"La llamada": La ascensión de María

Hablar de La llamada es hacerlo de uno de los musicales más icónicos en España en los últimos años. El que fuera el primer éxito profesional de Javier Ambrossi y Javier Calvo, conocidos como Los Javis, vuelve en el 2021 para continuar con el fenómeno que ha supuesto en el panorama teatral. No es extraño que los espectadores sigan acudiendo al Campamento La Brújula, dado que acumula multitud de galardones, como los 14 premios Broadway World. Por lo cual, ha consolidado su posición en la industria teatral, siendo uno de los míticos títulos en el Teatro Lara y para la producción de Suma Latina.

Crítica de 'La llamada'

Ficha Técnica

Título: La llamada
Título original: La llamada

Reparto:
Nerea Rodríguez (María)
Andrea Guasch (María)
Angy Fernández (Susana / María)
Lucía Gil (Susana)
Marta Sango (Susana)
Roko (Milagros)
Erika Bleda (Milagros)
Neus Sanz (Madre Bernarda de los Arcos)
Mar Abascal (Madre Bernarda de los Arcos)
Paco Arrojo (Dios)
Richard Collins Moore (Dios)

Jaime Vaquero (Batería)
David Chamizo (Batería)
Nino (Batería)
Rubén Tajuelo (Guitarra)
Sergio Flecken (Guitarra)
Sergio Marqueta (Teclado)
Víctor Elías (Teclado)
Daniel Pedregal (Teclado)
Ángel Herranz (Bajo)
Ismael Prado (Bajo)
Gonzalo Muratel (Bajo)

Duración: 120 min. apróx.
Dirección: Javier Ambrossi y Javier Calvo
Dramaturgia: Javier Ambrossi y Javier Calvo
Escenografía: Ana Garay
Escenografía e iluminación: David Minguez
Vestuario: Ana López Cobos
Sonido: Alberto Martín y Juan Guedes
Coreografía: Noemí Cabrera y Ana del Rey
Compositor: Alberto Jiménez
Regiduría: Gemma Galán
Auxiliar de regiduría: Alicia Calderón
Coordinación de producción: Inés López
Auxiliares de producción: Álex Jaén, Marina Fernández, Ricardo Caulin y Juanfran García
Arte gráfico: Dowylo
Género: Musical
Producción: Suma Latina Producciones

Tráiler de 'La llamada'

Sinopsis de 'La llamada'

Un clásico millenial

Han pasado ya más de 7 años desde que Javier Ambrossi y Javier Calvo llegasen a las tablas del Teatro Lara para representar la obra de teatro La llamada. Después de varias temporadas, sigue siendo uno de los buques insignia del famoso espacio teatral madrileño. Como se ha comentado en un critica anterior, la historia que hace de este título una fórmula que perdura en el tiempo es el tratamiento de la juventud y de la búsqueda vital a través de la comedia y de introspección luminosa. De esta manera, se muestra la clarividencia de una joven sin un futuro claro, que se torna en un camino hacia el descubrimiento de aquello que siente. Con lo cual, la intención de la obra es reivindicar la necesidad de luchar por los sueños, incluso en momentos en los que fallar puede ser una posibilidad totalmente plausible.

Los personajes también tienen en sí mismos un carácter atemporal, pero que, además, adquieren un significado distinto, según quien sea la persona que interprete a sus personajes. Aun así, el ADN de cada uno de ellos está totalmente claro, bebiendo sobre referencias de una generación marcada por Juan Magán, el reggaeton y las fiestas desinhibidas. En el otro lado, se configura una ambientación totalmente diferente, con un campamento de monjas. De esta forma, Los Javis consiguen de la hilaridad y lo extremo, hacer una aventura energética de la identidad, en la que se disfruta de lo que hay detrás de cada una de las motivaciones. Sin embargo, hay momentos en los que se abusa un tanto de la referencia, encauzándose sobre todo a un tipo de público específico. Por lo tanto, ese carácter alternativo de chonismo ilustrado puede no fluir siempre de una forma orgánica, aunque triunfa en varios momentos.

Nuevas caras, nuevos aires

Durante el montaje de la obra La llamada, del 26 de diciembre de 2020, las encargadas de dar vida a María Casado y Susana Romero fueron Andrea Guasch y Marta Sango, respectivamente. Para comenzar, Guasch tiene una candidez estupenda, con una emoción distinta. No obstante, no logra dejarse poseer por el espíritu de Casado y en varios momentos, se ve en la reiteración de una expresividad más grotesca, acabando en un carácter más impostado. Al contrario que Sango, la cual demuestra una presencia escénica camaleónica, que se aleja de su imagen ya conocida en el programa de “Operación triunfo”. Gracias a ese salero y a una perspectiva interpretativa más propia, consigue que su Susana Romero sea más fresca e innovadora. Tiene esa pizca de glamour combinado con un bagaje de barrio, que dan una interpretación totalmente compacta y para aplaudir. Sin querer, puede opacar a Guasch.

Luego, Roko esta totalmente consolidada como la hermana Milagros, ya que se puede ver lo bien asentada que tiene el personaje sobre la obra. Esa ingenuidad tan blanca, que se mezcla con la torpeza simpática y ese humor llevado al extrema. Además, Roko sabe cómo utilizar su lenguaje corporal ante una comedia más física, con escenas que se convierten en un verdadero festín de carcajadas y de gran disfrute. Indudablemente, es una de las mejores actrices de la obra. Por otro lado, Mar Abascal es la encargada de dar vida a la madre Bernarda, con una concepción que se aleja de compañeras que se han metido en la piel de la singular monja. Con esa socarronería tan bien planteada, triunfa sin problemas. Por último, Paco Arrojo se queda en un plano más secundario, donde todavía no ha evolucionado una mayor fuerza sobre el escenario.

Una fórmula que funciona

Como se ha mencionado antes, La llamada lleva varios años en el Teatro Lara y alrededor de la geografía española. Incluso, obtuvo la oportunidad de ser representada en México. Una de las razones por las que sigue siendo uno de los referentes musicales de la escena teatral es la utilización de música en directo. No se puede negar que esa característica presencial, ya le da una oportunidad de lucirse en su propuesta escénica. También hay que agradecer la expansión del espacio, llevando este universo a las propias butacas de los espectadores. Por lo que, se aprecia que se haya adaptado la obra a las medidas sanitarias, para permitir manteniendo la información que había. Así, la función transcurre sin problema y se vuelve a demostrar que los teatros son lugares seguros.

El espacio aprovecha muy bien los propios elementos sobre el escenario, por lo que dentro de ese minimalismo, también saben darle vida a lo que está sucediendo. Por lo cual, la coreografía que se prepara, explica muy bien el detalle ante el homenaje pop de sus autores. Con respecto a la música, la selección es conocida por todos, pero eso no quita que cada día lo hagan de una forma distinta, lo que da también la incertidumbre y el dinamismo de su ejecución en escena. También sería importante destacar el diseño de iluminación y otros aspectos técnicos, como la máquina de humo, que sirven para terminar de introducir al espectador dentro de la historia. Gracias a ello, el montaje es liviano, incluso con dos horas, lo que hace que sea una celebración en toda regla.

Conclusión

La llamada es una obra con un mensaje de esperanza, de continuos cambios y la búsqueda de un yo que parece lejano. Mediante el guion de la obra, se sumerge en una realidad llevada al extremo con un carácter jocoso y socarrón, que sabe dónde posicionarse para equilibrar las carcajadas con la propia acción de la pieza teatral. Por otro lado, el reparto realiza una labor muy notable, en especial, Marta Sango que demuestra el carácter que tiene su personaje. En conclusión, los elementos plásticos de la obra invitan al público ser parte de la historia. También destacar las medidas sanitarias, que se cumplen a rajatabla, siendo una experiencia totalmente segura. La música y el humor ascienden a un musical que ya es todo un referente.

Únete a nuestro CANAL DE TELEGRAM