que la están situando como uno de los mejores productos de los últimos años. Su calidad es excelente, y consigue mantenernos atentos a todo lo que ocurre. En la actualidad ya se está realizando una segunda temporada que podría lanzarse a principios del 2023. Arcane es un buen ejemplo de cómo aprovechar un universo con personajes conocidos para atrapar al espectador y crear distintas tramas interesantes.
Futuros proyectos
Ben Wheatley, el director de títulos de acción como “Free Fire” o “Kill List”, también parece interesado en sacar rédito del auge de los videojuegos para inspirarse de cara a sus próximas producciones y aprovechar el tirón de cara a obtener una buena taquilla.
El realizador parece dudar entre realizar un film basado en Doom o en Couter-Strike; la primera de las opciones podría estar bastante trillada por las anteriores adaptaciones de 2005 y 2019, en cambio, CS:GO es un título que se encuentra en auge en el universo de los eSports, con un torneo reciente que atrajo a un gran número de espectadores y con gran repercusión en diferentes ámbitos, desde las redes sociales a las webs de apuestas de eSports, un fenómeno cada vez más en boga gracias a portales como Rivalry, que tienen un departamento dedicado al Counter-Strike, como a otros videojuegos, y donde los aficionados pueden observar la progresión de los equipos en los respectivos eventos.
Así pues, aunque Wheatley está hoy inmerso en otros proyectos, como la secuela de “Megalodón”, no es descartable que inicie una pre-producción basada en la historia de este juego tipo “shooter” y estratégico que puede dar un buen juego para una historia de acción.
Evidentemente, todos estos sofisticados proyectos no van a hacer que desaparezcan otros productos más “ligeros”, como los dedicados a Pokémon o al personaje de Sega, Sonic. El universo de los videojuegos es ecléctico y da para muchas ideas, y títulos para todos los gustos. Pero, al menos, hoy se alternan lanzamientos de poca profundidad con otros de mejor factura; no como en los años 90, donde sólo teníamos acceso a mediocres realizaciones que dejaban sin explotar un potencial inimaginable.
Únete a nuestro CANAL DE TELEGRAM
