Ambientada en la ciudad de París en 1941, justo en plena Segunda Guerra Mundial, nos encontramos ante un grupo de personajes que transmite una humanidad que traspasa la pantalla. Adiós, señor Haffmann es una historia cercana y emotiva, que se tornará en inolvidable. La película ha sido dirigida por el cineasta Fred Cavayé (Cuenta atrás, Manual de un tacaño, Cruzando el límite, Mea culpa...), y está protagonizada por un trío de actores de auténtico lujo como Daniel Auteuil, Gilles Lellouche y Sara Giraudeau. Estrenada el 25 de marzo de 2022 en salas de cine españolas.
Crítica de 'Adiós, señor Haffmann'
Resumen
Ficha Técnica
Título: Adiós, señor Haffmann
Título original: Adieu Monsieur Haffmann
Reparto:
Daniel Auteuil (Joseph Haffmann)
Gilles Lellouche (François Mercier)
Sara Giraudeau (Blanche Mercier)
Nikolai Kinski (Comandante Jünger)
Anne Coesens (Hannah Haffmann)
Mathilde Bisson (Suzanne, la amiga de Jünger)
Claudette Walker (Mme Rosenberg)
Frans Boyer (Policía)
Año: 2021
Duración: 115 min.
País: Francia
Director: Fred Cavayé
Guion: Fred Cavayé, Sarah Kaminsky. Diálogos: Fred Cavayé, Sarah Kaminsky. Obra: Jean-Philippe Daguerre
Fotografía: Denis Rouden
Música: Christophe Julien
Género: Drama
Distribuidor: Vértigo Films España
Tráiler de 'Adiós, señor Haffmann'
Sinopsis
François Mercier es un hombre corriente que sólo quiere formar una familia con la mujer que ama, Blanche. También es empleado de un talentoso joyero, el señor Haffmann. Pero ante la ocupación alemana, los dos hombres no tienen más remedio que llegar a un acuerdo cuyas consecuencias, a lo largo de varios meses, cambiarán el destino de los tres personajes. (Vértigo Films España)
Dónde se puede ver la película en streaming
La tensión silenciosa de Cavayé
Adiós, señor Haffmann, dirigida por Fred Cavayé, es una exploración sombría y profundamente humana de las difíciles decisiones y sacrificios en el París de 1942, cuando la ocupación nazi pone a prueba la lealtad y el coraje de sus personajes. François Mercier es un hombre común con aspiraciones simples, que se verá atrapado en una relación compleja y ambigua con su empleador, el joyero judío Joseph Haffmann. El acuerdo que ambos concluyen en un intento desesperado por salvarse en un contexto de opresión y miedo va mucho más allá de lo pactado, con consecuencias emocionales y morales que alterarán la vida de todos los involucrados.
Fred Cavayé, reconocido por su habilidad para crear tensión sin artificios, maneja con maestría los temas de opresión y moralidad a través de un enfoque pausado y atmosférico. La dirección se centra en la sutileza de las emociones, con largas tomas que capturan la angustia y el peso de las decisiones de cada personaje. Cavayé construye un ambiente claustrofóbico en el taller de joyería, utilizando el espacio limitado para reflejar la represión de sus protagonistas. Aunque algunos podrían encontrar el ritmo un poco lento, esta cadencia permite una inmersión gradual en las tensiones psicológicas, un aspecto esencial para capturar el impacto emocional de los tiempos oscuros que enfrentan.
Profundidad y complejidad en cada personaje
El reparto ofrece interpretaciones sobresalientes, especialmente Daniel Auteuil como el señor Haffmann, cuyo semblante refleja el desgaste de la incertidumbre y la vulnerabilidad. Daniel Auteuil entrega una actuación contenida y precisa, lo que permite al espectador conectar con su desesperación y su resiliencia en circunstancias adversas. Gilles Lellouche también destaca como François, quien evoluciona de un hombre común a alguien marcado por decisiones moralmente complejas. Sarah Giraudeau, en el papel de Blanche, aporta una sensibilidad esencial, convirtiéndose en el eje emocional que sostiene la trama. La química entre el trío añade tensión al relato, permitiendo al espectador comprender las dinámicas de poder y dependencia que moldean sus relaciones.
Una recreación de época con detalle e inquietud
La cinematografía en tonos apagados y fríos logra capturar la atmósfera de el París ocupado acentuando la sensación de vigilancia y peligro constante. El diseño de producción y los vestuarios de época son notables, transportando al espectador a un tiempo en el que cada detalle refleja una sociedad atrapada en la vigilancia y el miedo. La música es sutil, complementando sin sobrecargar la narrativa; son los silencios y los diálogos lo que realmente lleva el peso de la tensión en esta película. La ambientación logra involucrar al espectador en un mundo donde las decisiones cotidianas pueden tener repercusiones trágicas.
Conclusión de 'Adiós, señor Haffmann'
Adiós, señor Haffmann es una película que va más allá de la narrativa de la ocupación nazi para explorar temas universales de moralidad, lealtad y supervivencia. Fred Cavayé logra un equilibrio entre el drama personal y el contexto histórico, entregando un relato íntimo y resonante sobre la naturaleza humana en tiempos de opresión. Este drama histórico ofrece un estudio profundo y doloroso de personajes complejos en situaciones extraordinarias, convirtiéndose en una exploración emotiva de cómo la guerra moldea y revela las profundidades de quienes la enfrentan.
Reportaje de Adiós, señor Haffmann en Días de Cine TVE
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