"Respira": Llamada de emergencia

Respira, primera serie sobre drama hospitalario de Netflix en España creado por Carlos Montero (Élite) que se estrenó el 30 de agosto de 2024. Esta serie de ficción de 8 capítulos por Najwa Nimri (La casa de papel, Sagrada Familia), Aitana Sánchez-Gijón (Madres paralelas, La Regenta), Blanca Suárez (Las chicas del cable, Jaguar), Manu Ríos (Élite, El silencio), Borja Luna (Cristo y Rey, Sin huellas) y Alfonso Bassave (Estoy vivo, Antidisturbios).

Crítica de 'Respira'

Ficha Técnica

Título: Respira
Título original: Respira

Reparto:
Najwa Nimri (Patricia Segura)
Aitana Sánchez-Gijón (Pilar Amaro)
Blanca Suárez (Jésica)
Manu Ríos (Biel)
Borja Luna (Néstor)
Alfonso Bassave (Lluís Jornet Blasco)
Joseph Ewonde (Agustí SAMU)
Paola Michelle (Mia)
Abril Zamora (Neus)
Xóan Fórneas (Quique)
Macarena de Rueda (Rocío Fuster)
Ana Rayo (Leo)
Marwa Bakhat (May)
Blanca Martínez (Blanca)
Juan Fleta (Anestesista)

Año: 2024
Duración: 50 min.
País: España
Director: Carlos Montero (Creador), Marta Font, David Pinillos
Guion: Paola Michelle, Carlos Montero
Fotografía: Óscar Durán
Música: Lucio Godoy
Género: Drama
Distribuidor: Netflix

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IMDB

Tráiler de 'Respira'

Sinopsis

El Hospital Joaquín Sorolla es mucho más que un centro médico público en Valencia donde se salvan vidas a diario. Médicos y residentes trabajan sin descanso al ritmo frenético de la sala de urgencias, donde las tensiones, las emociones e incluso el deseo aceleran el pulso de un personal que vive cada vez más al límite. La llegada de una paciente prestigiosa pone de relieve la complicada situación de la sanidad pública y enciende la mecha de lo que se convertirá en una drástica huelga sin precedentes. (HBO Max)

Dónde se puede ver la serie en streaming

Una serie que lucha por capturar la realidad de la medicina en tiempos de crisis

Respira, serie creada por Carlos Montero, es un drama médico que intenta abordar la dura realidad del sistema de salud pública y los desafíos enfrentados por los profesionales médicos en su día a día. La historia sigue a Biel, un residente que está en los primeros meses de su carrera en un hospital público, sacrificando su vida personal para convertirse en el mejor médico. Sin embargo, sus ideales se ven puestos a prueba cuando el hospital se enfrenta a una huelga total, sin servicios mínimos, organizada por los sanitarios para protestar contra los recortes y concienciar a la población sobre la importancia de su trabajo.

Un reparto que no logra transmitir la intensidad de la situación

Manu Ríos que interpreta a Biel, se esfuerza por encarnar la lucha interna de un joven médico atrapado entre su ética profesional y la realidad de un sistema en crisis. Sin embargo, la actuación se siente plana en muchos momentos clave, y no logra transmitir plenamente el peso emocional y la complejidad de su dilema.

El elenco secundario, que incluye a otros residentes y médicos veteranos, también falla en crear personajes que realmente conecten con el espectador. Aunque la serie Respira intenta mostrar las diferentes perspectivas de los médicos más jóvenes y los más experimentados, la falta de desarrollo en los personajes hace que sus luchas se sientan superficiales y carentes de impacto.

Un concepto prometedor que se queda en la superficie

La trama de Respira tiene el potencial de ofrecer un drama intenso y relevante, dado el contexto de una huelga en un hospital público y la crisis en la sanidad. La serie plantea cuestiones importantes sobre la ética médica, la lucha laboral y los efectos de los recortes en un sistema ya sobrecargado. Sin embargo, la ejecución de estos temas es deficiente, ya que la serie no logra profundizar en las emociones y los conflictos internos de los personajes.

El enfoque en la huelga podría haber sido una forma poderosa de explorar el dilema ético de los médicos, pero la narrativa se siente desordenada y a menudo pierde el foco. En lugar de ahondar en las complejidades del tema, la serie recurre a clichés del género médico, lo que diluye el impacto que podría haber tenido.

Una representación mediocre del entorno hospitalario

La serie Respira no logra capturar la intensidad y el caos que caracterizan a un hospital en crisis. La cinematografía es adecuada, pero carece de la energía visual necesaria para sumergir al espectador en la atmósfera tensa del hospital. Los escenarios, aunque realistas, no se utilizan de manera efectiva para transmitir el estrés y la presión que enfrentan los personajes.

La banda sonora y el diseño de sonido son funcionales, pero no destacan en ningún aspecto particular. No logran añadir una capa adicional de tensión o emoción a la serie, dejando la narrativa algo vacía en momentos cruciales.

Conclusión de 'Respira'

Respira es una serie que, aunque intenta abordar temas importantes y relevantes, no logra cumplir con las expectativas que su premisa establece. Con una ejecución superficial y actuaciones que no alcanzan la profundidad necesaria, la serie se siente como una oportunidad perdida para ofrecer un retrato auténtico y conmovedor de la vida en un hospital público durante una crisis.

Es una serie que decepciona a pesar de su potencial. La falta de desarrollo de los personajes, la narrativa desordenada y la incapacidad de transmitir la intensidad de la situación hospitalaria hacen que Respira se quede corta en su intento de ser un drama médico impactante. Aunque aborda temas importantes, su tratamiento superficial y predecible impide que logre una conexión duradera con el espectador.

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