Dallas Buyers Club, película de 2013 de Jean Marc Vallée, cuenta una historia basada en un personaje real, Ron Woodroof. Fue un electricista de Texas aficionado al rodeo, al que se le detectó el VIH en un chequeo médico, y fundó un Club de compradores en Dallas (Dallas Buyers Club) de medicinas alternativas al AZT, el medicamento que, en aquella época, 1985, se recomendaba para el SIDA por la FDA, aunque entonces todavía estaba en una fase de prueba.
La película ganó 3 Oscar: mejor actor, mejor actor de reparto y mejor maquillaje. También estuvo nominada al mejor guion original, (de Craig Borten, que 20 años atrás había entrevistado a Ron Woodroof y Melisa Wallack), entre otras candidaturas.
Crítica de 'Dallas Buyers Club'
Resumen
Ficha Técnica
Título: Dallas Buyers Club
Título original: Dallas Buyers Club
Reparto:
Matthew McConaughey (Ron Woodroof)
Jennifer Garner (Eve)
Jared Leto (Rayon)
Steve Zahn (Tucker)
Dallas Roberts (David Wayne)
Denis O'Hare (Dr. Sevard)
Griffin Dunne (Dr. Vass)
Kevin Rankin (T.J.)
Lawrence Turner (Larry)
Michael O'Neill (Richard Barkley)
Deneen Tyler (Denise)
Donna Duplantier (Enfermera Frazin)
Ian Casselberry (Ordenanza hispano)
J.D. Evermore (Clint)
Noelle Wilcox (Kelly)
Año: 2013
Duración: 117 min.
País: Estados Unidos
Director: Jean-Marc Vallée
Guion: Craig Borten, Melisa Wallack
Fotografía: Yves Bélanger
Música: Varios
Género: Drama. Biográfico
Distribuidor: Vértigo Films España
Tráiler de 'Dallas Buyers Club'
Sinopsis
Hijo de Texas, Ron Woodroof es un electricista y cowboy de rodeo. En 1985, está metido en un estilo de vida temerario, que no se replantea. De repente, Ron es diagnosticado como seropositivo y se le dan 30 días de vida. Sin embargo no acepta su muerte. Su curso intensivo de investigación revela la falta de tratamientos aprobados y medicamentos en los EE.UU., así que Ron cruza la frontera a Méjico. Allí, averigua sobre tratamientos alternativos y comienza a hacer contrabando con los Estados Unidos, desafiando a la comunidad médica y científica incluyendo a su médico, la Dr. Eva Saks (la ganadora del Premio del Sindicato de Actores de Cine Jennifer Garner). (Vértigo Films España)
Dónde se puede ver la película en streaming
Dos grandes interpretaciones de McConaughey y Leto
Nos encontramos con dos grandes interpretaciones de Matthew McConaughey y Jared Leto, que obtuvieron el Oscar por ambas. El primero, como actor principal, hace el papel de Ron Woodroof y adelgazó unos 21 kilos para darle vida. El segundo, Jared Leto, adelgazó también bastante, unos 14 kilos, e interpreta a Rayon, una persona trans enferma de VIH que conoce al personaje de Ron en el hospital y crea con él el Club de compradores para ayudar a otros enfermos a encontrar tratamientos menos invasivos, y de paso lograr un buen dinero.
La transformación física suele ser muy bien vista por los académicos y ese año, el actor tejano Matthew McConaughey le arrebató el Oscar al propio Leo Di Caprio, que había hecho un excelente papel en El lobo de Wall Street.
La homofobia de Woodroof y el papel de Leto
Es muy comentado el cambio físico radical del actor de Texas, al que es de suponer que le ayudó su procedencia para dar vida a Woodroof, si bien en la película hay algunas diferencias entre el personaje real y el de ficción.
Ron Woodroof no era homófobo, según cuentan las personas que lo conocieron, e incluso alguna de sus ex esposas lo califican de bisexual. En Dallas Buyers Club sin embargo el personaje es un homófobo que trata con desprecio a las personas LGTB, a las que llama “maricones de mierda” en alguna ocasión.
Quizá esto no es más que una estrategia para hacer que el personaje se endulce a los ojos del espectador a medida que la historia avanza, especialmente cuando se encuentra y se asocia con Leto (Rayon).
También existió cierta polémica por este papel, ya que algunas asociaciones de transexuales se quejaban de que fuera un hombre el que lo interpretara cuando podía haber sido interpretado por alguna mujer trans.
Pero la verdad es que el personaje ficticio de Rayon, que en realidad no existió, da mucho juego en Dallas Buyers Club, no sólo por su importancia en la constitución del club sino también por el cambio que produce en el protagonista, que, de odiar a los homosexuales, termina defendiéndolos (como en esa escena en el supermercado con un antiguo amigo de profesión y de aventuras sexuales).
Buscar una solución a lo que te queda de vida
La idea fundamental de Ron es conseguir que su casi sentencia de muerte (le dan 30 días de vida cuando le diagnostican el VIH) se convierta en algo irrisorio, en una “tontería” de los médicos que le atienden.
Él se encargará de hacer que eso no se cumpla. Va contando los días. Y superará 30 y bastantes más. Diagnosticado en 1985, murió sin embargo en 1992. Él se automedica, estudia sobre la enfermedad (muy icónica esa escena en la biblioteca o aquellas en las que se adueña de un montón de folletos sobre la enfermedad), rechaza el AZT cuando descubre que es nocivo en muchos aspectos y viaja a México para encontrar nuevos medicamentos y también venderlos a personas con SIDA, cuya muerte puede estar próxima.
La verdad es que a él no le mueve un interés altruista, y en eso la película no engaña, ni tiene un sentimentalismo desmesurado que la haría inapropiada. Él quiere dinero y salvar su vida, y si de paso puede ayudar a otras personas, mejor.
Así por ejemplo intenta ayudar a Rayon que, sin embargo, sigue drogándose y no tiene una vida muy saludable, a diferencia de él mismo, que cuando descubre los combinados de algunas medicinas, y complementos de vitaminas, empieza a dejar las drogas poco a poco y también el alcohol o el sexo de riesgo (aunque no del todo). Su búsqueda del péptido T y de otras nuevas medicinas es casi obsesiva también.
La parte de Dallas Buyers Club que no me convence
Hay una perspectiva de Dallas Buyers Club que no me llega a convencer. Por ejemplo, las filas de personas con VIH en el Club son tratadas de una manera algo impersonal: gente pasando a la que se le dan unos tubitos de medicina y … que pase el siguiente. Además, Ron les exige que paguen 400 dólares para formar parte de la Asociación. Es como un trato muy de “mercancía humana” de esas personas que están muriéndose. Parece ser que la mayoría de estos tipos de club no cobraban (aunque quizá cobraran los tratamientos)
Por otra parte, mientras esa gente pasa por una situación delicada, terminal, Ron puede viajar a otros países en busca de soluciones en forma de medicamentos. Y así lo vemos viajar a Japón, Israel u otros países. Digamos que su nivel de vida no tiene mucho que ver con el de la mayoría de los enfermos a los que atiende.
También puede demandar en juicio a la FDA, a la que no gana por una simple cuestión legal. La administración de medicamentos americana se muestra como una organización que testea las medicinas de las grandes farmacéuticas sin conocer realmente los efectos secundarios. Pero las medicinas que vende Ron son declaradas en un principio como no reconocidas y después ilegales.
Los médicos que tratan a Ron, especialmente la doctora, le derivan algunos de sus enfermos y tienen una buena relación con él. Aunque parece que esta médica tampoco existió en la vida real.
Conclusión de 'Dallas Buyers Club'
Creo que es una película correcta, que trata un tema controvertido, una película valiente y que no raya en el sentimentalismo, con dos grandes actores haciéndolo de una forma brillante. Y hay escenas fuertes que se quedan en tu memoria.
Narra una lucha por la supervivencia de un ser humano que se enfrenta a todo y a todos con el fin de salvar su vida. Y en ese objetivo, Dallas Buyers Club lo muestra bastante bien.
Es digna de admirar una película con esta temática, ahora que el Sida ya no parece tan fiero como en esos primeros años. Y hace un poco una labor de memoria histórica de unas personas que tuvieron la mala suerte de infectarse justo al principio, cuando nadie sabía muy bien cómo tratar la pandemia.
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