Vampira humanista busca suicida (2023) se trata de la opera prima de Ariane Louis-Seize, está interpretada por Sara Montpetit (quien la pudimos ver recientemente en Falcon Lake) y Félix Antoine Bénard. En España pudo verse el año pasado en Sitges, mientras que en Estados Unidos lleva en carteleras desde el 21 de junio de este año.
Crítica de 'Vampira humanista busca suicida'
Resumen
Ficha Técnica
Título: Vampira humanista busca suicida
Título original: Vampire humaniste cherche suicidaire consentant
Reparto:
Sara Montpetit (Sasha)
Félix-Antoine Bénard (Paul)
Steve Laplante (Aurélien, padre)
Sophie Cadieux (Georgette, madre)
Noémie O'Farrell (Denise)
Lilas-Rose Cantin (Sasha, 6 años)
Arnaud Vachon (Henry)
Marie Brassard (Victorina, tía)
Madeleine Péloquin (Sandrine)
Gabriel-Antoine Roy (J.P.)
Isabella Villalba (Mélissa Bessette)
Patrick Hivon (M. Goyette, Phys. Ed. maestro)
Marc Beaupré (Rico-Berlingot, clown)
Año: 2023
Duración: 90 min.
País: Canadá
Director: Ariane Louis-Seize
Guion: Christine Doyon, Ariane Louis-Seize
Fotografía: Shawn Pavlin
Música: Pierre-Philippe Côté
Género: Comedia de Terror
Distribuidor:
Tráiler de 'Vampira humanista busca suicida'
Sinopsis
Sasha es una vampira adolescente demasiado bienintencionada para matar a nadie. Cuando sus padres dejan de proveer la sangre, se ve forzada a tomar una decisión drástica: proponerle a Paul, un joven suicida, que le ayudará a cumplir sus últimas voluntades si le deja beber su sangre. Sin embargo, nada será tan fácil en esta comedia vampírico-romántica independiente que funciona como una versión teen de Sólo los amantes sobreviven. (Sitges 2024)
Dónde se puede ver la película en streaming
In the Shadows en Montreal
Dicen las malas lenguas que Montreal es la zona más francesa del mundo francófono. Qué son más papistas que el papa. Y su cine a veces parece certificar dicha frase. En este caso, nos encontramos con una deconstrucción del mundo vampírico, una fórmula ya clásica de la posmodernidad (valga la contradicción), tal y como sucedía en Lo Qué hacemos en las sombras de Taika Waitiki. Pero mientras en aquella película veíamos el día a día de los vampiros en una sociedad contemporánea y como debían afrontar los problemas cotidianos, en esta ocasión Vampira humanista busca suicida tira en parte hacía una falsa pretenciosidad, en la que el ser y el estar tienen mucha importancia. Para que se hagan una idea, ahora que está Inside Out 2 en todo su apogeo...¿Se acuerdan de Innui? Pues esa es nuestra protagonista.
Sara Montpetit, que toca de nuevo el género después de Falcon Lake (una película también muy quebequiana) interpreta a una vampira que tiene remordimientos o mejor dicho, que tiene conciencia. Y es que en el imaginario colectivo, los vampiros son siempre seres maléficos que se dejan llevar por el instinto. ¿Qué pasaría si uno de ellos tuviera consciencia de sus propios actos desde un punto de vista moral?
Una Primera parte interesante
Así Vampira humanista busca suicida arranca con un primer tercio genial, que para un servidor cree que es con el que se ha quedado la crítica, obviando los otros dos tercios muchos más mediocres. En esta primera parte la película nos presenta al personaje de Sara Montpetit, una muchacha que parece sacada de un show canadiense que emula a la serie de Netflix Miércoles, con sus toques emos incluidos. La relación con su familia es la misma que la de cualquier adolescente: Conflictiva. Las similitudes entre la incomprensión de esta familia y la de cualquier hijo de vecino son bastante cómicas, bien explotadas por un guion disfrutón. Sin embargo, la comicidad que puede crear estas primeras secuencias, que se asientan sobre en los malentendidos familiares con la pátina vampírica, queda empañada por un nudo mucho más repetitivo.
El coming of age forzado
Así, Vampira humanista busca suicida nos presenta un personaje con el que la protagonista debe hacer tándem, interpretado por Félix Antoine-Bénard, que siendo humano, comparte con nuestra vampira numerosas facetas, y así la película acabará derivando en una obra romántica adolescente, con sus muchas particularidades, pero con una trama que no acaba de arrancar nunca. Y es que los obstáculos que deben superar ambos para poder acabar aceptando su madurez siguen el mismo esquema y no son demasiado excitantes. Y ahí Vampira humanista busca suicida encuentra un muro que no sabe como superar.
Resaltar eso sí, que pese a ser una opera prima, la película tiene una puesta en escena muy eficiente, con una fotografía que además sabe captar muy bien la oscuridad, elemento clave en una película de vampiros.
Conclusión de 'Vampira humanista busca suicida'
Vampira humanista busca suicida es hija de nuestra época. Una película fresca, que intenta deconstruir el género vampírico para ofrecer nuevas perspectivas pero acaba encajonada por un guion que no sabe como rematar la faena. En definitiva, una oportunidad perdida.
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